YING & YANG

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El sonido del fuego crepitando en el cielo era incesante.

En la entera calle oscura como la noche, innumerables flamas volaban hacia todos lados entre la oscura nube.

―¡¡...!!

―... ¡¿...?!

Lo que era un metal filoso, era el cuchillo cazador de Kuroiwa, el cual se balanceo ferozmente entre las mareas rojas del fuego.

Miruko bloqueo el ataque, escondida entre el vapor y el humaredal. El viento soplo con vehemencia y poco a poco un claro entre el bosque de fuego ella apareció.

Ligera como una pluma, ondulante como un pendulo. Habilidosa como nadie más. Miruko era la mujer heroína Top 6 de todo Japón y que ahora se encontrara contra la espada y la pared no podía ser más insultante para ella.

Quizás, para su ego.

Sin embargo, ella no se podía detener o perder entre esa arrogancia. Ella tenia algo en mente, ella sabia y concebía que muchos no. Eso era la opción de morir.

Siempre que salía a combatir iba con la mentalidad de que en algún momento podría llegar a ser lastimada de gravedad y así, morir.

Eso estaba bien para ella, incluso sentía que ese seria su final mas justo. Pero algo que no podía aceptar, algo que en su cabeza no era mas que ideas reacias. Una elección que ella jamás tomaría, dejar que alguien muriera detrás de ella.

Su cuerpo musculado, con la altura de Endeavor. Kuroiwa a pesar de no tener quirk era sumamente fuerte, tanto como para poner contra las cuerdas a la heroína Miruko.

Tomada por sorpresa por las anteriores explosiones y rodeada de una densa oscuridad, no había posibilidad de huir. Por el contrario, el sonido de la batalla había comenzado a atraer personas y espantar algunas de ellas. Muchas quedaron atónitas fuera del fuego de las nubes. Al filo de la calle, en las esquinas, ventanas, puertas o cualquier sitio donde tuvieran visión del suceso.

Algunos protegiendo a otros.

Mientras que, dentro de ese sitio formado por el estallido de granadas vibraban con fuerza innumerables chispas que volaban por todos lados.

El jadeo de la heroína se entrelazaba con los gritos de batalla de Kuroiwa.

Parecía que Kuroiwa no podía ocultar una emoción en su rostro, en particular extraña para la situación que se encontraba. Pánico.

Aun con su mano derecha hecha trizas por la patada de Miruko, este parecía no querer detenerse o mas bien no poder hacerlo.

Al contrario de Kuroiwa, Miruko a pesar de la situación no mostraba signos de desesperación o pánico. Fuera de la preocupación de las personas a su alrededor, su temple estaba donde debería estar. Ella estaba analizando, pensando y observando.

El ojo derecho lleno de sangre y los gritos en desespero por querer acabar con la pelea ahora mismo.

Kuroiwa era un títere a la vista de Miruko.

»¿Por qué...?

Miruko inclino su cabeza hacia un lado.

»¿No eres tú...?

Quizás se había percatado tarde o estaba dando muy rápidas conclusiones. Lo único que sabia es que estaba perdiendo el tiempo.

Los estallidos de hace un momento, el estruendo que sacudió el suelo. Algo grande estaba sucediendo a unas cuantas calles de ahí y eso era lo que a Miruko le preocupaba y a la vez molestaba.

Decay:KING OF VILLAINSWhere stories live. Discover now