27. La zona C

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Loren señalo a un par de señoras que se acercaban. Reconoció a Mindy, era la mujer que les quito las llaves de la moto a Samuel y Loren cuando Kevin apenas los conocía. En cuanto a Flora, era la señora que servía la comida. Ann vio a Flora y se lanzo a sus brazos como si fuera su madre. Kevin no entendió nada. ¿Cuándo se habían hecho tan cercanas?

-Oye.- Sam reclamaba su atención.- Ven, quiero preguntarte algo.

Se alejaron un poco del grupo, lo suficiente como para que no escucharan nada.

-No quiero incomodarte pero... ¿Qué ocurrió? Es decir, cuando nos dimos cuenta los cazadores habían vuelto y Mike.... Bueno. Tú sabes lo que ocurrió.

Kevin asintió, vio a Loren acercarse y espero hasta que estuviera junto a ellos para comenzar a contar.

-Mike nos llamo a Ann y a mí, nos comento un par de cosas sobre nuestra conexión. Estaba concentrado sobre lo que estaba diciendo y de repente le dispararon en la cabeza. Intentamos saltar a otro lugar pero nutilizaron algo pareció al cloroformo y no pudimos hacer nada.

Loren asintió.

-¿Y qué es eso que llevas en el cuello?

Kevin les conto muy resumidamente que era y como podría quitárselo.

-Suena mal, ¿verdad?- Kevin suspiro, mirando en aparato. Samuel le dedico una mirada sorprendida y nego con la cabeza.

-Es increíble que estés aquí, Kev. Nadie escapa de los cazadores y mucho menos cuando lo llevan junto a los científicos.- Loren tuvo un escalofrió que lo sacudió.- ¿Cómo fue?

Sam le hundió el codo en el estomago y le miro con los ojos muy abiertos. Loren comprendió y bajo la cabeza un poco.

-Perdona, no debería haber dicho eso.

-No, no pasa nada. Es solo que... Todavía me cuesta asimilarlo.

-No te preocupes, Kev. Cuéntanoslo cuando te parezca.- Le dijo Sam. Kevin no pudo evitar la sonrisa.

-H-Hola chicos...- Una vocecilla hablo detrás de ellos. Kevin se giro más rápido que los demás para observar a Ann. Loren y Sam tardaron algo más. Ann parecía avergonzada... Como si hubiera hecho algo malo y no debería estar ahí.

-¡Ann! ¿Qué tal estas?- Sam la abrazo de repente, Ann parpadeo varias veces por la sorpresa.

-Sam, deja a la chica o Kevin te arrancara la cabeza. Míralo, parece que vaya a matarte.

Kevin parpadeo un par de veces, ¿de verdad ponía una cara así? Automaticamente miro hacia la pared. Loren estallo en risas, junto con Sam.

-¡Te lo has creído! ¡Te lo has creído!- Gritaban a coro.

-¿Qué tenéis? ¿Cinco años?- Les dijo Kevin, podía notar el rubor en su cara. Sam le saco la lengua y Kevin se lanzo para agarrarle del cuello, Sam lo esquivo. Mientras ellos se peleaban, Loren se giro hacia Ann.

-¿Cómo te encuentras?

-Bien, gracias.

Loren miro a Sam y a Kevin, en su rostro apareció la pena, de repente era como si sus hombros pesaran demasiado. O al menos eso le pareció a Ann.

-Loren... ¿Qué ocurre?- Ann le sonrió un poco.

-Solo quería pedir perdón...- Se rasco el cuello y miraba al suelo.- Entre Sam y yo, yo era el que más se esforzaba para que no estuvierais juntos.

-Se porque lo hiciste. No querías que Kevin muriera.- Ann se quedo callada un rato y hablo un poco mas bajo.- También se lo de Vanessa.

Loren metió las manos en los bolsillos.

-¿Te lo ha dicho Kevin?- Ann negó.

-Vanessa me lo conto. Antes estabais juntos y entonces... Paso esto.

Loren asintió y cogió aire para después echarlo en un largo suspiro. Después se giro hacia Ann y le sonrió.

-Eres alguien increíble.- Ann no supo cómo reaccionar y Loren se encogió de hombros.- Pensé que deberías saberlo.

Ann abrazo a Loren, quería decirle algo para animarle pero no dijo nada. El amaba a Vanessa, y Vanessa lo amaba a él, pero no podían estar juntos. Jamás podrían demostrarse cuanto se amaban y no había manera de sanar una herida de ese tamaño.

-Yo te apoyo, Loren.- Le dijo sobre su hombro. – Me pareció que deberías saberlo.- Dijo esta vez Ann, lo que le saco una sonrisa a Loren.

-Mientras Kevin no se ponga celoso...- Dijo. Ambos estallaron en risas que atrajeron a Sam y a Kevin.

-¿De qué os reis?- Pregunto Kevin mirando solamente a Ann.

-De ti, idiota.- Le dijo Sam. De nuevo se enzarzaron en otra pelea. Loren y Ann se miraron.

-Vamos, te enseñare como es la nueva zona.- Le dijo Loren. - En cuanto a esos dos... Bueno, estaran bien.- Dijo encojiendose de hombros y mirando a Ann.


A la noche

Ann se sentó en una de las sillas del pequeño comedor improvisado. Estaban en la zona C, la zona más segura de todo el recinto. Loren le había contado como habían debatido la idea de quedarse aquí, pero al final, como no tenían lugar a donde ir, decidieron quedarse y centrarse en las defensas.

Mindy organizo las defensas y dio clases básicas de combate a algunas personas. Flora tranquilizo y organizo a la gente, se encargo de la comida, las habitaciones y de las personas que entraban en pánico o les entraba ansiedad. Hacían un buen trabajo, segun decian los chicos.

Loren se sentó junto a ella y dejo una bandeja delante de Ann.

-Gracias. ¿Qué me estabas diciendo sobre las habitaciones?

-Oh si.- Loren acabo de masticar el tomate de su ensalada y se giro un poco.

-Veras, teníamos muchas armas y calabozos bajo tierra por si en algún momento conseguíamos coger a algún cazador. Eso nunca ocurrió pero ahora utilizamos ese lugar para pasar la noche. Es muy extenso, hay cientos de habitaciones. Nos costó dos días vaciarlo todo, y aun hay zonas atestadas de armas y otras cosas.

-Espera, ¿dos días? Pero si solo hemos estado un día con los cazadores.

-¿Un día? Ann, lleváis una semana desaparecidos.

Almas UnidasWhere stories live. Discover now