CARTAS DE UN ASESINO

Discusiones

-¿Qué es eso que escucho al fondo?- preguntó Alex con voz seria.- ¿Es eso música?

Hacía tiempo que no hablaba con su hermana, desde que había llegado a Memphis solo había podido hablar con ella unas cuatro veces. No podía dormir, así que decidió molestarla por un rato, ya que ésta siempre dormía con el celular a su lado y casi siempre con volumen, sin embargo no esperaba que su hermana contestara tan animada.

Debía de estar durmiendo.

-¿Ah?- Valeria se hizo la desentendida.- Eso, sí, es música, pero es que el vecino hizo una fiesta. Puedes creer que han estado así desde hace horas y no me dejan dormir, creo que voy a llamar a la policía. ¿Quiénes se creen para tener semejante ruido? Aunque lo hacen porque saben que mi hermano el policía no está.

Alex pudo haberle creído, su hermana sabía actuar muy bien cuando se lo proponía. Sin embargo, a esa hora de la madrugada estaba lo suficientemente consiente como para darse cuenta del tono inocente que su hermana usaba para despistarle.

-Valeria, no soy tonto, además de que soy policía y tu hermano.- dijo con voz lenta el agente, como cuando quería hacerle entender algo a un niño pequeño.- ¿De dónde es esa música?

-Si insinúas que es mentira...

-Perdón, no quería insinuarlo. Estas mintiendo, ¿te gusta así?

Valeria se quedó en silencio al otro lado. Alex no pensaba hablar hasta que ella contestara.

-Entonces, ¿cómo te ha ido en tu trabajo?

"Que descarada"

-No me quieras cambiar de tema, jovencita.

-No lo hago a propósito, realmente estoy interesada en saber como va la investigación.

Alex podía jurar que su hermana sonreía de oreja a oreja al otro lado.

-Voy a decirle a Luis que vaya a checarte.

Luis era uno de sus compañeros de trabajo en el cual confiaba.

-¡No!- exclamó su hermana. Se le había borrado la sonrisa.- No es necesario, hermanito.- dejó salir una risa nerviosa.- De hecho no me molesta, solo jugaba. Mejor descansa, que ya es muy tarde, deberías estar durmiendo.

-Eso digo yo, son las tres de la madrugada.

-Bueno, es que esperaba tu llamada.

Alex casi gruñó al teléfono.

-Apaga esa música, saca a tus amigos de mi casa y acuéstate a dormir, no lo diré dos veces.

-¿Qué te hace pensar que mis amigos están aquí?

-Justo ahora le estoy enviando un mensaje a Luis.

Su hermana se quejó.

-Ay. Está bien.- se resignó su hermana.- Les diré que se vayan, igual ya estábamos terminando. ¿Estás enojado?

-Justo ahora estoy pensando en enviarte a casa de la abuela.

-No, con ella no, la amo, pero me dará comida que me hará engordar.

-Con todas tus cosas, ya no te quiero ahí. De hecho, creo que no quiero verte ahí cuando regrese.

-Eres un amargado.- sentenció Valeria.- Una fiesta no le hará daño a nuestra casa. Además, me extrañarías mucho si me voy, y tomaré ese "creo" como que me puedo quedar. Nos vemos hermanito, cuídate y recuerda que eres el más.