CARTAS DE UN ASESINO

Defensa

-¿Es ella la asesina?

-Sí.- dijo Alex observando a Maia Williams a través del cristal que daba hacia la otra habitación.- Ella lo hizo.

-Lo dice con mucha seguridad, agente.- dijo un hombre alto y de cuerpo atlético, de cabello castaño y unos ojos grandes de color café, que acompañaba al agente Alex, Marcos Bolaños, él sería el fiscal en el caso.

Hacía unas horas habían llegado a la Fiscalía, Marcos se veía sumamente interesado en los asesinatos. Él junto con otra persona se encargaría de llevar a cabo la acusación. Planeaban tener una pequeña entrevista con Maia antes de llevarla con el Juez de control.

Tenían un tiempo aproximado de 40 horas para hablar con ella, aunque eso era en teoría, porque en cuanto llegara el abogado de la chica tendrían que apresurarse.

-Más de la que realmente tengo.- aseguró Alex con un leve encogimiento de hombros. Todavía tenía ese sentimiento de desconfianza en su interior a pesar de haber visto aquellas cartas.

-¿Duda de que sea ella después de haber leído las cartas?- preguntó el fiscal con una leve sonrisa.- Admito que no son pruebas suficientes para probar su responsabilidad ante un juez, sin embargo, aquí entre nos, podemos decir con toda libertad de que ella es culpable.

Ambos hombres observaron a Maia Williams. La chica estaba sentada en una silla de metal frente a una mesa de madera, desde que llegaron la habían metido a aquella habitación en donde normalmente los fiscales entrevistaban a los acusados antes de llevarlos ante un juez, de igual manera hacían las negociaciones para llevar a cabo un procedimiento abreviado.

Maia no daba señales de vida, estaba estática en su asiento, sus manos cruzadas en su regazo y su mirada baja la hacían ver como si estuviera durmiendo. Lo único que les decía que estaba despierta era el leve temblor que movía el cuerpo de Maia.

El fiscal, a esas alturas de la situación, le estaba permitiendo a Alex involucrase en el asunto todavía.

-Las cartas dicen que ella lo hizo.

-¿Pero? Eso me suena a que hay un pero. ¿Usted cree que ella lo hizo?

-¿Eso importa?

-Para mí sí, porque soy quien sostendrá la acusación ante el juez, si no creo que ella lo hizo, ¿cómo haré que el juez lo crea?

-Tiene razón, por eso ese es su trabajo. Usted está muy seguro de que ella lo hizo, sin embargo yo aún tengo mis dudas, tal vez no sobre su culpabilidad sino sobre como lo hizo.- Alex se pasó la mano por el cabello, no seguro de como expresar sus pensamientos. Era la primera vez que se sentía de tal manera, siempre sabía que decir y como hacerlo, pero justo en ese momento no había un plan desarrollándose en su mente.- He leído sus intenciones, esas me constan, es solo que su imagen no me termina de convencer.

-Cualquiera puede ser un asesino.- dijo el fiscal.- Aunque ahora que lo dices realmente me pregunto cómo logró subir el cuerpo de esa chica hasta la azotea del edificio.

La carpeta permanecía abierta delante Marcos, quien estaba leyendo como iba el asunto.

-Eso estamos por saber.- le dijo Alex.

-Es por eso que trabajaremos juntos, usted será de mucha ayuda para que ella no solo sea acusada por el asesinato de Helena, sino por el de todas.- dijo el fiscal cerrando la carpeta y la tomó entre sus manos.- Le daré el privilegio de entrevistarla, al final usted ha estado más tiempo con este caso que yo. Solo apresúrese, antes de que llegue su abogado.