Capítulo 11 | Rebelde

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La siguiente semana hablaron de beso que me había dado con Alexander en el gimnasio. ¿Sinceramente? Le correspondí, porque ¿Quién no lo haría? Alexander Hale estaba bueno, era atractivo, sus técnicas la ligar eran estupendas y aunque todo esto no se lo diría en la cara tampoco me sentía mal por besar al chico que había obtenido mi virginidad. Viniendo de mí, luego de hacer todo el berrinche que hice, no es normal que diga todas estas cosas y para cualquier diría que soy rara pero cambio de parecer demasiado constante y ya eso muchos lo saben.

-...Y pensé que podíamos quedar en mi casa o la tuya para ir a la fiesta que organizará María por las vacaciones. ¿Te parece?

Sam. Estaba hablando conmigo pero yo no estaba prestándole atención en definitiva y me sentía mal al respecto, no es de las chicas que hablan de revistas, ropa o chicos constantemente o de como se ve su cabello siempre. Era una de las razones por la que le permitía que me hablara, además, parecía agradarle a todo el mundo y eso cuenta.

- ¿Es necesario ir a esa fiesta? Podemos quedarnos en casa, invitar a los chicos y donde vivo hay una piscina. Podría ser divertido. -Sugiero.

Realmente no sé porque propuse exactamente eso, bueno tendiendo a que las fiestas son mis enemigas por ahora viniendo de la gente del instituto claro está, Charlie probablemente me dejará hacer una evento social ya que últimamente lo que hago es ser una rebelde que come en su habitación y no le dirige la palabra a nadie.

Se lo piensa un momento y dice; -Suena genial, algo íntimo no nos vendría mal. Jase estará gustoso de ir y ya que la casa es de su tío, mi mamá no tendrá problema en que me quede contigo. No les gustan mis amigas. ¿Invitaremos a alguien más?

- ¿No podemos ser solo nosotros? Prometo que no diré nada de lo que vea.

A pesar de que se sonroja por lo que digo igual sonríe.

-Creo que no... Será demasiado íntimo y necesitaremos más personas, le diré a Jase que invite a su grupo de amigos y que traigan a sus novias universitarias. -Vuelca los ojos. -Menos gente de la escuela es mejor, ¿Le dirás a Alex?

Dejo de jugar con la papa de mi plato y la miro unos segundos antes de suspirar.

-Supongo que sí.

Ella me sonríe y le hace señas a alguien para que se lleve todos los platos, luego de la escuela ella decidió que salir solas era lo adecuado. Se lo preguntaré luego a Jase, probablemente fue él quien le dijo que se hiciera más mi amiga por mi falta de comunicación luego de la fiesta. No me sorprende que todos lo supieran, asumen que yo salgo con Alexander cosa que es buena dicha por él mismo. Pero para mí mientras permanezca alejada de toda la gente de instituto, mejor.

Ya a jueves, Casey había entendido muy bien el mensaje detrás de haz las cosas tú mismo había un déjame en paz si no lo haces bien. Sí, claramente se siente culpable por lo que había mandado hacer pero ¿Es posible? Un chico como él no debe tener sentimientos, para su trabajo no debe tener más que la sangre fría peor que un ruso o un chino. Y desde entonces no me ha llamado, y así es mejor creo.

-Ya tengo que irme. -Dice Sam mirando su teléfono. -Mi mamá me quiere en su oficina, será mejor que corra. Puedo irme contigo después de la escuela mañana, así organizamos todo bien.

Ella me sonríe una vez más antes de irse, me termino la malteada que ordené y me levanto dispuesta a caminar a casa. Le dije al transporte asignado que me iría por mi cuenta y hasta se me olvidó decirle a Sam que me diera un aventón, ya que va demasiado apurada.

Esta semana en la casa ha sido... tranquila. Y me preguntaba por qué, Antonelle ni siquiera se asomaba fuera de su habitación y yo evitaba preguntarle a Charlie a sabiendas que algo le estresaba cada vez que le veía la cara. No parecía demasiado feliz y lo único que pasa por mi cabeza es que la pelea que tuvieron es demasiado fuerte y seguramente los lleve al divorcio. No puede ser nada más luego de la distancia.

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