Capítulo 28 | Sentimientos

413 52 9
                                    


Ya íbamos a mitad de la fiesta y Casey ni siquiera había hecho presencia, tampoco nadie lo había visto por el pasillo para decir que se ha marchado. Realmente es fuerte y orgulloso.

Jase y Sam se habían ido antes de tiempo, así que yo estaba sola por un lado de la sala porque no quería meterme en los asuntos de Antonelle y Charlie, quienes parecían feliz hablando con Barry y algún hermano de él.

Yo como no tengo que pensarlo tanto, decidí seguir el camino donde se había marchado Casey. No sé realmente porque lo persigo pero quería asegurarme si aún seguía aquí, Casey también tiene muchos problemas y muchas cosas con las que lidiar. A veces solo pienso que no debería señalarlo tanto, pero por otra parte tampoco es que esa vida se la dieron más que él mismo la escogió.

Deslizo las puertas traseras cuando lo veo a través de ellas sentado en una de las sillas de playa, sin la chaqueta y con varias copas de vino alrededor de él. Seguramente Mus lo ha estado atendiendo bien.

Mis zapatos suenan cuando me encamino hacia él por lo que se vuelve y bufa de inmediato.

—No voy a lidiar contigo de nuevo. —Escupe.

—Solo vine a ver si aún seguías aquí.

Me quedo ahí mientras espero que me diga algo, realmente se nota cansado.

— ¿Por qué? —Pregunta de una vez.

—No lo sé. —Respondo con sinceridad.

La orilla de la piscina estaba cerca de nosotros, cosa que él no dejaba de mirar pensando cualquier cosa que decirme. Si lo ponía a pensar tanto es porque de verdad le afectaba.

—No lo hagas, ¿Crees que merezco ver cómo me tratan todos?

Lo miro con fijeza desde mi posición.

—Pensé que no te importaba.

Él se levanta con una copa en su mano y me encara.

—No me importa. —Dice entre dientes. — ¿Crees que yo merezco que me trates así?

Parpadeo a su dirección, pero la respuesta en mi mente es clara.

Sí.

—No lo sé, Casey. —Respondo en vez de ello.

Chasquea la lengua y lanza la copa a la piscina.

—Piensa lo que quieras, Levae.

Me paso una mano por el pelo ya frustrándome.

—No sé qué quieres que te diga entonces, tú estás completamente loco.

Me echo a caminar de nuevo ésta vez enojada, pero al momento que camino lo siento detrás de mí tomándome por el codo para volverme hacia él. Intenté forcejar con él pero sus brazos se envolvieron a mí alrededor pegándome fuertemente a su pecho.

— ¿Qué demonios estás haciendo? —Chillo removiéndome.

—No te muevas mucho. —Sisea.

— ¿O qué? —Escupo.

—Estoy mareado, si no quieres que nos tumbes en la piscina es lo que te recomiendo.

Me remuevo más fuerte entre sus brazos.

—Sí eso tiene que ser necesario para separarme de ti, bien. —Respondo.

—Tú lo pediste.

Chillo antes de lo que hace y cierro los ojos fuertes, Casey y yo impactamos contra el agua y caemos al fondo. Sus brazos me dejan libre y yo con rapidez nado a la superficie quedándome sin respiración. Al mismo tiempo ambos salimos tomando aire, lo primero que hago es rezongar contra el agua y contra Casey.

Preventive जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें