Capítulo 7 | Fiesta

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Inspecciono el vestido y noto la mirada que me da Mus por el espejo que estaba en frente de mí, ni siquiera es algo que me pondría pero ahora entendía que todo esto requería vivir con los Grayson. No sé si estaba enferma o loca por haberle dicho a Charlie que iría o más bien bajaría a la fiesta que han estado organizándole a Antonelle todo el jodido día. Mientras hacía mi tarea en las escaleras, observaba como ella mandaba a cada quien a poner lo que sea que metiesen a su casa. Es demasiado alboroto para solo anunciar un lanzamiento.

-Te queda perfecto para la ocasión. -Dice Mus tomando mi cabello en sus manos alzándolo en una coleta. -Tal vez te veas mejor con el cabello recogido.

Sacudo la cabeza para que me suelte el pelo, ya todas las ganas que de por sí eran pocas, de ir a esa fiesta estaban esfumándose. No sé cómo pude decirle que sí a Charlie, supongo que el que se esté portando bien conmigo hace que quiera ser buena con él. No es secreto para nadie que siempre estoy a la defensiva.

-Esto es una locura, ni siquiera tengo que asistir. -Digo poniéndome las manos en las caderas observando lo que llevaba encima. -Lo haré por Charlie, pero me iré a esa fiesta de la escuela que me invitaron.

Mus arruga el ceño.

- ¿Tercer día y ya tienes una fiesta?

Me encojo de hombros; -Lo hago porque quiero estar lejos de esta casa, Antonelle es mi excusa. Sí bajo y le digo a Charlie que me marcho seguramente no dirá nada.

Mus está de acuerdo, por supuesto que tenía razón. Charlie solo quería hacerme sentir cómoda aquí pero no creo que una fiesta de Antonelle sea precisamente lo que necesito, de hecho pensándolo bien, quiero saber que es estar cómoda en una de esas fiestas a las que debería estar acostumbrada a ir.

-Puedes bajar, han llegado unos pocos invitados pero seguramente que Charlie te vea la cara es ventaja para que te vayas más rápido.

Me le quedo viendo por el espejo como se marcha de la habitación asignada especialmente para mí, mus no era tan mala que digamos me caía mejor que cualquiera a mi alrededor.

Me retoco el maquillaje con un poco de polvo compacto y suspiro antes de echarme a caminar hacia afuera, tal vez me esforcé un poco pero no quería dar una mala impresión. Recuerda; Lo haces por Charlie.

Tomé el mango de la baranda bajando poco a poco dándome cuenta de la decoración, esta vez Antonelle si se pasó. ¿Esto era sencillo para ellos? Se trata de bombillas blancas resplandeciendo el lugar, jarrones blancos caros, esculturas y arbustos que se utilizan dentro de las casas sin contar que hay un montón de champan y la exhibición de libros de Antonelle, no puedo creer que Charlie siquiera estuviera de acuerdo a tanto alboroto aunque viéndolo por el lado de su estúpida cara de enamorado él estaría de acuerdo con todo lo que mi querida abuela hiciera.

-Levae... estás preciosa. -Ese fue él sorprendiéndome, termino de bajar las escaleras sonriéndole seguramente con las mejillas encendidas por su comentario. -Gracias por bajar.

Me tiende la mano y yo la tomo con un poco de nervios terminando de bajar las escaleras, ni siquiera le respondo a lo último que me dijo pero sí le sonrío. Charlie era amable, no sé porque está involucrado con alguien como mi abuela, de todas maneras, ¿Cómo se lo ganó?

-Quería hablarte de algo, de hecho. -Llamo su atención antes de que se vaya a saludar a una gente que estiraron su mano hacia él. -Solo quería comentártelo tendiendo a que hoy no es fin de semana.

Asiente; -Jase me dijo algo sobre una fiesta, él suele irse siempre que pasa unas dos horas aquí con la familia.

-Así es, pero no iré con Jase. -Le digo y frunce el ceño. -Conozco a uno de mi clase que pasará por mí.

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