Tú eres para mí (Flozmín)

Capítulo 40 "Pasados"

Una angustiada Flor se encontraba sentada en una de las mesas del restaurante. Ella miraba fijamente hacia la cocina donde sabía que estaría Jaz, pero no quería ir. No esta vez. Tenía miedo, temía de sus palabras, de sus reacciones. Temía verla sufrir por otra persona que no fuera ella. Sentía que su corazón se oprimía una y otra vez ante esta posibilidad, ante la posibilidad de llegar a perderla por esta nueva chica.
  Todos tenemos un pasado, ella sabía eso. Pero también sabía que los pasador a veces son más fuertes que cualquier cosa y que hacen que algo tan maravilloso como el amor se viera afectado.
Tras estar un rato ahí pensativa entró a la cocina y como esperaba ahí encontró a Jaz, totalmente destrozada. Tenía los ojos rojos de contener el dolor y su mirada reflejaba la más grande de la tristeza. Sin querer decir nada, Flor se acercó a ella y apoyó su mano sobre su espalda
Al verla Jaz se reincorporó limpiándose las lágrimas
-¿Y Juli?- preguntó la morocha
-La mandé a su casa- dijo Jaz
-Ok- sin querer indagar más
-Ey,ya termino eso y nos vamos- dijo Jaz disimulando
-No, no voy a ir- dijo Flor con la voz apagada
Jazmín la miró confundida -¿Qué? ¿Por qué?-
Flor hizo silencio y tras hacer unos cuantos tics se dispuso a continuar -¿Por qué Juli se puso así? ¿Por qué te la llevaste de esa forma? ¿Quién era esa chica?- dijo en ráfaga
Jaz la miró agobiada. Sabía que debía responderle pero no sabía cómo. Ni ella misma estaba segura de nada en ese momento
-Era ella ¿No? ¿Tu primer amor? ¿Elena?- preguntó Flor con la voz ahogada
La colorada miró hacia abajo y asintió dolida. Flor respiró profundo y se disponía a ir cuando fue detenida por ella
-No, Flor, para. No te vayas. No quiero estar mal con vos también- le suplicó Jaz con lágrimas en los ojos
-No, no. Yo no estoy mal con vos- dijo Flor negando sus celos –Todo perfecto- sonriendo
-Vos sabes que no es así- dijo Jaz y Flor borró la sonrisa –Tengo la cabeza echa un quilombo-
-Ese es el problema. Que yo no quiero ser tu quilombo- dijo Flor muy seria
-Mira, déjame que te explique. Es cierto que ver a Elena me afectó y mucho. Pero… ¿Vos sabes lo que se siente volver a ver a alguien que te dio vuelta la cabeza?-
-¿Qué te dio vuelta o que te da vuelta la cabeza?- dijo Flor temerosa de la respuesta
Para su desgracia de la boca de Jazmín no salió ni una palabra. Esto fue suficiente para que la morocha se diera cuenta de lo que le pasaba.
-Esto es para vos- dijo lanzando la tarjeta de Elena
Jaz la tomó en sus manos y la miró confundida. Sabía lo que quería decir con esa acción. Tratando de mantenerse fuerte Flor se fue de allí antes de estallar en lágrimas, dejando a una confundida Jazmín llorando.
Media hora más tarde Flor se encontraba en su habitación. Había arrojado todo al suelo y tal parecía que había pasado un tornado por aquel lugar. Le dolía, dios, le dolía más que nada en el mundo. Siempre pensó que ella era especial para Jaz, pero al verla con Elena sintió que todo era una gran mentira. Nunca la había visto tan afectada y a pesar de que la colorada se lo negara ella sabía que continuaba amando a aquella rubia.
De pronto sintió unos toques en su puerta que la hicieron salir de su estado
-¡¿Quién es?! ¡METICHES DEL ORTO!- exclamó la morocha
-Soy yo, Flor. Ábreme- dijo Jaz desde el otro lado. En su tono también se notaba que había llorado
Flor no contestó por lo que ella volvió a insistir –Flor, por favor. No me voy a ir hasta hablar contigo- dijo insistiendo –Quiero que sepas que a mí no me importa Elena ni nadie. Solo me importas vos-
Estuvo en silencio unos segundos hasta que la puerta se abrió mostrando a una deprimida Florencia. Al verla así Jaz no se contuvo y la abrazó bien fuerte.
-Ay, perdón, perdón, Flopi. Perdón por ponerte así- dijo Jaz abrazándola llena de culpa
-No, vos no tenés la culpa de nada- dijo Flor con los ojos húmedos
-Sí, sí tengo la culpa. Si yo hubiera echado a Elena, si le hubiera dicho todo desde un principio… vos no estarías así- dijo conteniéndola
-¿Vos la amas todavía?- preguntó Flor
Jaz la separó un poco y con los ojos llenos de lágrimas y una sonrisa le contestó segura –En mi corazón no hay lugar para nadie más que para ti. Yo no he amado a nadie desde el día en que te conocí-
Al oír esto Flor se lanzó a sus labios besándola llena de pasión y de amor. Ambas cayeron al suelo, donde Flor se aferró bien fuerte al cuerpo de la colorada
-Por favor, Jaz, dime que nunca me vas a dejar- le suplicó
Jaz no pudo evitar sonreír ante su petición y mirándola a los ojos le contestó –Nunca… Mira si te voy a dejar con el trabajo que me costó encontrarte- dijo riéndose
Flor la miró enamorada pero no pudo evitar preguntarle -¿Y Elena?-
-¿Qué pasa con ella?-  confundida
-Ella va a seguir viniendo al hotel. Dijo que no va a parar- dijo nerviosa
-Que siga viniendo. ¿A mí qué más me da? Yo no tengo ojos para nadie más que para vos, Flor- dijo sosteniendo su cara –Elena es mi pasado. Un pasado al cual ni loca volvería. Y es cierto que me puse mal… como cualquier otra en mi lugar, pero eso se acabó. Yo te amo a vos y no te perdería por nada en este mundo- segura de sus palabras
Flor sonrió ante sus palabras y la besó llena de amor. Ahí se quedaron ambas abrazadas una a la otra. Más seguras que nunca de lo que sentía.