Tú eres para mí (Flozmín)

Capítulo 56 "Soy muy feliz"

La ceremonia había concluido y todos estaban en la fiesta. La música era genial y los invitados bailaban felices. Mientras que las chicas eran el alma de la fiesta. Todos tenían que ver con su belleza y su amor.
Flor no soltaba a Jaz en ningún momento, su corazón no se lo permitía. Aún no se creía que se había acabado de casar con la mujer de su vida
-¿Qué tienes?- dijo Jaz al ver la sonrisa amplia de su novia que no se borraba de su cara
-Que estoy muy feliz- exclamó la morocha haciendo sonreír a Jazmín
Jaz la envolvió en sus brazos y se acercó a ella –Yo también- besándola
Flor continuó el beso, pero fueron interrumpidas por Javo…
-Disculpen, tortolitas, pero deben comenzar los bailes- dijo el chico anunciando que era la hora de que la novia bailara con la novia
Ambas asintieron y esperaron a que comenzara la música para colocarse en la pista. Muy pronto comenzó a sonar la canción ¨Te vi¨, la misma canción que Jaz le había cantado solo para Flor hacía unos meses.
Flor sonrió ante la música y se acercó a su chica, la cual la envolvió en sus brazos para guiarla en este hermoso baile.
Todas las miradas estaban sobre ellas, porque era una imagen realmente preciosa. Sin dudas ellas reflejaban todo el amor del mundo.
Durante el baile ninguna de las dos habló, solo se miraban pensativas. Pensaban en todo lo que había pasado juntas y en todo lo que tuvieron que hacer para que este día llegara. En el rostro de Flor se dibujó una tierna sonrisa, la cual fue tapada por los labios de Jaz.
-Fue mucho mejor con vos, a pesar de todo- dijo Flor mirando fijamente los labios de la colorada
-Te amo- susurró
-Te amo- y la besó nuevamente
Ahí entre risas y besos terminaron el fabuloso baile, el cual fue aplaudido por todos.
Durante el resto de la fiesta no pudieron estar solas ni un solo minutos, debido a que todos querían conversar y celebrar con ellas. Jaz buscaba con la mirada continuamente a su esposa, mientras que Flor hacía lo mismo. Finalmente se encontraron y la colorada indicó el balcón para que ella fuera.
Florencia se escabulló hacia el balcón donde Jaz la esperaba con una mirada llena de amor.
-Ah, Dios, no nos dejan estar ni un minuto sola- dijo Flor al llegar por fin junto a su chica
-Lo sé, yo también estoy enojada por eso- abrazándola
-En este momento extraño cuando nadie sabía lo nuestro- dijo Flor frunciendo el ceño
Jaz alzó la ceja sorprendida por su comentario –Ah, re bueno. Pensé que a estas alturas habíamos pasado esta etapa
-Ah, no… no lo digo por vergüenza- dijo envolviéndola en sus brazos –Lo digo porque era más íntimo, era nuestro secreto… Yo te quiero para mí sola- su tono de voz la hizo parecer una niña pequeña
Jaz se mordió el labio ante su ternura y la besó
-Yo también-
-Como cuando me cantaste en el piano- dijo Flor acariciando su mano mientras recordaba
-Sí, ese día fui solo para vos ¿O  no?- dijo Jaz sonriendo
-Sí… te amo- dijo la morocha volviendo a fundirse en sus labios
Tras un largo beso, las chicas se separaron y Jazmín comenzó a ver hacia la fiesta
-¿Querés que vayamos a otro lado?- dijo Jaz sonriendo de forma pícara
-Sí, a dónde sea con vos-
Jaz la tomó por la mano y salieron a escondidas de ese lugar. La fiesta era hermosa pero ellas se necesitaban.
En menos de quince minutos ya estaba en el departamento de Jaz, donde antes de entrar la colorada la cargó en sus brazos.
-Te vas a hacer daño- dijo la morocha riéndose de la fuerza que estaba haciendo la colorada
-Bienvenida a nuestra casa- dijo bajándola feliz
-Sí, nuestra casa y nuestra vida- afirmó la morocha
Jazmín la besó llena de pasión y entre besos fue llevándola hacia la cama.
-Um, ¿Alguien tiene prisa?- río Flor al ver los besos desesperados de su señora
-Es la noche de bodas ¿No?-
-Sí, es la noche de nuestra boda- dijo Florencia aferrándose con fuerza a ella
Los besos fueron tomando intensidad  y sus cuerpos cayeron sobre la cama. Jazmín iba a arriba, sujetando con fuerza en cuerpo de Flor con sus muslos fuertes y firmes.
Comenzó a morder sus labios, pero entonces un pensamiento llegó a su cabeza. Se separó como pudo y se le quedó mirando enamorada
-¿Qué pasa?- dijo Flor con la respiración agitada
-Que no puedo creer lo feliz que soy- dijo con una sonrisa contagiosa
-Yo también soy muy feliz- susurró Flor contra sus labios
-Y esto recién empieza-
Jaz se mordió el labio y la volvió a besar.
De esta forma, nuevamente entre besos y caricias las chicas hicieron el amor toda la noche. Sus cuerpo ya eran una solo y lo iban a seguir siendo por el resto de sus vidas. Su futuro ya estaba escrito y era juntas…