—¿Qué estás haciendo? ¿Puedo pasar?
—Sí, claro—abro la puerta y la dejo pasar—estaba cocinando.
—¿Necesitas ayuda?—no me deja responder—yo te ayudo.
—Vale—acepto con una sonrisa.
—Es que Nadir y Tayra han ido al hospital a ver a la madre de la niña, y pues preferí quedarme. Y no quiero estar sola.
—Tranquila, puedes quedarte conmigo—me encojo de hombros.
Ella me hace preguntas sobre mis clases y lo que me gustaría estudiar, me cuenta que estudió Psicología y que está contenta con su trabajo. Charlamos sobre más cosas.
Me cae muy bien.
Es demasiado buena, lo que me convierte aún más en una mala persona.
STAI LEGGENDO
Enamorada de un hombre casado
Storie breviMi madrastra tiene razón, soy una mala persona, una pecadora. Pero Dios, ¿Cómo hago para evitarlo?