9.

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Yoongi se sentó en el balcón de la cabaña, con un cigarrillo en la mano, pensando en todo lo que pasaba por su vida justo en ese momento.

Él no quería seguir obedeciendo a todo lo que decía su padre, pero.. ¿Qué más podía hacer?

Era imposible huir, lo encontrarían esté donde esté.

No quería seguir sintiendo ese vacío inmenso, que sólo alguien había podido rellenar en toda su vida, y ese alguien se había marchado hace mucho tiempo.

A ratos oía unos pequeños gritos sofocados, provenientes de un cuarto en la cabaña.

Jungkook debía estar sufriendo, ¿Y eso que le importaba?

Ya se estaba volviendo loco, nunca le había importado lo que haga su padre con sus enemigos.

Esta no sería la primera vez.

Escuchó el sonido de las motos de su hermano y Hoseok, se extrañó, todavía faltaban unas dos horas para su turno.

Taehyung bajó de su moto, Hoseok le copió y los dos caminaron hasta el balcón para encontrarse con la mirada interrogativa del rubio.

- Todavía es muy temprano, ¿Para qué vinieron?

- Un hombre de nuestro padre me dijo que él venía para acá, ¿Está adentr..- entonces se escuchó un grito un poco más fuerte que los anteriores que había sentido Yoongi.

El par de raros abrió los ojos más de lo normal, asustados.

A los tres se les había erizado la piel, entonces Hoseok reaccionó.

- ¿Qué mierda pasa ahí dentro?- Iba a abrir la puerta pero Tae le sostuvo la mano.

- Jungkook le respondió mal al Sr. Min- habló Yoongi- Se lo buscó al parecer.

- ¡¿Qué?! Lo van a matar!- Hoseok se safó de las manos de Taehyung y entró corriendo a la cabaña.

Los dos hermanos lo siguieron, temiendo que su padre se desquite con él.

Lo que vieron los tres se les quedaría grabado en la mente hasta el último de sus días.

Jungkook estaba a un paso de la inconsciencia, tirado en el piso, el cual tenía demasiada sangre coagulada.

Se le veían moretones horribles por todo el cuerpo, su labio y nariz sangreaban sin cesar, necesitaba ayuda.

Aún así seguía tranquilo, no luchaba por seguir consciente.

Uno de los hombres le iba a seguir pegando, entonces Hoseok gritó.

- Ya déjenlo tranquilo!!- los tres hombres y el Sr. Min lo miraron en silencio.

Este último iba a reclamar pero Taehyung se adelantó dejando a Hobi detrás de sí.

- L-lo que quiere decir Jung e-es que ya es suficiente, ¿No cree padre? De nada sirve un rehén muerto- la voz intercesora y convincente del chico hizo que el Sr. Min diera su aprobación.

- Si, tienes razón, pueden salir- les ordenó a los hombres, quienes recibieron su paga extra y salieron haciendo un estruendoso ruido.

El padre de los dos hermanos ahí presentes se acercó a Jungkook, tirado en el colchón, para hablarle.

- Espero que hayas aprendido la lección- sonrió conforme del estado en el que se encontraba el muchacho, luego tomó el reloj de oro que había dejado en la ventana y se fue sin decir nada más.

Hoseok se acercó a su nuevo hermanito y le sostuvo la cabeza.

- ¿Estás bien?- Taehyung se golpeó sin fuerza en la frente, ¿Quién haría una pregunta tan tonta como esa?

Secuestrando Corazones ▪︎Yoonkook▪︎Where stories live. Discover now