27.

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Taehyung y Hobi se bajaron de sus motos para entrar a la cabaña, este último le dio un corto beso en los labios a su novio.

Desde que Yoongi sabía de la relación, los dos se sentían a un paso más de la libertad, de poder declarar al mundo el inmenso amor que se tenían el uno al otro.

Faltaba poco para que el sol se escondiera dando paso a la hermosa fila de estrellas en el cielo, que mostraba un espectáculo increíble.

Abrieron despacio la puerta de la habitación donde tenían a Jungkook, pero era el rubio la persona acostada en el sucio colchón, con heridas por todo su cuerpo.

Taehyung abrió los ojos con sorpresa, empezando  a picarles, su padre no sería capaz, ¿O si?

- ¡Yoonie!- Hace mucho tiempo que no usaba ese lindo apodo para referirse a su hermano, se arrodilló al lado de él y lo abrazó con miedo.

- Tae, cuidado, las heridas no han sanado todavía- Jungkook advirtió sobre el estado del rubio, el cual solamente intentaba cubrir con sus brazos a Taehyung.

- Tranquilo, estoy bien- le acarició la espalda lentamente para que se calme.

- Dime que no fue él- Taehyung miró firmemente los ojos de su hermano, quien sostuvo la mirada con dolor en el corazón.

No podía mentir...

- Eso no importa, ya estoy bien- Tae lo miró ahora seriamente, con los labios temblando, estaba a punto de llorar.

- Dime la verdad, fue él, ¿Cierto?- Yoongi solamente asintió bajando la mirada, no quería ver la expresión del menor- ¡Cómo se atreve!

- Si no era yo iba a ser Jungkook- El rubio trató de hacer entrar en razón a su hermano, pero no lo lograba con nada.

- ¡Hijo de puta! ¡No tiene corazón!- Yoongi abrió en grande los ojos, nunca había escuchado decir esas cosas de la boca de él, menos refiriéndose a su propio padre- No tiene corazón- lo ukrimo salió como un susurro de dolor.

- TaeTae, no pasa nada, ven aquí, ¿Si?- Jungkook tomó de los hombros a su mayor y lo llevó para que se sentara en una silla, lo hizo sin reclamos, ya que se encontraba en una especie de trance.

- Kookie, ¿Por qué nos pasa esto a nosotros?- Taehyung no lograba comprender la maldad de su padre, ni siquiera sabía de quien habían salido ellos, que por lo menos tenían corazón.

- No lo sé, a-al parecer la gente buena está destinada a s-sufrir- El castaño tampoco entendía nada.

¿Cuándo iba a ser el día en que podría ser feliz?

Yoongi miraba todo triste, El Sr. Min no merecía un hijo como Taehyung, tan bueno, tan inocente, tan tierno...

- Mi amor, todo esto va a pasar, lo prometo- Hobi intentó hacer que el ánimo de su pareja suba, Jungkook por su parte, no tenía idea que ellos dos estaban en una relación, aunque si lo había sospechado.

- ¿Ustedes están juntos?- Los dos asintieron con un leve sonrojo, se habían delatado solos- Felicidades- El castaño se sentía feliz por ellos, ya que merecían tener un amor así.

Tan verdadero, tan transparente.

- Yoongi, no te puedes ir, menos con todos esos golpes- sentenció Jungkook con la voz decidida, no lo dejado ir así.

- P-pero...

- El conejo tiene razón, quédate por esta vez- Tae le miró en modo de súplica, el mayor de los Min asintió en silencio.

- Eso si, nosotros sólo tenemos dos sacos de dormir, ya que no sabíamos de esto- Hoseok se quedó pensando en una solución- No creo que haya algún problema en que duerman juntos- apuntó al castaño y al rubio.

Secuestrando Corazones ▪︎Yoonkook▪︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora