Fine Line (Luzuplay) [En edición]

LV (2)

Narra Borja

- Pablo es mi ex, lo conocí en Barcelona, tuvimos una relación de unos cuantos meses. Él me inició en el BDSM y esas cosas. Después de unos meses lo dejamos por motivos varios y perdimos todo contacto hasta que me lo encontré en Milán. Ahí me enseñó un poco la ciudad, nos tomamos un café y me acompañó a comprarme un traje para la maldita fiesta. - Raúl suspiró y se removió inquieto. - Cuando llegué a la fiesta pues nada, bebí y me drogaron. Me... Me acosté con Pablo sí, pero todo el rató pensaba que eras tu. No fue mi culpa Raúl porfavor perdoname. - suspiré dejandome caer contra las paredes del ascensor. Raúl no dijo ninguna palabra. Se veía tan tierno concentrado en sus cosas. Era como un niño pequeño. Un niño pequeño al cual le habían roto el corazón de la peor forma posible. Maldito subnormal. - ¿Qué tienes con Ángel? - murmuré sin querer saber realmente la respuesta.
- Nada que pueda llegar a interesarte. - dijo con un tono neutro.
- Oh venga Raúl, ¿Sois pareja? - dije con asco.
- No, solo follamos, estudiamos y poco más. Igual que tu hiciste con Pablo pero sin drogas. - rodó los ojos. Había tensión sexual en el ascensor. Maldita sea.
- Interesante, pero por lo que se Ángel es mas bruto que yo en el sexo. - dije convencido.
- Y folla mejor que tu - golpe bajo a mi ego.
- Sabes que eso es mentira Álvarez - susurré. Estábamos ambos mirándonos. A un simple movimiento de besarnos.
- Vaya, si que estas seguro de eso - susurró. Guié mi mano hasta su cuello y lo aproximé hacia mi.
- Siempre estoy seguro, Raúl. Ya deberías saberlo - susurré contra sus labios. Nuestras respiraciones se mezclaban.
- Deberías bajar un poco ese ego, Luzu - murmuró poniendo su mano encima de la mia. Me acababa de llamar Luzu.
- Vaya vaya, con que Luzu eh. No estamos en la sala sexual cariño, no puedes decir eso - apreté un poco más la mano en su cuello, Raúl gimió. - ¿Con Ángel también gimes así zorra? - murmuré.
- Gimo más, Luzu. - dijó mordiéndose el labio. Eres un simple aprendiz - murmuró. - No eres ni capaz de besarme. Tienes miedo, ¿cierto? - sonrió cínico.
- Eres un capullo, cariño. Ya lo sabes - murmuré. Me acerqué más, nuestros labios se rozaban. Raúl empezó un beso nada romántico. Un beso que dejaba los siete pecados capitales al nivel de una trastada de un niño de 3 años.
- Queridos usuarios, en breves instantes las puertas se abrirán. Gracias por su paciencia.
- Te espero a las 19h. Ve con ropa cómoda. - murmuré separandome y levantándome. Las puertas se abrieron y salí yendo a mi clase.

Narra Raúl

- Espera, ¿Casi follais en el ascensor? - Dijo Guille demasiado alto.
- Pero callate, que estamos en la biblioteca idiota - susurré - y no, solo nos besamos - dije rodando los ojos.
- Viene a ser lo mismo, te ha citado en su casa. Os teneis ganas, ¿te traigo mañana una silla de ruedas? - dijo Guille entre carcajadas. Le di una patada por debajo de la mesa a lo que él hizo un puchero - Au, duele - siguió con su puchero.
- Idiota que eres de verdad - rodé los ojos. - Eres un exagerado, pero no eres el mas adecuado para hablar. Por lo que se ve te pican varios mosquitos eh Guille. ¿Quieres un antimosquitos? - La ironía era la reina de la conversación.
- Cállate anda - rió y siguió estudiando.
- Oye Raúl, ¿Ángel y tu que sois? - preguntó Alex.
- Lo mismo que Guille y su mosquito - dije guiñandole el ojo a Guille. Este resopló.
- Vale vale información innecesaria - dijo Alex con una mueca de asco. - ¿Irás a casa de Borja?
- Claro, no pierdo nada - dije con una sonrisa.

[..]

Me dirigí a casa de Borja y cuando llegué, llamé al timbre. A los pocos segundos, abrió un Borja recién duchado y sin camiseta.
- Adelante - dijo dejandome pasar.
- Gracias - sonreí, al pasar acaricié sin querer el borde de su toalla. La tarde sería divertida.

Notas

¿Este capítulo es corto y un poco basurilla o me lo parece a mi? Me ha encantado escribirlo pero esque no quería meter ahora la escena erótica (no se ni si la voy a narrar). Besitos :)