Fragancia [Taegi/Yoontae] Historia Completa

Siete

- Hijo he estado tratando de contactarte hace algunos días, creo que la señal en tu edificio no es muy buena, deberías pensar en buscar un lugar mejor... Sabes en un barrio más tranquilo y evidentemente con más espacio, tu departamento es realmente pequeño... - suspiró mi madre – bueno te llamaba para contarte que he estado revisando algunos estudios y hay algunos muy buenos tratamientos para tu enfermedad, tenemos la suerte que algunos de esos doctores se encuentran en Corea, de hecho hay uno que se ve muy interesante que trabajaba en el hospital universitario de Daegu, sería una excelente idea tomar una cita con él, ya sabes vienes y te puedes quedar unos días, y si nos acepta para el tratamiento regresas a vivir con nosotros, sería maravilloso tenerte de nuevo en casa... Todos te extrañamos tanto Tae.

Estaba aburrido de esta conversación, mi madre jamás se rendiría ante lo que ella llamaba mi "enfermedad", yo lo consideraba más bien una condición con la que debía vivir, como si fuera estéril o algo por el estilo.

Regresar a Daegu a la casa de mis padres para escuchar todos los días las quejas de mi padre, las supuestas malas decisiones que me han llevado a donde estoy; los sueños inquebrantables de mi madre... Solo pensar en ello me deprimía demasiado.

- Mamá, ya hemos hablado de esto mil veces, estoy bien así, no quiero seguir buscando tratamientos para algo que nos han dicho en muchísimas ocasiones que no tiene explicación ni mucho menos solución, sabes que me ha costado muchísimo aceptar esto como mi vida, por favor no lo hagas más difícil buscando una solución para algo que no lo tiene... No regresaré mamá, no lo haré.

- Tae, por favor, hijo yo sé que eres un buen omega, mi corazón me lo dice, solo tienes un pequeño retraso para presentarte por completo, lo sé... Y-yo no quiero que estés solo hijo... No quiero pensar en que el día que muera tu te quedarás solo sin una pareja a tu lado – dijo sollozando.

- Mamá, puedo encontrar a una pareja, incluso si no tengo aroma – le respondí, sabiendo muy bien que esto era una gran mentira.

Después de varios años me había convencido de que si no tienes aroma no es posible que el resto te perciba de buena manera, solo te ven y pueden ser cercanos a ti, pero gran parte de los instintos románticos están ligados a las fragancias que las personas desprenden, y en mi caso no hay nada, soy como una imagen borrosa para el resto, por lo que siempre recibía la misma respuesta... "Eres lindo, e interesante, pero no siento nada por ti, no te puedo ver con un interés romántico". ¿Cuántas veces había escuchado eso?

Aunque para ser justo, yo tampoco sentía atracción por esas personas, sus aromas eran solo eso, fragancias... Un alfa era para mi lo mismo que un café recién preparado, un rico aroma, complejo y con textura, pero no dejaría todo por él, no lo amaría con locura.

- Mamá debo regresar al trabajo, saludos a papá y mis hermanos, cuídate mucho, adiós.

Me apoyé en el marco de la puerta de emergencias y un largo suspiro se arrancó de mis labios... ¿Cuántas veces tendría que escuchar esa conversación para decidir que ya era suficiente?