Fragancia [Taegi/Yoontae] Historia Completa

Nueve

El sonido de las hojas al rezar con el viento era constante y en momentos se intensificada. ¿En qué lugar estaba? No recordaba ninguna parte que tuviese tanta calma y árboles cerca de mi hogar; sin embargo, era agradable... Se sentía acogedor ese aroma a pinos húmedos y la madera quemada en alguna cabaña cercana, me sentía tranquilo y a gusto.

Unas manos acariciaban mis mejillas con delicados movimientos que demostraban un profundo aprecio y cuidado; alguien me estaba demostrando afecto, y yo estaba a gusto, me hubiese quedado así por horas, conciliando el dueño después de tantos meses durmiendo al filo con la vigilia; dejarse llevar por el tacto y las sensaciones y caer ante ese arrullo majestuoso lleno de amor.

- No, no te duermas – escuché un susurro próximo a mis oídos – no te duermas aún – unos dedos delinearon mis facciones comendando por mis cejas, tocando mis párpados y bajando lentamente por el puente de mi nariz, para llegar finalmente a mis labios y allí detenerse, dando paso a una respiración pausaba y tibia, que tentaba con besarme delicadamente, sin embargo, y percibiendo mi anhelo se alejó y llegó a posarse cerca de mi oído derecho y la respiración regresó a entibiar la zona dejando susurros inentendibles...

- ... - intenté escuchar y descifrar las palabras que pronunciaba.

- ... -

- ... -

- ... -

Un gemido lleno de angustia escapó de mis labios y rápidamente fue callado con sus dedos, coincidiendo con el fuerte agarre de su otra mano en mis caderas, acercándolo peligrosamente a él.

- ... -

- ... -

Y finalmente el aroma del bosque me inundó provocando un espasmo violento en mi vientre y el aire me abandonó.

- Taehyung, ¿dónde se ha ido tu aroma? – finalmente comprendía su mensaje y mi pecho se apretó fuertemente, allí estaba mi temor más grande haciéndose presente entre toda la escena mágica.

- Hyung... Y-yo... - mis palabras no salieron.

- No eres como él Taehyung, no puedo comprometerme con alguien como tú, no puedo dejarlo por 'algo' como tú – su presencia desapareció rápidamente dejándome completamente perdido, huérfano de su tacto y sufriendo de un frío que calaba mis huesos, el bosque se había retirado, había desaparecido entre una niebla carente de fragancia, me había abandonado y devuelto al lugar a donde siempre pertenecí, a la nada misma.

Desperté sollozando y con el pecho apretado, completamente abrumado de mil sensaciones y emociones violentes, cogí las mantas de mi cama mientras me convertía en un pequeño ovillo, intentando callar mis lamentos y regresar a la realidad; a esa realidad que mis sueños describían tan bien.