El Elegido del Señor Kim |KookV|

41

—Te gusta mi hermano. —su voz es segura y afirmativa, lo que hace que un estremecimiento recorra a JungKook ante esas palabras.

¿Los habían descubierto?

El Señor Kim iba a matarlo si ese era el caso, demonios, él no sabía qué había cometido mal para que fuera descubierto de esa manera, ni siquiera tenía dinero suficiente para pagar lo del contrato, se le sería muy difícil, tampoco tenía una tercera parte para ello.

Le dieron ganas de llorar, gritar, su rostro palideció, pero...

Hay algo que llega a su cerebro, el mayor nunca mencionó un contrato. JungKook se golpea mentalmente por lo imprudente que estaba siendo y se alegra de no haber dicho nada que lo hundiera más, WooBin sólo estaba diciendo algo que él creía, aunque no esté alejado de la realidad, no es bueno que nadie lo supiera.

WooBin sonríe con ternura al verle de esa manera, como si lo dicho fuera algo malo, él no lo cree de esa manera, más no quita que le parezca divertido el actuar del chico y cómo debate mentalmente.

—Me corrijo. —vuelve a llamar su atención—. Estoy seguro que hasta estás enamorado de él. 

Los ojos de JungKook se expanden aún más y voltea a otro lado, no queriendo que le vea, no cuando sus sentimientos están siendo dichos a voz alta que, aunque no sea de su propia boca, eso no quita que le provoque un sin fin de sensaciones, después de todo, son sentimientos que no le están permitidos sentir y al escucharlos o siquiera él aceptarlos, eso dará por sentado algo que no puede sentir, algo que... no es correspondido.

El mayor por su parte sólo suspira y prosigue hablando, como si lo hiciera a la nada, al mar que está frente a ellos, a algo más que no sea al azabache a su lado.

—Sabes... crecí creyendo que sería el sucesor de la empresa, mis padres me lo hicieron creer desde que tengo memoria, me hicieron ser el hijo "perfecto" estudié como un loco en los mejores colegios, fui el número uno que mis padres desearon, todo lo que me pedían o exigían, se los daba, después de todo, así fue como me criaron. —Su voz es un tanto melancólica y hasta entonces, Jungkook se anima a verle ante el cambio de tema—. Fui a la universidad en Alemania, saqué una maestría luego de que viajé a Inglaterra, eran los padres más orgullosos, todo porque estaba cumpliendo sus caprichos. —Ríe amargamente—. Pero sabes, todos tenemos límites, entonces me di cuenta que nunca había disfrutado mi vida, no tengo amigos porque nunca tuve tiempo para ello, mucho menos tuve a alguien a quien amar, porque eso no era posible para mí, menos cuando supe que yo no elegiría a esa persona, sino mis padres. —Hace una pausa como si necesitara tomar aire o valor—. Es ahí donde mi hermano entra, él llevaba mis mismos pasos, incluso acepto que era mucho mejor, estaba orgulloso de él, aunque él no supiera de ello, en verdad me alegraba de todo, pero era mi oportunidad de escape, esa luz de algo que no quería seguir.

JungKook se sorprende cuando ve una lágrima resbalar de su mejilla y no sabe qué hacer o decir, simplemente coloca una mano sobre la rodilla del mayor y aprieta ahí, como animándole tras el silencio que se provocó al mayor haber cortado sus palabras.

WooBin siguió con el relato. —Yo descubrí que no quería seguir malgastando mi vida para mis padres, seguir con la empresa era continuar bajo su mando y quiéralo o no, estaba obligado a seguir siendo "el perfecto hijo" ya no quería eso, por eso es que esa vez que cenamos en familia, me emborraché y mentí diciendo cosas que quería hacer al tener la empresa bajo mi poder. Mis padres mordieron el azuelo —esa risa amarga vuelve a resurgir—, y por eso es que mi hermano es el CEO.

—N-No entiendo... no noto que odie a su hermano o alguna cosa parecida... —se atreve a decir—. Entonces... ¿por qué no se llevan bien?