Tabla Periódica SenHaku

Holmio

Duke Izara llegó corriendo de la escuela y de inmediato encendió su computadora, abrió su aplicación de streaming favorita y se fijó cuál de sus ídolos estaba en directo.

De sus suscripciones solo el canal SSS - Senku Science Simp estaba en directo, y aunque no era el más entretenido Izara necesitaba practicar más su japonés y mejorar sus notas en ciencias, así que entró al directo.

Al menos Senku era guapísimo, aunque Izara solo empezó a seguirlo y darle apoyo porque era amigo del mentalista Asagiri Gen y el gamer Nanami Ryusui, y esos dos si que eran sus favoritos de todo el mundo.

Senku estaba con una bata de laboratorio, como siempre, y estaba sosteniendo un collar de piedras anaranjadas frente a la cámara.

—No, esto no tiene ningún beneficio para la salud. No importa lo que te digan los vendedores o los sitios web, científicamente los collares de ámbar no tienen ninguna propiedad médica y no van a curar ninguna enfermedad ni proteger a ningún bebé. Es increíble que tenga que aclarar estas cosas a estas alturas. —Rodó los ojos—. De todos modos gracias por enviar el regalo, lo dejaré en mi estante de cosas inútiles.

Izara rió de buena gana y decidió enviar una donación.

—Perdónalos, Senku-sensei, es solo que eres muy guapo cuando nos regañas.

Una buena parte de la comunidad de simps de la ciencia disfrutaba mucho de hacerlo rabiar con pseudociencia solo porque se veía adorable.

—Gracias por tus diez horas como mano de obra, Izara Clon 88. Bienvenida al directo. —Él rodó los ojos e ignoró el mensaje en sí, como siempre—. Ahora que nos quitamos de encima el collar de ámbar, seguiremos con el tema de hoy. Ayer hablamos del elemento número 66 de la tabla periódica, el disprosio, hoy toca hablar del holmio, el número 67, siguiendo con las tierras raras. El holmio es… —Calló cuando llegó una nueva donación.

—Senku-sensei, que hablaras del collar de ámbar me hizo pensar en Amber Warrior, una streamer muy hermosa que enseña defensa personal. Ella una vez reaccionó a tus streams, ¿podrías reaccionar a su reacción?

—Gracias por tus diez mil horas en el horno de fundición, Vany. Encuentro ridículo reaccionar a una reacción pero donaste bastante así que supongo que no me queda de otra. —Hurgó en su oído con el meñique, visiblemente fastidiado—. ¿Alguien podría enviar el link?

Izara decidió correr a buscar una bolsa de frituras. ¡Esto de las reacciones si que le interesaba más!

Cuando regresó, Senku-sensei ya estaba buscando el minuto donde la streamer reaccionaba a sus directos.

Apenas le puso play, una hermosa chica rubia de ojos azules apareció y el chat se volvió loco, comentando cumplido tras cumplido para ella.

—¿Y por qué les gusta tanto mirar a un adolescente de mi edad enseñando ciencia? —dijo la chica después de unos minutos escuchando a Senku-sensei con cara de no entender nada—. Ja, para eso están los profesores. Además no deberían confiarse tanto de la información que dan online.

—Oh, excelente. —Senku-sensei pauso el stream y rodó los ojos—. ¿Por qué me piden reaccionar a estas cosas? Yo sí tengo cosas de calidad que enseñar a mi público, público que gane por mi esfuerzo y no por mi apariencia, porque hay gente que realmente aprecia la ciencia más allá de lo que enseñan en la escuela. —Cerró el directo de Amber Warrior—. Continuemos con el holmio…