Boro

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Habían pasado unos buenos diez años desde que derrotaron al hombre del WHY y Senku ya estaba completamente asentado, casado con una mujer fascinante a la que podría confiarle su vida cualquier día y con una hija a la que adoraba más que a nada.

Sí… la vida después de la petrificación era buena. Aunque seguía muy ocupado con muchas cosas, se sentía más que satisfecho con su vida.

-¡Tío Senku!- el mocoso hijo de Taiju y Yuzuriha se acercó corriendo a él de pronto, cargando una pequeña canasta, acompañado por los mocosos de Chrome y Tsukasa y la mocosa de Ukyo. -¡Recolectamos estas manzanas para ti!- le dijo felizmente, con una gran sonrisa.

-¿Ah, si?- alzó una ceja, tomando la canasta y mirando con curiosidad las cinco manzanas dentro. -Gracias, supongo.-

-¡No fue nada, tío!-

-¡Felicidades por el quinto!-

Ante esas palabras, Senku se confundió, pero los mocosos volvieron a irse por donde vinieron, corriendo como los niños escandalosos que eran. Dejándolo intrigado.

¿Quinto? ¿De qué hablaban?

Miró el regalo que le hicieron.

-Mmm… supongo que estaban hablando del boro.- quinto elemento de la tabla periódica.

Las manzanas contenían una cantidad considerable de boro, aunque no era un compuesto con mucho renombre, así que le sorprendía que supieran algo así. Esos mocosos eran más inteligentes de lo que pensó.

Aunque el boro en altas cantidades podía resultar tóxico y perjudicar la salud, así que sería mejor que lave bien esas manzanas. Aunque tendrías que comerte una cantidad absurda para intoxicarte era mejor prevenir, sobre todo porque su hija amaba esas mierdas.

Se levantó del pórtico de su casa y, justo cuando estaba a punto de entrar para lavar la fruta, Chrome y Ruri pasaron por la calle, gritando el nombre de su mocoso.

-¡Se fue hacia la pradera!- les dijo al ver la preocupación en sus rostros.

Ellos le dieron las gracias de inmediato.

-¡Felicidades por el quinto, por cierto!- le grito Ruri antes de que ella y Chrome siguieran su camino.

Senku parpadeó.

¿Ella también sabía que las manzanas contenían boro?

Encogió los hombros y se metió a su casa para lavar las manzanas, cuando de pronto dos brazos se envolvieron alrededor de su cintura.

Sonrió.

-¿Qué pasa, leona? ¿Quieres aprovecharte de mí en plena cocina?- rió entre dientes, casi sintiéndola rodar los ojos antes de que se apartara de él.

-Acabó de llegar de visitar a Kaseki. Me hizo una nueva espada para los entrenamientos… y nuestra hija está aquí conmigo, pervertido.-

Oh…

Ups.

Volteó, encontrándose con los ojos muy abiertos de su pequeña leoncita de cuatro años.

-¿De qué hablan?- ladeó la cabeza.

-¡Nada!- los dos sonrieron nerviosamente.

-¿Quieren manzanas?- Senku quiso cambiar el tema.

Ellas no dudaron en aceptar y todo estuvo olvidado hasta que recibieron un mensaje auditivo de Yuzuriha.

-¡Casi lo olvido! ¡Muchas felicidades por el quinto, Senku, Kohaku!- fue todo lo que decía el mensaje.

La familia de tres miró con extrañeza al teléfono de la casa.

-¿Habla del boro?- se preguntó su hija.

-¿Habla de que esta fue mi quinta espada este año?- Kohaku no estaba menos confundida.

-Comienzo a sospechar que no tiene nada que ver con el quinto elemento de la tabla periódica…- ya era demasiada coincidencia. -¿Qué fecha es hoy?-

-Treinta de Noviembre.-

-Mmm…- lo pensó por un momento. -Oye, ¿no nos habíamos casado este día?- miró curioso a su esposa.

-Puede ser.- encogió los hombros.

-O tal vez…-

-¡Senku-chan, Kohaku-chan, feliz aniversario de bodas!- justo en ese momento, recibieron un mensaje de voz de Gen. -Como probablemente volvieron a olvidarlo, Ryusui-chan y yo nos tomamos la molestia de hacerles una reservación en un restaurante. La reservación es de tres por las dudas de que quieran llevar a su princesita~ Pero si quieren estar a solas Francois ya ha accedido a cuidarla~ Cualquier duda pueden consultarme, ¡y no, Senku-chan! El año pasado nadie sabía que el berilio era el cuarto elemento de la tabla periódica y este año nadie sabe que el boro es el quinto, ¡y sí, sí tienen que celebrar su aniversario! Muy bien, adiós~.-

-Ah, así que si era eso.- Senku frotó su oído con desinterés.

-Debí saberlo, nadie se acuerda de mis espadas.- refunfuñó Kohaku.

-¡¿Puedo ir con mi tía Francois?- su hija fue la única en alegrarse con ese mensaje.

Sus padres le sonrieron dulcemente y de inmediato accedieron a llevarla con su tía favorita.

No es que estuvieran muy emocionados con su aniversario o esa cena, pero un tiempo a solas nunca estaba de más. Así que eso de celebrar la estúpida fecha no estaba tan mal, después de todo.

Fin.

Holaaaaaaaa :D

Vayan acostumbrándose a mis fics raros xD Todavía no me he rendido (ni lo haré) con el Reto Tabla Periódica! UwU

Les seguiré trayendo SenHaku hasta que se harten de mí~ Pero esperemos que no pase x'P

CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!

Tabla Periódica SenHakuWhere stories live. Discover now