127

327 51 65
                                    

Hola, esposas de Gonzalo.

POV PERLA.

No podía creer que después de años iba a volver a ver a Bárbara Greco, la mujer que intento acabar con mi vida.

Recuerdo perfectamente cómo Bárbara se burlo de mí cuando la encontré en la cama con el hombre con él que en ese momento me iba a casar.
Luis era chofer de ella y justo un día antes de mi boda los encontré en mi propia cama.

Yo no sabía mucho de ella, pero en cuanto supe que llevaban bastante tiempo siendo amantes investigue su dirección y quise ir a hablar con su esposo pero ella hizo todo por impedirlo, no contaba con que su hombre de confianza en ese momento la terminara traicionando y me diría todo.

Y ahora era la novia de Franco, un hombre completamente diferente a Luis, a diferencia de ella yo si sabía respetar relaciones y aunque Franco me encantara no iba a hacer nada para separarlos.


NARRADORA.

-Aníbal...-. Dijo Bárbara al verlo frente a ella.

-Te hice una pregunta ¿Qué haces aquí Bárbara? Ah claro seguramente vienes a ver a tu amante-

-¿Y a ti qué diablos te importa? Ya no tengo porque darles explicaciones-

-¿No es más fácil decir que vienes a ver a tu adorado Franco? Quién por cierto se va a hundir en la cárcel por ratero.. ¿Qué diría Aurorita? Su madre aparte de infiel es amante de un estafador-

-Yo no soy ningún estafador-. Dijo Jaime. -Porque si no lo sabía yo soy la nueva pareja de esta hermosa mujer-.

-¿Eso es cierto Bárbara?-. Pregunto Aníbal.

-¿Te parece que no es cierto?-. Respondió Jaime mientras la besaba.

-Es cierto Aníbal, Jaime es mi actual pareja, así que tus comentarios no vienen al caso-. Bárbara se maldijo así misma por haber mentido pero en ese momento creyó que lo más conveniente era que los Elizalde pensaran que ella y Franco estaban separados.

-Pues tenga cuidado con ella-. Le dijo Aníbal a Jaime mientras se burlaba. -Es una auténtica zorra-.

Bárbara se acercó a Aníbal y le abofeteó ambas mejillas. -Si yo te parezco zorra ¿Cómo vas a llamar a tu mujer cuando sepas de lo que fue capaz? Ay Aníbal, te crees tan astuto y hasta un niño de 5 años piensa mejor que tú-.

-¿A qué te refieres con lo de mi mujer? Habla Bárbara-

-Investígalo por tu cuenta, si esfuerzas un poquito a tu única a pensar te aseguro que no te será tan difícil darte cuenta de lo imbécil que has sido todo esté tiempo-.

Bárbara se fue sin esperar a qué Aníbal le respondiera y Jaime la siguió.

-¡Ya puedes largarte!-. Le dijo a Jaime.

-Pero..-

-Pero nada, no te pedí ayuda ¿O si?-

-¿Vienes a ver a ese tal Franco, verdad? Aurora me contó que no le cae nada bien-

-Deja de meterte en lo que no te importa, y vete antes de que acabes con la poca paciencia que me queda-

-Está bien..¿Pero podemos repetir el beso de hace rato?-

-Tan idiota estás qué ni cuenta te diste que yo en ningún momento te bese..-

-No te preocupes, que no le pienso decir nada a tu Franco...bonita-

-¡NO ME VUELVAS A LLAMAR ASÍ! Y ya lárgate porqué soy capaz de empezar a gritar y decir que me estás acosando-.

Jaime se fue sin decir nada más, iba enojado, Bárbara le gustaba y no descansaría hasta tenerla en su cama.

Bárbara cómo siempre logró salirse con la suya, unos cuantos billetes y una mirada coqueta bastaron para que la dejaran pasar a ver a Franco.

-Mi cielo-. En cuanto Bárbara vio a Franco corrió hacía él y lo besó efusivamente.

-Bárbara...¿Qué haces aquí?-

-Uno de tus trabajadores me informó que estabas en la cárcel y vine lo antes posible..¿Qué pasó? ¿Porqué te trajeron acá y porqué no me avisaste tú?-

-Te llame pero...no me respondiste, me imagine que estabas ocupada con...Aurora-

Bárbara una vez más se sintió culpable. -Sí, estuvimos casi toda la noche platicando pero eso no importa ahora, estoy aquí para ayudarte en lo que se pueda mi amor-

-Ya tengo una abogada para eso-. Le respondió Franco.

-Sí, ya sé pero yo estoy aquí cómo tu pareja..-

-¿Te puedo pedir un favor Bárbara?-

-El que quieras mi cielo-

-¿Te puedes ir? Por favor-

-Franco...¿Quieres qué me vaya? ¿Pero porqué? Si no vine antes fue por..-

-Sólo retírate Bárbara, te agradezco que te hayas tomado la molestia de interrumpir tu hermoso reencuentro con tu hija por venir a verme pero..-

-¿Es por tu abogada?-

-¿De qué hablas?-

-¿Estás saliendo con ella?-

-Sí-. Mintió Franco.

-Eres un estúpido, pero no me sorprende ¿Sabes? Ella es igual a ti, supongo que sabes que antes tu querida Perlita se dedicaba a la prostitución-

-¿Tú cómo sabes de ella?-. Le pregunto Franco.

En ese momento un guardia se acercó a Bárbara.
-Señorita usted no puede estar acá ¿Quién la dejo pasar?-

-No se preocupe que ya me iba-. Contestó Bárbara y al momento se marchó sin voltear a ver a Franco.

El dúo perfecto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora