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LECTOR Y ESCRITOR

Comenzó al mediodía.

A la vista de las constelaciones que observaban, un ejército de 200 encarnaciones de élite marchaba alentado por el "Cuerno de Campo de Batalla" mientras los miembros del grupo de Han Sooyoung bromeaban y conversaban entre ellos. En el perfecto momento dramático, Han Sooyoung se acercó a Lee Hyunsung para hacer una declaración.

-Tenemos un solo objetivo: Vamos a liberar al dragón sellado en esa esfera – señaló a la esfera colosal que cubría el cielo –. Como saben, la liberación del "Dragón del Apocalipsis" destruirá la península. Sin embargo, siempre que hayamos completado las condiciones claras podemos pasar a la siguiente etapa y nadie en esta tierra morirá.

Alentadas por las palabras de la mujer, las encarnaciones presentes comenzaron a aclamar el nombre de Han Sooyoung mientras Jung Heewon y Lee Gilyoung observaban a Dokja con sorpresa.

El lector por su parte les respondió con una sonrisa tranquilizadora mientras los recuerdos del desarrollo original en las páginas de las Tres Formas de Sobrevivir en un Mundo en Ruinas pasaban por su mente.

El escenario 95 consistía en la liberación del dragón que había sido sellado después de la caída del Edén y en teoría lo único que se debía hacer era reunir las espadas dispersas e insertarlas en el ojo de la cerradura de la esfera. Por supuesto no era algo tan simple ya que en cuanto Han Sooyoung dio el anuncio las encarnaciones y constelaciones que hasta ese momento se habían estado escondiendo acudieron para tratar de apropiarse ellos de la historia gigante.

Ante la aparición de los enemigos Lee Jihye, Lee Hyunsung, Shin Yoosung y Kim Namwoon (este último cubierto con el abrigo blanco prestado de Dokja) se dispersaron para comenzar a combatirlos mientras que Dokja advirtió a Gilyoung y Heewon que si bien esos enemigos estaban fuera de sus ligas se mantuvieran atentos por si llegaba a suceder cualquier eventualidad.

Con todos los demás concentrados en sus propios deberes, Han Sooyoung sacó de su abrigo cuatro reliquias estelares brillantes y majestuosas.

-Kim Dokja, dame tu Arondight.

-¿Lo sabías?

Con una sonrisa, Dokja sacó la espada Cazadora de Dragones Arondight que había obtenido en esa semana en la había estado vagando con Yoo Jonghyuk y los arcángeles.

-Eres el único fuera de mi grupo que podría haberle puesto las manos encima – declaró ella como si fuera obvio –. Ahora dámela.

-Han Sooyoung... matar a Yoo Jonghyuk es la condición para cumplir el Pacto del Mundo Exterior que hiciste ¿no?

-Sí – admitió ella con ojos brillantes.

-¿Es por eso que estás obsesionada con Yoo Jonghyuk?

-Dame esa espada ahora.

-¿Por qué debería hacerlo?

-¿Por qué no? ¿No les pidió el Trazador Secreto la muerte del regresor también a ustedes en su propio Pacto del Mundo exterior?

-Te apresuraste a sacar conclusiones – le dijo el lector fríamente.

Los ojos de la mujer brillaron con comprensión y luego una expresión peligrosa se apoderó de su rostro.

-¡Dame esa espada! – Exigió.

En lugar de hacer lo que le decían, Dokja comenzó a hablar.

-Espada Santa de Ascalon, Gran Espada del Trueno, Espada de la Risa del Dragón, Espada del Viejo Dragón y Espada del Dragón en la Oscuridad – ante la mención de los nombres de las espadas, Han Sooyoung se puso rígida –. Hay un problema, porque una de las espadas que mencioné tiene una característica diferente.