Patrocinador Secreto

NUESTRO MEJOR ALIADO

La noche anterior la conversación agotadora se había prolongado tanto que al final él se había quedado dormido en el regazo del Trazador Secreto pero, esa mañana cuando Kim Dokja despertó, estaba totalmente solo en la cama...

-Ya era hora de que despertaras.

...o tal vez no, si el peso repentino en su pecho y la voz que había salido de dicho peso significaban algo.

-Luces peor que un pedazo de basura.

Arrugó los ojos en protesta. No era para tanto. Honestamente tenía un ligero ardor en los ojos y aún estaba cansado, pero no se trataba de algo demasiado grave...

[Has formado un Pacto del Alma con tu patrocinador] [De acuerdo con las condiciones del pacto, tu alma ahora le pertenece a tu patrocinador]

...nada demasiado grave en comparación a ese otro asunto. Aunque a decir verdad el Pacto del Alma no lo tenía especialmente preocupado.

-Tch... ahora que estás despierto deberíamos prohibirte salir después de todos los problemas que ocasionaste ayer.

También había cierto zumbido en sus oídos que tampoco era del todo importante.

-Y para variar te dormiste sin cenar. ¿Sabes lo molesto que es tener que traerte el desayuno a la cama?

¿Desayuno en la cama?

Será porque la idea le sonaba extranjera o porque la comida que antes no había notado despedía ahora un aroma delicioso que estimuló a su estómago hambriento. Cualquiera de las dos que fuera la razón, Kim Dokja decidió que su pesadez bien podía esperar para otro momento y abrió los ojos para tratar de sentarse en la cama.

Por supuesto más tardó en realizar dicha acción a que ya tenía puestos frente a él una gran variedad de platos con porciones ligeras de sopas y vegetales y, la verdad es que para todo lo que sus patrocinadores solían quejarse, lo cierto es que en realidad lo trataban bastante bien.

Ahora, la sorpresa de ver un "desayuno" así debió de darle alguna clase de expresión graciosa a su cara, porque los kkomas que habían traído todo le ordenaron comer mientras se burlaban abiertamente de su expresión.

Cuando Dokja había probado ya de varios de los platos, los kkomas decidieron ya que ya era hora de tener cierta conversación con él.

-Escuchar los gritos de auxilio de los dioses exteriores no es saludable para los seres que pertenecen al Star Stream – habló 888 acercándole una taza de té con su espada – y tú tienes suerte de que la sincronización con el Trazador Secreto aumentara lo suficiente como para evitar que tu cuerpo de encarnación sufriera un daño más grave debido a los efectos de contactar con seres del caos.

-Supongo que es así – respondió Dokja tomando un bocado de algo muy parecido al ramen – y admito que no esperé que el vínculo de patrocinio funcionaría de esa forma –.

-En general fue una sorpresa también para todos nosotros – dijo 999 con aire contemplativo – una sorpresa no desagradable, admito eso; pero sólo porque el contacto directo con los seres del caos no te dañó eso no significa que las perforaciones a tu cuerpo y la tensión mental no te hayan afectado de manera negativa.

Dokja simplemente se encogió de hombros y continuó con su comida.

-Hay algunas cosas que me gustaría hacer – les dijo una vez que todos los platos estuvieron limpios – en especial quisiera...

-Puedes hacerlas más tarde, por ahora levántate y ven con nosotros.

-¿Eh?

-El Trazador Secreto quiere que veas a alguien. Esa persona se ha pasado los últimos días preguntando por ti y después de lo de anoche él pensó que te haría bien hablar con ella.