Cap. 5

1K 116 11
                                    

A la hora de desembarcar me dirijo rápidamente a las cintas de equipajes, sin antes perderme por ese enorme aeropuerto.

Cuando ya estoy en las cintas, esperando a por mis maletas, alguien me toca el hombro por detrás.

Es Liam.

- Zoe, quiero disculparme contigo como es debido. - dice con las manos juntas, a modo de súplica.

- ¿Tú otra vez? ¿No puedes captar una indirecta? - lo digo mientras me giro, dándole la espalda.

- No quería dejarte con una mala impresión. - no se mueve de detrás mío.

Con la mirada veo a un oficial de policía que revisa que los pasajeros tomemos unos comportamientos adecuados al recoger nuestras pertenencias. 

- Tienes dos minutos, después de eso, llamaré al policía que está ahí, date prisa. -

- Pensé que querías que te siguiera. ¡Me diste todas las señales! -

- ¿De dónde sacaste eso? ¿Qué señales? - lo pregunto mientras me giro en seco, quedándome cara a cara con él.

- ¡El coqueteo! La forma en como me sonreíste cuando ibas al baño. Pensé que querías que te siguiera. -

- Simplemente necesitaba usar el baño. Ya sabes, como hacen todos los humanos, tienen necesidades y van al baño, esa no es ninguna señal, es solo una necesidad. - digo con los brazos cruzados y con una ceja levantada, mientras no le quito ojo de encima.

- Mira, lo siento. Sentí que teníamos química, y juraría que estabas coqueteando conmigo. No hubiera tratado de besarte si no hubiera creído que de verdad estabas interesada. - 

- Vine para reunirme con mi prometido. ¡Por el amor de Dios! - digo alzando la voz, quizá más de lo que me hubiera gustado. - ¡Vine a organizar mi boda! -

Liam se pone pálido en ese momento.

- Es la primera vez que lo mencionas... -

- No te hablé de mi boda, pero tampoco me preguntaste si quería besarte. ¡Parece que no me quieres dejar en paz! -

- Ya te dije que lo sentía, malinterpreté las señales... -

No le dejo terminar lo que estaba diciendo.

- ¡Suficiente! Olvídalo, ya no importa. -

Me vuelvo a girar para recoger las maletas y sin mirar atrás salgo del aeropuerto, para reencontrarme con el amor de mi vida.

Al poner los primeros pasos en la calle, la luz me deslumbra y tengo que cerrar los ojos, poniendo la mano para que no me haga tanto daño el sol. 

No consigo ver bien, pero puedo distinguir a Elian a unos cuantos metros, agarro las maletas y salgo corriendo hacia él.

- ¡Dios mío, Zoe! - grita Elian mientras me abraza con ganas y ríe.

- Tenía tantas ganas de estar contigo, todo se me ha hecho tan largo. - le digo sin poder parar de besarlo.

- No te preocupes, cariño. Ya estás aquí, y eso es lo único que importa ahora. -

- Hola, Elian. - dice una voz detrás mío, pero al instante reconozco muy bien esa voz.

Esa voz que en estos momentos, odio con toda mi alma.

Me giro, quitándome de los brazos de Elian y veo a Liam.

Liam...

- ¿Conoces a este tío? - pregunto mientras le apunto con el dedo y pongo cara de asco, levantando mi labio superior.

Al abrir los ojosDove le storie prendono vita. Scoprilo ora