La novia de mi hermano 1 [Disponible en físico + Extras]

65 - Confesión carnal

NOTAS

No me lo creo, familia. No me lo creo. Que alguien me pellizque (ojito, no es un pellizco como los que se dan Ana y Laura, ¡ja, ja!). Pero sí, aún me asombra ver que hemos llegado hasta aquí, hasta el final de temporada. 

Me alegra mucho haber tomado la decisión de seguir compartiendo mis borradores en la plataforma porque me mantiene cerca de ustedes. Aunque no lo crean, les aprecio mucho, muchísimo. Qué felicidad haber compartido otra larga travesía con ustedes; esta vez, cogiendo de la mano a Laurita. Todos esos comentarios. Todas esas reacciones que me encuentro capítulo tras capítulo. Todas las agradables interacciones que mantenemos por aquí o por mis redes. Todo eso es lo que llena mi corazón de alegría. Mi principal deseo es transmitirles ese mismo cariño a través de mis escritos, y gracias a muchas de ustedes sé que lo estoy logrando.

Muchas gracias por todo el apoyo y el amor que me brindan. Les amo. Hasta siempre, familia...

No, es broma. Suena a despedida, pero no lo es, ¡ja, ja! No se van a deshacer de mí tan fácilmente. El primer libro de Laura concluye aquí, pero la historia continuará. Hay muuucho que mostrar de ella aún. Incógnitas pendientes. Pero todo eso vendrá después de que edite y publique el libro. Tomará varios días, así que ármense de paciencia. Eso sí, les recomiendo seguirme en IG y FB para que no se pierdan el progreso y las novedades.

Todas las preguntas o dudas que quieran formular las pueden dejar escritas aquí. Las responderé lo antes posible.

Ahora sí, familia. Ha sido un verdadero placer compartir con ustedes estos meses como la familia de LHDMN que somos. Tengan agua fría y hielo a mano, no se alejen de la ducha y apunten el número de los bomberos porque se viene el capítulo más leído de la versión de Ana (no me pregunten por qué, ustedes ya saben la respuesta). ¿Laura batirá el récord? Ya lo veremos, pero denle amor, ella es una ternurita.

¡Disfruten! ¡Feliz semana! ¡Regalen amor! 

I love you!

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Confesión carnal

Ani no tuvo valor para contestar anoche. Me dejó en visto y no volvió a conectarse. Supuse que su cabecita estaría dando vueltas en una montaña rusa. Sabiendo lo impulsiva que es, vigilé la puerta de mi habitación en varias ocasiones porque pensaba que ella aparecería de un momento a otro. Imaginaba que entraría ardiendo como la lava de un volcán, pero con la incertidumbre de si se debería a la lujuria o a la ira.

Una parte de mí temía que mi hermano hubiera visto el vídeo. En realidad, yo habría cargado con la culpa por engañar a Ani al hacerla pensar que su amante sería Eric de principio a fin. Él se habría enfadado muchísimo. No por lo que hice, ya que yo podría haber alegado que solo prendía a Ani para él y tal vez Eric lo hubiera dejado pasar, pero no había manera de justificar el vídeo ni la intención detrás de los mensajes. Dado que mi hermano no derribó la puerta, deduje que no lo vio.

Como siempre, otra mañana de sábado para incordiar a Ani con cariño me sabe a gloria. Compartir el desayuno con ella y con mi hermano me ha confirmado que él no tiene ni idea de lo que pasó y que ella está bajo mi poder. He estado acosando a Ani con la mirada, torturando su estabilidad emocional con sonrisitas sugerentes en las narices de mi hermano. Adoro que resople, que desvíe la mirada, que se muerda una uña, que sacuda una pierna, que se sonroje.

Hoy será un día muy largo para Ani. Esta situación me favorece para ocupar su mente, ya que nos veremos con Flor y su equipo en la playa, y sé que la capitana hará de las suyas para coquetear con mi Ani. Pero ahí estaré yo, realizando gestos picantes en las sombras que hagan sudar a miss Pervertida para que ignore a miss Flor espinosa.