Granger → taekook (TERMINADA)

24

1982

—Jungkook...

Nada. Ninguna respuesta.

—Hey —tomó esta vez la oreja del gorro del menor, haciendo que este escondiera aún más su rostro entre sus manos—. ¿No me hablarás en todo el día? 

—Uhm...

—Esos son murmullos. Necesito que hables conmigo, ¿sí? 

Ah, estaba tan avergonzado que ni siquiera era capaz de levantar su cabeza para poder ver a los ojos a Kim. Tan solo hace una hora había mostrado la poca y nada de dignidad que le quedaba, claro que no iba a mirarlo a los ojos. ¡Que se lo llevase la tierra! 

—Muy buenos días, bienvenidos a Rocket Choise, ¿qué van a ordenar? —una voz femenina interrumpió la no-charla que tenían entre los dos, en donde Taehyung hacía de todo para que Jungkook soltase una palabra.

Taehyung miró la carta rendido, viendo la lista de cosas que ofrecía el lugar. Vaciló un poco entre alguna que otra hamburguesa, pero su decisión no fue tan complicada.

Miró a la mesera con una sonrisa. —Para mí una hamburguesa casera, la que trae carne —señaló la carta, a lo que la chica asintió—. ¿Tú, Jungkook? —le miró—. ¿Lo mismo? 

—No —negó de forma tímida mirando a la chica—. La...la que no traiga carne, por favor.

—¿Opción vegetariana? 

—Uhum.

—En treinta minutos su pedido estará listo. Mientras tanto les dejo —les brindó otra sonrisa, retirándose del lugar.

—¿Me mirarás? —Taehyung buscó la mirada de Jungkook, inclinando un poco su cabeza, buscando por debajo de la mesa la mano del menor. Al encontrarla, le tomó el dedo índice, apretándolo con suavidad, aquello le sacó una sonrisa al azabache.

Ahí estaba, la sonrisa que tanto le gustaba. Tímida, dulce, avergonzada. Le encantaba. Aquello le sacó una sonrisa también.

—Me da un poco de vergüenza —mordió sus labios, después de minutos subió la mirada para conectar con esos ojos felinos. Sintió su estómago rugir de hambre y mariposas—. Yo...lo siento tanto, p-por ser así, realmente no me medí, nunca-ugh, nunca me había pasado. Perdóneme, por favor.

Un sonrojo subió hacia sus mejillas y Taehyung no podía creer lo que estaba escuchando. 

—Amor —murmuró—. Te quiero comer a besos —rió ante la situación. Jungkook le miró incrédulo, con ambos ojos muy abiertos. ¡Se reía de él! —. ¿Por qué siquiera te disculpas? —frunció el ceño, soltando el dedo del menor para llevar sus manos hacia la mesa. Recargó su cabeza entre ellas, mirando atento a Jungkook—. A mí me gustó.

Yah, este hombre no tenía pelos en la lengua. Era simplemente....único. Nunca antes había sentido tanta euforia en su vida como lo estaba haciendo actualmente debido a cierta persona frente a él.

—Usted es tan desvergonzado, ay —tapó su rostro con ambas manos, riendo, mientras sacaba todo su nerviosismo.

—Y volvimos a la formalidad...—el mayor frunció el ceño—. Taehyung. Soy Taehyung para ti, para los demás soy usted, para ti no. 

—Taehyung.

—Sí.

—Yo, Jeon Jungkook, estoy muy avergonzado —confesó lo obvio.

—Pero yo no —se levantó de hombros—. Es algo...normal, ¿sabes? La sexualidad en sí es algo biológico, un proceso de la vida. Entiendo el por qué estás avergonzado, en serio lo hago, pero hey, puedes confiar en mí. No tengo pudor con estos temas, puedes preguntarme lo que quieras. Podemos hablarlo llegando a casa.