Granger → taekook (TERMINADA)

Carta número dos

Para Jeon Jungkook
Octubre, 1983.

Un saludo cordial de Kim Taehyung hacia usted, Jeon Jungkook. 

Aquello ha sonado como todo un profesional, ¿no crees? 

Cuanto tiempo. 

Cuanto tiempo en el que te he echado de menos, mi Jungkook. He leído tu carta, me ha llegado desfazada, aquí las cosas no llegan con mucha rapidez, a penas hoy he podido venir al centro de comunicaciones para poder enviar un recado, no sé exactamente cuándo es que esto llegue a tus manos. 

Me pone triste no poder escuchar tu voz. Las llamadas cada vez se hacen menos y por lo que me han explicado aquí, eso es normal. Al principio nos pintan la monada de que podremos hacer llamadas cada cierto tiempo y luego te cortan el privilegio, ya ves. 

Aun así, no dejaré que aquello me coma la cabeza, seguiré trabajando duro para poder salir pronto de aquí. (Suena como si estuviese encarcelado, te juro que es la misma sensación)

¿Cómo estás? ¿Qué tal te ido en el hospital? ¿Te han tratado bien? Espero que hayas hablado con Namjoon para que te ayudase a mudarte a Busan. Él tiene las llaves y todo lo que necesitas. ¿Cómo está tu familia? Espero que ellos tengan buena salud allá.

¿Cómo está nuestro hijo Otis? Supongo que también puedo ser su segundo papá si me lo permites.

Me ha puesto feliz que te hayan contratado en pediatría, no sé si sabías, pero las personas que están en esa área en específico lo están por una razón. Tienes un corazón puro y amable, cabe recalcar que los niños te aman, esa es la razón perfecta del por qué encajas tan bien allí. 

Escribo esto luego de haber almorzado. ¿Sabías que nos dan comida como si estuviesen alimentando un cerdo? Creo haber subido casi tres kilos desde que entré. No es tan deliciosa. Extraño mucho tus galletas, en serio, no bromeo. 

En cuanto a mí, estoy tranquilo. He hablado con compañeros, hay gente de todas las profesiones que puedas imaginar. No he tenido problemas con nadie hasta el momento, lo agradezco, ya que cuando han habido problemas el mayor hace que los soldados duerman fuera con solo una manta encima de las piedras. ¡Evitaré eso!

Aún no nos han dicho cuándo podremos tener vacaciones, según mis cálculos podría ser para fiestas de Navidad, pero nada confirmado. Estoy contando los días para verte, Jeon Jungkook. 

Mi amado esposo, cuida de tu salud y mantente fuerte para que volvamos a reencontrarnos. 

Esperaré con muchas ansias tu siguiente carta. 

Te ama, Kim Taehyung. 

—Kim —una voz dura le llamó. Volteó y observó el reloj. El tiempo para enviar la carta había acabado. Escribió rápidamente la dirección de correo tras doblarla y la tiró en el buzón que había en el regimiento para ser enviada posteriormente.

Taehyung saludó al vigilante que estaba en la puerta y se dirigió hacia el comedor en donde debía alimentarse antes de que terminase la hora de colación. Corrió para tomar una bandeja y dejar comida en ella. Su estómago gruñía. Si bien le había dicho a Jungkook en la carta lo contrario, era porque no quería preocuparlo de más. No quería ser una carga estando dentro para él.

—¡Kim, ven! —escuchó que le llamaban una vez que se dirigía a sentarse. 

Visualizó a un grupo de hombres que le hacían señas y se dirigió allí para comer con los labios en línea, sin expresión alguna en su rostro. 

—¿Has podido enviar una carta?

—Sí.

—¿Te dieron veinte minutos o quince? 

—Veinte.

—A mí me dieron a penas diez, malditos infelices, a penas escribí para mi novia, no pude enviarle a mi mamá —se quejó uno de los hombres de la mesa. Taehyung se dedicó a comer tan solo escuchando lo que decían.

—Pues a mí me dieron veinte. Quizás no le caes bien al mayor —el pelirrojo, Yeonjun, dijo con la boca llena.

—Tengo entendido que a quienes están casados les dan más minutos. Que mierda tan injusta, ¿y si tengo pareja? Es lo mismo —opinó Jungho. 

—Ah, es por eso —asintió Yeonjun —. Es porque no estás casado. Tienes menos tiempo para escribir y hacer llamadas.

—Un momento, entonces —Jaehyun, quien casi terminaba su postre señaló a Taehyung con su cuchara el cual comía en silencio escuchando la conversación — estás casado —afirmó. 

Todos en la mesa empezaron a sacar sus teorías hablando entre ellos como si no estuviese ahí mismo el nombrado. Taehyung les ignoró. No le interesaba hacerse amigos allí en absoluto. Creía que era innecesario, pero por alguna razón le había caído bien a ese grupo de hombres los cuales tenían demasiada intriga por su vida personal desde que entró. 

El doctor no había soltado ni pío. Lo único que sabían de él era su nombre y hasta ahí llegaba la información que debían tener sobre él. 

—Es joven para estar casado —opinó Jungwoo mirando a Kim con los ojos entrecerrados.

—¿Y qué? Yo tengo veintidós y estoy casado —Yeonjun le debatió regalándole una palmada en la cabeza.

—Mh, entonces sí lo está.

Todos discutían sobre si Kim estaba casado o con pareja, si era un asesino en serio o era una especie de odiador de humanos. 

El silencio reinó cuando el doctor terminó de comer el arroz de su plato y se puso de pie. Tomó un gran y hondo suspiro para luego decir:

—Por si querían saberlo —miró uno por uno a los presentes en la mesa—. Estoy felizmente casado. Tengo un hijo y soy doctor, dueño del área de urgencias. Tengo veintiséis e insisto, felizmente casado. Con permiso.

Todos quedaron en silencio cuando este se retiró del comedor dejando su bandeja sucia en donde correspondía.

—Eso fue...

—Caliente.

—¿Qué? ¿Eres gay?

—No hay que ser gay para encontrar a un hombre atractivo —Yeonjun dijo ofendido.

—Bueno, pues muchachos, ya tenemos a quien pedirle curaciones.

Al llegar a los dormitorios Taehyung soltó una sonrisa floja mientras desabrochaba sus botas. Él realmente extrañaba a Jungkook. 

//////////

felices fiestas de fin de año, les quiero mucho!!

tengo una gran noticia (para algunas jajaj), he publicado un omegaverse taekook, me atreví, pueden encontrarlo en mi perfil :) les espero allí