Granger → taekook (TERMINADA)

32

1982

La gente iba y venía, un movimiento que parecía no parar y tampoco le ayudaba a sus nervios en absoluto. Youngmin a su lado tenía una manta gruesa encima que había sido otorgada por el doctor debido a la baja temperatura que había comenzado a hacer para la fecha, aún con los calefactores del hospital encendidos sentía un frío que calaba sus huesos y aquello tan solo era repercusión de sus nervios. La chica tintineaba con sus uñas el té caliente con miel que Taehyung le había preparado mientras que Jimin solo lo sostenía entre sus dedos para ganar un poco de calor que había perdido. 

Se encontraban en el área de Ginecología y Obstetricia. Ambos podían ver cómo las embarazadas abundaban, madres con sus recién nacidos en brazos intentando acallarlos con suaves besos y cantos. Parejas felices y parejas complicadas buscando ayuda. Había de todo y el olor a colonias de bebé mezclado con leche...era otra cosa. El golpe a la realidad era duro.

Si aquel era su destino...¿podría con él? Se había reprendido la mayor parte del tiempo en su cabeza. En ningún momento quiso aceptar que si aquello era un resultado positivo, estaría condenado. Él debía responder realmente a lo que se estaba involucrando porque al fin de cuentas, también era su responsabilidad, lo sabía bien. De una vez por todas, debía actuar con la cabeza y no por instinto.

—Young —murmuró hacia la chica. Ella le devolvió la mirada, un poco sobresaltada luego de no haber cruzado palabra en un buen rato. Jimin observó unas grandes ojeras bajo sus ojos y oh, todo este tiempo se había centro solo en él pero...¿ella? —. Perdóname. 

—¿Y eso, Jimin?

—Perdóname por haber tratado de esa manera todo este tiempo—dejó el té a un lado, en la pequeña mesa blanca y tomó las manos de la chica, las cuales tenían un leve temblor que intentó parar acariciándola entre las suyas—. Por lo que dije, he sido inconsciente. Solo he pensado en mí durante el día —tragó duro—, solo quiero que me entiendas. Me-uhm, es difícil. Siento que aún tengo una mentalidad de niño y cargar con otra más me aterra, sin embargo —pausó, mirándola directamente a sus grandes ojos expectantes— nunca me ausentaré de tu lado. Me gustas, te quiero y también quiero hacer esto bien. Asumiré cualquier responsabilidad. Es mi deber y lo tomaré, sea cual sea el resultado que tengamos. 

La última palabra bastó para que Youngmin lagrimeara con pequeños sollozos de por medio aferrándose al cuello de Jimin como si todo este tiempo no hubiese podido sostenerse correctamente y es que ambos colgaban de un hilo fino. Las emociones estaban a flor de piel y lo único que necesitaban era tenerse de forma mutua. Nadie más que ellos podían entenderse en la situación. Jimin se aferró a su cintura y besó su coronilla, ambos inmersos en la emoción de un abrazo.

—Disculpen —una voz los sacó del momento, interrumpiéndolos. El doctor estaba frente a ellos, con un rostro neutral. No demostraba ningún sentimiento y Jimin se preguntaba si aquello venía incluido dentro de las habilidades de ser doctor—, están los resultados. Vamos a mi box, por favor.

Ambos asintieron con un nudo en el estómago limpiando las lágrimas derramadas. Siguieron por detrás a Taehyung con sus manos unidas, ambas frías y llegaron al destino con incertidumbre dentro de sus pechos. Tomaron asiento frente al gran escritorio, expectantes de la noticia.

—Lee Youngmin —Taehyung sacó el expediente de una carpeta, parecía recién impreso y se sorprendieron de la rapidez con la que se hizo el proceso. Sin duda, ser profesional en el hospital tenía sus pros—. Según el test de sangre que realicé en la mañana —miró a ambos, entregando el papel en sus manos— es negativo. No estás embarazada. 

Taehyung no supo si fue su propio suspiro o el de Youngmin, pero pronto sintió que el aire en la habitación se expandió y el llanto silencioso se hizo presente por parte de la chica mientras leía la hoja entre sus dedos.