¡¿Soy Hermione Granger?!

Capítulo 53: Hurón albino

POV Jade/Hermione
Después de eso fui en busca de la comida, apresurándome a comer, ya que sentía la pesada mirada de los gemelos, sabía que teníamos que hablar, pero tenía miedo, así que aunque me aproximé a ellos para hacerlo, mis piernas huyeron al yo tener contacto visual con ellos.

Esta vez me encontraba en clase con Blaise, que al instante se sentó a mi lado y volteó con expresión de burla observando detrás de nosotros, Draco y Theo lo miraban mal, a lo que rodé los ojos ¿será por otra apuesta? Ya no sé que pensar de ellos, pero tampoco puedo decir que se comporten distinto, después de todo, apenas están en la pubertad.

La clase con la profesora Vector transcurrió de forma tranquila, ella estaba de tan buen humor que no nos dejó deberes, lo que agradecía, aun así, Blaise parecía sorprendido de mis apuntes, aunque creo que era por todo lo que hacía en ellos para que se vieran bien y claros, con las señales de lo que importaba repasar.

Debo admitir que me dio cierta gracia ver como veía mis apuntes para después ver los suyos una y otra vez, intentando imitar unas cosas, en vez de tomar nota de lo que decía la profesora, anotaba como tomar apuntes como los míos. Al salir de la clase Theo y Draco se acercaron a nosotros.

—Hola — dijeron y miraron a Blaise.

—Hola, ¿Qué tal la clase? — dije intentando hacer plática.

—Genial — comenzó Theo, pero fue interrumpido.

—¿qué estabas anotando en tu libreta? — dijo Draco en dirección a Blaise.

—Nada importante — dijo Blaise con simpleza mientras me miraba, yo sonreí.

—¿Acaso se estaban hablando por sus libretas? Granger, tu no eres así ¿desde cuándo son tan cercanos? — preguntó.

—Desde que descubrí sus cupones — dijo Blaise con simpleza y los chicos nos miraron sin entender.

—¿qué cupones? — dijo Draco y Blaise sonrió con superioridad.

—Los que le obsequio su novio pobretón, por supuesto — dijo y yo al instante quería golpear su rostro con mi sartén.

—¡¿sales con Weasley?! — exclamó Draco sin poder creerlo, y hasta con cierta decepción. Pero antes de poder contestar Blaise volvió a tomar la maldita palabra.

—¡Claro que no! Si fuera así alguien ya habría ganado la apuesta — dijo Blaise.

—¡¿te quieres callar de una buena vez?! — dije y todos se quedaron callados. Ya no había nadie por los pasillos, así que el sonido de mi voz fue más imponente. — no tienen por qué andar apostando por mi vida privada, es de muy mal gusto. — dije entre dientes.

—¿Quién es entonces? — dijo Draco exigiendo respuestas.

—No tengo por qué decírtelo — dije sin más.

—Un tal Tom — susurró Blaise en dirección a ellos y eso colmó mi paciencia.

—¡Te lo advertí Zabini! — exclamé molesta y al instante salió corriendo.

Saqué una de mis bombas y la lancé en su dirección, la bomba chocó contra su espalda activándola, de un momento a otro Zabini se retorcía en el suelo intentando liberarse de unas lianas que lo tenían sujeto firmemente, pronto una llegó a su boca amortiguando con efectividad su voz.

—¿qué fue eso? — dijo Malfoy en shock.

—Un nuevo producto — dije con simpleza — ahora Zabini — dije y este se estremeció — no me gustan los chismosos. — dije y asintió repetidas veces. — no lo volverás a hacer. — dije y asintió.