Amor Gitano (Tommy Shelby)

C A P I T U L O 61

Ese mismo día Michael había llegado a Londres de Estados Unidos, pero a diferencia de lo que podría esperarse, solo Polly estaba feliz por su regreso, para el resto, no era más que un traidor. Arabia no sabía que pensar, quería al chico al igual que al resto de los Shelby, y le costaba imaginárselo traicionándoles, le dejaría explicarse antes de decidirse a odiarlo o no. 

Se habían reunido en el Garrison para darle la bienvenida, Pol y Arthur le habían ido a buscar a la estación mientras que Arabia y Tommy habían ido directamente al pub. 

El ambiente estaba tenso, eso era algo inegable, y tenso aún más, si es que era posible, cuando Polly les obligó a dejar las armas tras la barra.

Michael entró al pub junto a una rubia de la mano. 

- Tommy, Arabia.- saludó.- Quiero presentaros a mi mujer. Y me gustaría decir una cosa. 

- Siéntate, Michael.- pidió Tommy. 

- Te traicioné.- dijo el chico repentinamente.- Pero solo de pensamiento, hubo un momento en América, en que había mucho dinero en el banco, y pensé que podría... marcharme, irme a California. Me dijeron que invirtiera en las películas, en Hollywood. Pero Gina me lo impidió, me dijo...

- ¿Deberíamos sentirnos afortunados de que no decidieras traicionar a tu propia familia?- preguntó Arabia incrédula.- En ese caso, muchas gracias, Gina.

La misma mala sensación, o peor, que cuando conoció a Grace la inundó, se preguntaba si era cosa de rubias. Algo le decía que Gina no iba a ser más que un obstáculo. 

- He dicho que te sientes.- insistió Tommy.- Y ahora dime, qué paso en aquel barco. En el puerto de Belfast. 

- En el viaje desde Nueva York nos casamos, tuvimos que buscarnos un testigo, un sobrecargo, de Belfast, nos hicimos amigos.- contó Michael. 

- ¿Qué pasó cuando el barco atracó?

- El sobrecargo tenía amigos dueños de una destilería de whisky en el condado de Tyrone, querían una vía para venderlo en América, y yo dije: "De acuerdo, invítalos a bordo".- Michael siguió con su relato.- Cuando llegaron comprendí que no fabricaban whiskey. Eran escoceses, de Glasgow. No entendía una puta palabra de lo que decían. Empezaron a blasfemar, así que le pedí a Gina que se fuera. Entonces empezaron a hablar de ti, Tom. Decían que Tommy Shelby era un fuego consumido, que la política le había afectado, que había perdido la cabeza, que era buen momento para abrirse camino y si yo quería tomar parte. Sabían que habíamos perdido dinero y dijeron que me echarías la culpa, que tenías una bala con mi nombre. 

- ¿Qué dijiste tú, Michael?- preguntó Tommy. 

- No me dio tiempo a decir nada.- respondió.- Apareció la policía, bueno yo pensaba que eran policías. Pero...

- Eran del IRA.- terminó Tommy.- ¿Y los primeros hombres, los de Glasgow?

- La líder del IRA, dijo que a los hombres de Glasgow se llamaban Billy Boys. 

- Los putos Bully Boys.- maldijo Arthur.- Controlan todos los hombres de todas las minas de carbón y astilleros del este de Glasgow. Tienen lazos con la UFV de Belfast, una banda callejera de navajeros protestantes. También se meten en política, ya sabes matones en los mítines fascistas. 

- Pero no lo sabías, ¿no Michael?- Polly intervino.- No sabías quienes eran. 

- Estaba pensando en darte la buena notica.- miró a su madre.- Si Gina y yo nos casamos en el barco es porque está embarazada, vas a ser abuela. 

En ese mismo instante la cara de Polly cambió a una de sorpresa, aquella noticia para impactado a todos, pero aún así, Tommy mantuvo su rostro serio.