80: Only you.

59 7 36
                                    

Eun Ji:

— ¿Ya quieres levantarte? —dije acostada en el pecho de mi marido al mismo tiempo que él trataba de estirarse.

— Parece que sí mi amor. —respondió acariciando mi cabeza con delicadeza.

— Pero aún no hemos terminando de hablar. —dije algo decaída.

Ambos estábamos hablando sobre lo que podría ser nuestra boda.

Él sonrió de lado para luego darme un corto beso en la frente al momento de levantarse de la cama por completo.

— ¿Quieres acompañarme a dejar estos papeles? —preguntó. — Hace tiempo que no salimos. ¿Te gustaría ir a bailar?

Lo cierto es que quería quedarme en la cama durmiendo un rato más.

— ¿A bailar? —pregunté confundida.

Él había asentido contento al mismo tiempo que me dejaba un corto tiempo para pensar.

— Por si te lo preguntas conocí el lugar por Hyolin. Justo ellos irán a la misma discoteca esta noche.

— No iba a preguntar cómo sabías. —dije haciendo un corto puchero al mismo tiempo que me animaba a salir de la casa aunque sea por un corto tiempo.

— Te conozco mi amor. —respondió acercándose a mí para darme un profundo y corto beso en los labios.

Lo cierto es que los dos meses habían pasado de volada. Y aunque aún me dolía la pérdida había comenzado a trabajar más en la relación con mi marido.

— Te dejo para que puedas cambiarte, estaré en la oficina. —dijo antes de desaparecer por la puerta de la habitación.

Sonreí de lado mientras me tallaba los ojos en la orilla de la cama.

Texteé con Hyolin por una quincena de minutos para quedar a la misma hora en caso deseemos una cita doble.

Fui a mi guardarropas esperanzada de encontrar algo lindo pero al contrario, sentí que todo ya me lo había puesto.

Bufé por un par de segundos tratando de encontrar algo que pudiese gustarme del todo.

Yo y mi manía de arrugar la nariz cuando algo me disgustaba, desde ya sentía que algo no iba a cuadrar. Esta corazonada no me iba a dejar tranquila al menos hasta que pudiera cerciorarme de que todo saldrá bien.

Jimin volvió a la habitación, o al menos oí sus pasos porque estaba muy centrada en escoger algo ligero y elegante para la ocasión.

— Amor, Hyolin dice que podríamos encontrarnos en hora y media. Aún no te metas a bañar porque primero quiero escoger qué ponerme y tú demoras mu…-cho.

Mi sorpresa fue al verlo con dos bolsas de diseñador y una bolsa más que parecía ser de joyería.

Sonreí de lado y corrí a abrazarlo al mismo tiempo que recibía sus regalos con asombro.

— ¿Y todo esto es para mí? —dije abriendo las bolsas con emoción.

Él asintió con una sonrisa. — Sabía que dirías que no tenías nada para ponerte, por eso me adelanté.

Había un precioso blazer Versace y unos tacones a juego que seguro se verían preciosos en conjunto.

— ¿Y en esta bolsa? —pregunté sacando lo que parecía ser un collar de diamantes. —Mi amor… no te hubieras molestado en tanto.

Él me regaló una corta sonrisa y un beso en los labios para luego decir: — Cuando éramos adolescentes no podía darte éstas cosas. —agregó recibiendo mi abrazo al mismo tiempo que yo le daba un beso en la mejilla. — Mereces todo esto y más.

© heather ↬ park jiminWhere stories live. Discover now