Capitulo 21

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Maratón 5/5

                                         ***

Intento dormirme pero al parecer mi cuerpo decide que esa noche tampoco va a ser. Salgo de mi habitación dejándome las zapatillas de casa dentro para evitar arrastrarlas ruidosamente y despertar a los demás.
Camino por el pasillo dando vueltas absurdas, me acerco a la habitación de Dani que tiene la puerta cerrada y la abro cuidadosamente. Me acerco a la cama y me doy cuenta de que no está ahí.
Rápidamente me acerco al baño para encontrarlo vacío. Salgo y bajo las escaleras rápidamente revisando el salón y la cocina sin éxito ni rastro de Dani.
Subo a la habitación de los chicos asustada para avisarles. Sacudo levemente la espalda de uno de ellos y este se gira un poco quejándose, desvelando a un pequeño Dani que duerme abrazado a el.

–¿Que pasa?– me pregunta Gavi.

–Nada, me había asustado porque no encontraba a Dani.– Le digo susurrando para no despertar a Pedri. Siento mi cara arder de la vergüenza.

–¿Que hora es?–pregunta.

Miro el reloj que hay sobre la mesita de noche.

–Las cuatro, perdón por despertarte.– Me disculpo.

–¿Que haces despierta?

Me quedo callada y no contesto a su pregunta fingiendo estar concentrada en el reloj que hay en la mesita de noche.

–¿Sigues sin poder dormir?

Vuelvo a centrarme en el, que se ha girado al completo y se ha apoyado sobre el cabecero.
Su mirada conecta con la mía y sus ojos intensos me impiden ocultar la verdad.
Asiento con la cabeza llevando un mechón de pelo a la parte trasera de mi oreja.
Gavi se mueve un poco con cuidado de no despertar a Dani y levanta las sábanas con su mano dejando un espacio libre.

–Ven anda.

Miro indecisa la cama y después miro sus ojos que aunque estén en la oscuridad brillan por el reflejo que da la linterna del móvil, el sonríe con cansancio.
Camino hacia la cama y me tumbo enfrentado a Gavi. Su mano vacila un poco antes de abrazarme por la zona baja de mi espalda  y atraerme hacia el. Mi cuerpo se tensa por su contacto pero se relaja casi de inmediato y apoyo mi mano en su pecho. Su cuerpo irradia calidez sobre mi cuerpo frío y se siente bien mientras que su mano va dejando suaves caricias sobre mi espalda .
Todo el peso que siento desaparece y me quedo completamente dormida.

Me despierto para no encontrarme a nadie en la cama, miro el reloj que tengo al lado; las diez y media. Me sorprende y sonrió internamente.
Es la primera vez que consigo dormir tanto rato seguido.
Bajo de la cama y mis pies tocan el suelo frío así que camino hasta mi habitación y me pongo las zapatillas de casa con unos calcetines de pelo calentitos pero decido quitarme el pijama y sustituirlo por una sudadera y unos leggings.
Bajo las escaleras y escucho unas voces provenientes de la cocina por lo que me acerco a esta.
Allí están Gavi, Pedri y Ansu que al parecer ha llegado esta mañana.

–Buenos días.–Les saludo con una sonrisa.

–Hola Elisa.–Habla Ansu.

–¿Que tal has dormido?–me pregunta Pedri.

–Genial.– contestó mientras le doy una mirada cómplice a Gavi que se está comiendo una tostada de queso y aguacate.

–Elisa, ¿quieles desayunar aquí?– me pregunta Dani señalando un asiento libre a su lado.

–Claro, ¿tu que tal has dormido?– le digo acercándome a revolverele el pelo.

–Pues con tolos vosotlos supel bien.– contesta antes de llevarse su raza de rayo McQueen a la boca para darle un largo sorbo a su nesquik.

Le sonrió y me acerco a la cafetera que hay en la encimera y trato de comprender como funciona. Me preparo un café con unas tostadas y me siento al lado de Dani, quién ya casi ya terminado de desayunar.

–Hoy podemos ir a patinar sobre hielo, a la nueva pista que han abierto en el centro de Barcelona.– Propone Ansu.– Balde, Ferran y Frankie van.

–Ostia que guapo, yo quiero.–Dice Pedri.– ¿ Se puede venir Fer?

–Claro que si, pero tenéis que ir bien cubiertos para que no se os reconozca.

–Yo quielo patinal.– dice Dani.

–¿Elisa tu?– me pregunta Pedri.

–¿Por qué no?– contestó.

Yo suelo patinar todos los años con mis hermanos en la feria de Navidad y me encanta, además, tiene que ser super gracioso ver cómo algunos jugadores del Barça se caen.

–Pues decidido.–Aplaude Ansu.

–¿Y conmigo no contáis?– Pregunta Gavi.– Que ue yo no sé patinar.

–Hermano, ¿como que no sabes patinar?

–Pues que no se.

–Eso da igual, vamos y aprendes.– le dice Pedri.


                                        ***

Todos nos vimos en un restaurante cerca de la cara de Xavi, comimos allí y después volvimos cada uno a su casa para coger ropa adecuada, en este caso yo fui a la mía, acompañada por Pedri y Gavi.
Les dejé pasar diciéndoles que se quedarán con Dani.
Elegi ropa adecuada para el frío, y me vestí. Los chicos me habían pedido que tipo también me escondiera un poco ya que habían salido fotos mías y me podrían relacionar con ellos.
Me puse unos leggings térmicos negros con una térmica negra y unos calentadores en los pies, para cubrirme opté por una bufanda bastante voluminosa y un gorro negro dejando a la vista solo mis ojos.
Baje las escaleras  y encontré a Gavi y a Pedri jugando a la play con mi hermano Eric.

–¿Enserio?–pregunté

Los chicos se giraron en mi dirección y rápidamente llenaron su mirada de vuelta a la partida excepto Gavi que me escaneo con la mirada y cuando sus ojos chocaron con los míos, se dio la vuelta y sigo jugando.

–!Liii!– grito mi hermano que se acerco corriendo sentido de Dani.–¿Donde vas?

–Vamos a patinar,¿quieres venir?

–Siii.–dijo .

–Pues vamos a quitarte ese pijama.

Subí de vuelta las escaleras pero está vez con Dani y con Noah. Elegi algo de ropa para Noah y le puse unos guantes en su mochila. Me fui cuenta de qué ambos tenían la misma talla así que para no tener que volver a casa de Xavi, le puse la ropa de mi hermano a Dani.

–Ya estáis perfectos.– les dije revolviendoles el pelo a ambos.

Bajamos las escaleras y nos despedimos de Eric, luego nos subimos al coche de Pedri y este conducio hasta la casa de Gavi.
Ambos salieron vestidos con ropa más abrigada y con sus "disfraces" para no ser reconocidos.

Fix You - PABLO GAVI Où les histoires vivent. Découvrez maintenant