Millonario $in escrúpulos.

Capítulo 38

—buenas tardes, veamos...—
Veo el doctor pasar con algunos papeles mientras los revisa
—si, el señor bruno puede ser dado de alta hoy, estoy revisando su expediente y se ve muy bien de salud. Ahora le toca tomar reposo hasta que sane su herida de bala, después puede continuar con su vida normal-
Vi la sonrisa en el rostro de mi madre cosa qué no es muy común en ella, también vi el rostro alegre de mi padre, aunque no habíamos platicado mucho desde lo que me dijo acerca de Isabella me gustaba que estuviera feliz, se que esto les pego duro.
—gracias doctor—
—le mandare a la enfermera para que agilice el proceso—
El doctor nos deja a solas y mis padres se acercan felices, mamá me abraza y me da un beso en la cabeza y mi padre aprieta mi hombro sano. Aun tengo mi antebrazo con una venda, la enfermera pasa y le pide a mis padres que salgan hasta que ella termine de curarme y prepararme para partir, ellos hacen caso se marchan y cierran la puerta.

La enfermera empieza a desconectarme algunos aparatos, no estoy muy pendiente a lo que esta haciendo pero se aproxima mucho sobre mi en el momento de curar mi herida. Los botones de su camisa están desabrochados dejando ver su escote incluso el sostén, se levanta un poco y hace un movimiento raro con su cabeza
—¿que te echaste?—
—ammm yo ¿te gusta?—
—huele raro—
Veo su cara avergonzada y rio internamente. Empieza a limpiar mi herida y lo hace bruscamente
—oye eso me duele—
—lo siento pero las heridas se curan así para limpiar bien—
Chasqueó la lengua mientras hago muecas simples cada vez que ella presiona, nuevamente me coloca gasas y un soporte de brazos
—creo que es suficiente ¿algo más Niño rico?—
Me habla con burla disimulada suele pasar cuando una mujer de siente rechazada, empieza a escribir algo en el expediente y hablo
—¿sueles ponerte en ese plan cuando te rechazan?—
—¿que?— se hace la desentendida
—te daré un consejo; aparte de que soy un adulto no un niño y debes referirte a mi con respeto, eres muy bonita no necesitas insinuártele a ningún hombre para llamar su atención ahora abróchate la camisa si te encuentran de esa forma podrías peder tú trabajo si sabes que lo que hiciste es acoso ¿cierto?—
Su cara de vergüenza era tan conmovedora se abrochó la camisa y salió de la habitación sin poder decir una palabra ni siquiera me miró a la cara, mamá entró con ropa para mi y espetó
—¿pasó algo con la enfermera? Iba llorando—
—mmm simplemente le di un consejo al parecer le dio nostalgia—
Me vestí y con cuidado nos pusimos en marcha, por suerte no había ningún periodista en la calle así que me monte en el carro junto a mis padres y nos fuimos a la casa.

Mientras el chofer conducía iba usando mi celular tenía muchos correos y llamadas de todas partes, mensajes en todas mis redes, luego sacaría tiempo para responder. Gladis mi secretaria estaba de vacaciones en un crucero así que creo que no se había dado cuenta de lo que me había pasado ya que no había recibido ni una sola llamada de parte de ella. Papá va en su computador supongo que está trabajando, le he quitado mucho tiempo desde que estoy en el hospital, mamá me mira y espeta
—a ver hijo, debes estar en reposo quiero que te enfoques en sanarte y no en trabajar tanto tú papá que se encargue de hacer el trabajo duro—
Sonrió brevemente papá la mira y voltea los ojos.

Terminamos por llegar a casa los sirvientes estaban esperándonos como cuando a papá, en orden. Veo otros gualda espalda se acerca uno de ellos y nos abre la puerta del carro frunzo el ceño y miro a mi madre
—ah! Olvide decirte contrate seguridad para ti y no pretendas protestar—
—estás siendo extremista madre—
—¿estoy siendo extremista? casi te arrancan de mis brazos, por favor bruno ten algo de cordura—
Bufe, mientras suelto un suspiro largo y trato de guardar silencio no pretendía discutir absolutamente nada. Hablo unos segundos con ellos pero mi madre me hace caminar hacia la puerta para entrar a casa.

Papá va delante de nosotros, los sirviente nos saludan y nos preguntan si necesitamos algo, mamá se cuelga de mi brazo sano, llevo puesto unos jean y una camiseta negra junto a sandalias cómodas, escucho como todos nos dan la bienvenida, el teléfono de papá suena y se detiene antes de abrir la puerta camina hacia atrás nuevamente y nos dice que nos adelantemos.
—vuelvo en seguida—
Mamá abre ¡puff! y escucho como estalla algo
—bienvenidos—
Mi secretaria, algunos amigos de negocios, el papá de violeta su madre, el padre de Tom y sobre todo ella se encuentran en la sala algunas caras con sonrisas otras totalmente serias. Gladis corre hacia mi y me abraza
—señor bruno Dios mío! No tenía comunicación pero vine lo más rápido que pude—
—Gladis también te extrañé pero me estás aplastando el brazo herido auch!—
—señor lo siento—
—ten cuidado no ves que está herido—
Vocifera mi madre, Gladis se aleja un poco avergonzada y arregla su camisa
—que bueno que está en casa señor— dice en voz baja.
Observo a mi madre con mala cara ella lo nota me ignora y se acerca a todos los invitados y los saluda con agrado. Violeta se acerca a mi alza una ceja
—pensé que tú noviecita vendría contigo o por lo menos a celebrar que te dieron de alta—
—mmm supongo que fuiste tú la de la idea de esta sorpresa con lo mucho que las odio—
—de hecho si jajaja pero lo hice con una mayor intención—
Violeta saco su teléfono y me muestra su galería con una sonrisa de satisfacción
—¿no es esa tu noviecita? andando con otro hombre Jajajaj tan mosquita muerta y mírala es una casa fortuna con sus aires de tímida los engancha a todos esto era digno de una celebración y que mejor que este día—
No dejaba de ver aquellas fotos ni un solo segundo aunque sabía que este noviazgo era fingido los celos me estaban matando y lo peor es que conocía perfectamente aquel hombre era el mismo que había ido a llevarle flores a la cafetería. Trague grueso la cara de violeta satisfecha de haber logrado ponerme mal me irritaba pero traté de disimular
—la diferencia entre tú y ella es que si me es infiel puedo apostar que no será en mi cama ni con mi mejor amigo—
La sonrisa se le borro y justamente alguien con una voz familiar hablo haciendo escándalo
—BUENAS FAMILIA he regresado—
Todos volteamos hacia atrás hubo un silencio por unos segundos hasta que escuche la voz de mi madre
—bienvenido hijo mío—
Se acercó a él y le dio un abrazo Tom como siempre siendo un completo imbecil se acercó a mi
—oh bruno como lamento lo que te pasó no pude hablarte debido a que me tienes restringido en todas tus redes—
Apretó mi hombro y miró hacia violeta la cual estaba tan incomoda
—señorita violeta—
La saludo y fue hasta los demás para saludarlos, el y su padre no se llevaban bien del todo ya que este no quería trabajar solo vivir la buena vida como lo hacía.

Papá entro a la sala saludando a todos luego lo hice yo después de mi platica con violeta la cual se quedó incompleta, pedí disculpa por haberme tardado en saludarlos.
Unos minutos después todos estábamos sentados en el comedor hablaban de negocios y más negocios mientras mi cabeza estaba en Isabella y aquellas fotos con ese mal nacido, necesitaba ir con ella que me explicara que hacía con ese maldito infeliz, sin darme cuenta empecé a jugar con la comida
—señor ¿se siente bien?—
Salgo de mis pensamientos y observo a Gladis
—s-n-no necesito ir a descansar estoy agotado—
Pero cuando menos me lo espero Tom hace de las suyas y espeta tranquilamente
—oh si bruno cuéntanos antes de marcharte vimos un artículo sobre ti y violeta ¿decidieron volver o solo son mentiras?—
Miro a violeta quien se pone nerviosa aunque trata de disimularlo Gladis empieza a toser y toma agua desesperada llamando la atención de todos, se disculpa y acomoda sus lentes, mi madre levanta la cabeza
—mi hijo y violeta están trabajando en su reconciliación así...— la interrumpo
—no tienes que mentir madre tengo novia ya la conoces papá incluso la conoce de hecho violeta también—
—uuhhh! Golpe bajo—
Espeta Tom se da un trago largo de champán violeta se levanta de la mesa molesta y se va
—bravo bruno siempre poniendo en ridiculo a mi hija—
—yo no, la puso Tom como siempre—
El papá de tom le susurra algo que hace que la cara de este cambie a una molesta los padres de violeta se despiden y se retiran y yo hago lo mismo con los demás mamá se quedó en silencio y mi padre solo negaba con la cabeza.

Subo al cuarto y abro mi puerta la cierro con llave para que nadie me moleste me acuesto y me quedo dormido tengo un sueño; veo a Isabella en una iglesia vestida de blanco veo al novio no soy yo es él el chico de las flores, el padre les pregunta que si hay alguien que impide la boda trato de gritar que yo me oponía pero la voz no me sale nadie me escucha grito y grito pero solo me despierto aturdido y sudando miro el reloj diez de la noche me levanto voy al baño me lavo los dientes y echo agua en mi cara salgo de mi habitación sin hacer ruido bajo las escaleras no veo a nadie doy pasos sigilosos y salgo tomé unas llaves cualquiera voy al garaje y tomo un coche salgo de casa a toda velocidad para evitar que me detengan voy hacia la casa de Isabella. Al llegar me estaciono salgo como loco y toco la puerta con dureza ella me abre y sus ojos se agrandaron al verme la empujó hacia adentro ella no entiende nada lo veo en su mirada tiene el ceño fruncido
—¿POR QUÉ ME HICISTE ESO?— le grito
—¿bruno que te pasa? me asus...—
No la dejo hablar la beso sin compasión ella trata de detenerme pero no puede lástima mi brazo pero aún así la llevo hasta el mueble donde cae conmigo encima mientras trata de separase de mi. El salvajismos de mis celos no me dejan pensar hasta que escuche sus gemidos de llanto y me detuve.