Capítulo 61

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—padre—bruno entró suavemente
—toma asiento—
—pronto estaremos inaugurando el hotel haremos una gran celebración supongo que traerás a Isabella-
—será difícil convencerla pero si—
—me imagino, la última vez que hablamos no quedamos en buenos términos y con tu madre tampoco según lo que me contó la última vez que la visitó—
—papá solo quiero que Isabella sea feliz ha vivido una vida muy dura y creo que...—
—lo sé o lo entiendo quise decir, no puedo juzgarte además el brillo en tus ojos y la felicidad que tienes vale mucho, por años hemos querido realizar tu vida pero ya es hora de que seas tú el que decida que quieres para ti—

La conversación entre ellos siguió cambiaron a hablar de trabajo y bruno recordó cuando su padre le dijo que amo a una mujer hace ya un tiempo.

—papá hay algo que quiero preguntarte—
—si claro, puedes preguntar lo que quieras—
—prométeme que serás sincero por favor—
Basilio asintió no tenía idea de lo que bruno le iba a preguntar
—¿cuál fue esa mujer que amaste antes que a mamá?-
Basilio se quedó en silencio la pregunta de su hijo lo sorprendió mucho no sabía que responderle conociendo a bruno le haría miles de preguntas más hasta quedar satisfecho.

—hijo... ella murió cuando tenías cinco años—
—¿estabas con ella estando con mamá?—
—no fue así ella nunca me acepto, yo me enamoré en silencio aunque nunca lo hallas notado hasta ahora tú madre y yo siempre hemos vivido en conflictos debido a eso, cuando se enteró que estaba enamorado de la sirvienta de la casa se llenó de ira diciendo que la había rebajado, no habías nacido cuando me empecé a enamorar de esa mujer, ella estaba embarazada de ti sufrió por mi culpa se que soy responsable en parte pero ella tampoco era muy flexible que digamos—
—a que te refieres con que no es muy flexible?—
—tú mamá siempre ha sido una mujer vanidosa se veía viviendo la vida que hoy en día tiene, por esa razón no confía en nadie piensa que todo el mundo quiere nuestro dinero, cuando estábamos creando nuestro apellido tenía un amigo él y yo éramos inseparables pero creció la avaricia en su corazón e intento robarme desde ese día tú madre empezó a odiar a cada persona que intentaba acercarse a nosotros y sobre todo a mi, aunque a veces pienso que nunca me quiso tanto tampoco fuimos esa pareja que se amo demasiado nuestros padres arreglaron ese matrimonio—

Bruno sentía mucha justificación departe de basilio pero no siguió haciendo preguntas sobre la mujer

—¿que pasó con ese hombre padre?—
—fue a la cárcel supe que quedó en libertad pagando una fianza y no supe más de él hasta que apareció muerto en el periódico al parecer le dispararon en la cabeza pero como no tenía familia el caso se quedó así—
Bruno se quedó pensando unos minutos algo no cuadraba pero no quería apresurarse antes de investigar
—tengo recuerdos que no logro recordar bien había una mujer que trabajaba aquí en casa y estaba embarazada era esa misma—
Basilio trago grueso su hijo no era para nada estupido y sabía que él investigaría hasta averiguar todo
—no estaba embarazada, ella no tenía esposo— mintió si le decía la verdad a bruno el descubriría todo y sabe que su hijo no haría las cosas incorrectas
—entiendo, tal vez era otra persona—
Aún así bruno no se sentía conforme era como si algo no estuviera bien del todo

—¿por qué te da curiosidad saber de esa mujer?—
—no lo sé, simplemente curiosidad ¿de que murió ella?—
—tú madre la echo de la casa quise ayudarla pero ella no quiso desapareció y no supe más de ella posiblemente está en otro país realizando su vida—
—es lo mas probable ¿cuál era su nombre?—
Basilio empezó a sudar bruno quería saber demasiado así que volvió a mentirle

—María se llama o se llamaba no lo sé ¿por qué preguntas tanto hijo? hay algo que yo deba saber?—
—no, no te preocupes solo quería saber—
—entiendo, espero que te haya esclarecido tus preguntas—
—si papá, ya me tengo que marchar Isabella esta sola en casa y hay cosas que aún no domina—
—me imagino que si pero hijo ¿sabes de que orfanato viene Isabella?—
—no, no lo sé tampoco ella me lo ha dicho no es como que me interesen mucho esas cosas de su pasado—
—ya se que no eres ese hombre pero sería bueno saber un poco del pasado de cada quien—
—todo a su momento ahora solo me interesa estar bien con ella y que nada le haga falta—

Ambos se despidieron bruno salió más convencido de que algo no cuadraba en la historia de su padre así que fue con su madre

—madre, ya me tengo que ir—
—hijo tan rápido? Pero tenías mucho sin estar aquí quédate un ratito mas—
Bruno la abrazó y le dio varios besos en la frente
—pronto volveré así que no te preocupes—
—¿que hablabas con tu padre?—
—le hice algunas preguntas de trabajo no te preocupes—
—mmm entiendo tu padre no ha dejado de beber lo hace constantemente y ha descuidado sus medicamentos—
Bruno bufo molesto y con curiosidad aún abrazando a su madre le preguntó
—madre aquí hubo alguna sirvienta embarazada cuando yo tenía cinco años?—
Margaret alzo una ceja bruno no sabía que ella había escuchado la conversación de él y su padre
—no había nadie embarazada aquí—
—tengo recuerdos borrosos de una mujer embarazada aquí en casa—
—mi amor puedes estar tranquilo nunca te mentiría-

No quiso preguntarle sobre la mujer con la que su padre la había engañado pues ya conocía uno de los motivos por la cual ella trataba a su padre tan indiferente él la había engañado pero Margaret empezaba a sentirse mejor, escuchar aquella conversación solo la alentó a querer ir al orfanato donde fue con la madre de Isabella a dejarla, una verdad que nunca dejaría que bruno sepa porque si alguien se llegara enterar todo su imperio se podría ver afectado.

Camino a la puerta para marcharse pero antes volvió a mirar a Margaret y esta le habló haciéndose la víctima cuando sabe que solo le mentía a su hijo

—hijo quiero que sepas que...los problemas con tu padre vienen desde hace mucho tiempo yo lo amaba tanto y el rompió mi corazón, fue tanto así que aquella depresión post parto que tuve no me permitió poder volver a concebir y por eso no soy feliz con el y preferí poner distancia, me hubiera gustado tener una hermana para ti— bruno volvió a ella sintiendo lástima y la consoló y la abrazó, esta botaba lágrimas gruesas sobre él mientras sorbía su nariz

—pero ya amor vete con Isabella posiblemente te extraña, todo estará bien solo me pongo sentimental se que no conocías estar aparte de mi pero si, tú madre sufre en silencio a veces mis ataques de ira solo son emociones reprimidas por esa razón tengo que pedirle disculpas a Isabella—

—te amo madre eres más fuerte de lo que creí— el limpio sus lágrimas le dio un beso y se marchó.

Pasado un minuto luego de bruno marcharse Basilio entró al cuarto de Margaret aplaudiendo
—vaya show mediático el que hiciste jajajaja hasta yo lo creí, de veras que hasta yo sentí lástima por ti—

—igual que las mentiras que le constaté a tu hijo amando, así que María? ¿Qué pasa papá a qué le temes? ¿Crees que Isabella es la hija de bella e Isaac al que mataste de un tiro por celos de la mujer que le querías quitar? Jajajajaja que pasará el día que tú hijo sepa que su padre es el responsable de toda la desgracia de su prometida?—
—deja de hablar estupideces, bella murió junto a su hija o tú sabes algo que yo no Margaret?—
—¿que te preocupa?—
—solo quiero saber si realmente ella dio a luz o perdió el bebé como supe—
—por favor Basilio bella nunca perdió el bebé la encerré hasta que diera a luz después la dejé libre no se qué pasó con ella y su hija la dejé en un puerto para que tomara un barco, viste las noticias ella murió posiblemente dio a su hijo nunca supe si fue niña o Niño no me interesaba, la pobre te odiaba tanto cuando supo que tu mataste a Isaac se llenó de ira y te repudió obviamente me encargué de eso—

Basilio temblaba no sabía aquello pensó que bella había muerto junto a su bebé pero al ver a Isabella y el parecido de ella con bella todas sus emociones volvieron pero no sabía si creer en Margaret ya que podría ser una mentira solo para fastidiarlo.

Salió de aquel cuarto su cabeza empezaba a doler como si fuera a explotar fue rápido por sus pastilla las tomó mientras temblaba sentía los rápidos latidos de su corazón y el dolor en el pecho, Margaret fue hasta su aposento con un vaso de agua
—trata de no morir necesito que termines mi hotel— reía a carcajadas disfrutando de ver a su esposo sobre la cama apretando su pecho con la respiración sofocada tratando de no morir no sin antes descubrir la verdad.

Millonario $in escrúpulos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora