𝒞𝒶𝓅𝒾𝓉𝓊𝓁𝑜 𝟤

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Naori no sabía cómo ni cuándo sucedió, pero el ambiente en el Cerdo Blanco cambió. Era como si todos los hombres reunidos estuvieran esperando algo. La chica en la parte trasera aún estaba en su mesa, todavía pensando. Pero sus dedos enguantados estaban dando toques en la superficie marcada de madera, y de vez en cuando movía su cabeza encapuchada para ver alrededor de la habitación.

Naori no se podía haber ido, aunque quisiera. La última llamada era para otros cuarenta minutos y tendría que permanecer una hora después de limpiar y acompañar a los clientes embriagados fuera de la puerta. No le importa dónde fueran una vez que pasaran el umbral –no le importaba si terminaban boca abajo en una zanja acuosa– siempre y cuando salieran de la cantina. Y se quedaran fuera.

Ryūsui había desaparecido hace unos momentos, ya sea para salvar su propio pellejo o hacer algunos negocios oscuros en el callejón, y Tezuna todavía estaba en el regazo del marinero, coqueteando lejos, inconsciente del cambio en el aire.

Naori miraba a la chica con capucha. Al igual que muchos clientes de la taberna. ¿Estaban esperando a que se levantara? Había algunos ladrones que ella reconoció –ladrones que habían estado rondando como buitres en los últimos dos días, intentando averiguar si la chica extraña podía utilizar las armas que llevaba. Era de dominio público que salía mañana al amanecer. Si querían su dinero, joyas, armas, o algo mucho más oscuro, esta noche sería su última oportunidad.

Naori mordió su labio cuando sirvió una ronda de cervezas para la mesa de cuatro mercenarios que jugaban Reyes. Debería advertirle a la muchacha, decirle que mejor se escondiera en su nave ahora, antes de que terminara degollada.

Pero Ryūsui lanzaría a Naori a las calles si supiera que le había advertido. Sobre todo, cuando muchos de los mercenarios eran clientes amados que a menudo compartían sus beneficios mal adquiridos con él. Y no tenía ninguna duda de que enviaría a esos mismos hombres detrás de ella si lo traicionaba. ¿Cómo se había hecho tan cercana a esta gente?

𝓛𝓪 𝓔𝓼𝓹𝓪𝓭𝓪 - 𝐒𝐚𝐤𝐮𝐫𝐚 𝐇𝐚𝐫 𝐮𝐧𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora