Viviendo la historia de mi libro favorito pero en el personaje más difícil Rachel James donde el cuervo anhela su sangre, la bestia muere por devorarla y el león quiere matarla.
Conociendo la historia pondré las cosas a mi favor, no seré solo una pr...
La hermana de Rachel, me va a dejar solo con ella, con la excusa de recoger sus cosas, a cambio me pidió prestadas las llaves de mi auto en otras circunstancias ni siquiera lo hubiese consideración, pero ahora es una oportunidad que no pienso perder.
No soy un hombre que se queda con las ganas, ella me tiene mal todo el tiempo y con el embarazo mi necesidad es mayor , tengo que poseerla como antes, como siempre, no puede negar que la pongo nerviosa, cada vez que estoy cerca de ella.
En el hospital pude verlo antes de que Reece nos interrumpiera, aunque el me sigue insistiendo que lo haga paso a paso que no la fuerce, pero el no entiende que yo carezco de paciencia.
Aprovecho la situación la hermana se lleva a Miranda y yo encerré a Zeus en el corredor para que no se lleve su atención como siempre.
Quiero que ahora se centre en mi, el ascensor se cierra, me acerco a su espalda inhalando su aroma, siento que está nerviosa, se gira y no le doy opción a nada.
Me apoderó de sus labios que siempre me tientan, saboreo toda su boca incapaz de soltarla se resiste un momento, pero los movimientos de mi lengua la hacen ceder y corresponde, sus labios comienzan a moverse, pero con algo de timidez, no puede seguir el ritmo y la intensidad. Pero eso no es impedimento para mí que sigo besandola hasta dejarla sin aliento.
La suelto para que respire y su rostro está rojo, sus labios hinchados, necesito poseerla en este momento, la necesito.
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Voy a besarla de nuevo pero me detiene.
— Coronel, creo que debemos hablar.
— Después...
Vuelvo a besarla, pero se queja del dolor y la suelto de inmediato.
— ¿Te lastime?
— Son los puntos, tocarme la parte de atrás de la cabeza me duele todavía, el doctor dijo que tardaria está semana en sanar.
Que idiota, me deje llevar presionando su herida, me separo sentándome frente a ella, lideando con las emociones, trato de tranquilizarme, ya que me conozco los impulsos me dominan.
— Coronel, desde cuándo estamos juntos, que tipo de relación tenemos, usted me está apoyando con el embarazo o como estamos manejando está relación.
Comienza con las preguntas, y está más habladora que antes.
— Las cosas son simples entre nosotros, no tienes que pensarlo tanto.
— Bueno puede ser más específico, ya que lo que yo sé de usted, es que es un mujeriego, al menos eso comentaba Bratt Lewis que usted era incapaz de estar con una sola mujer y bueno muchas cosas más por eso necesito saber si está conmigo porque quiere o se siente obligado por el embarazo ya que si es lo segundo créame que yo puedo sola, así que no tiene que sentirse comprometido.
