模糊

good night.

Detuve mis pasos a la par que los pasos de las dos personas que me seguían detuvieron sus pasos.

—Carol —la llame —, te quedarás aquí por si cualquier cosa los ves, los guías a la cabaña dónde está Ty. Yo estaré ahí o llegare después ¿vale? —ordena a lo cual ella asiente —, Shane iras conmigo.

Ambos comenzamos a caminar pero sus pasos se hicieron más lentos hasta el punto de detenerse, un poco confundida me detuve viendo su perfil. Este se mantenía estático, una media sonrisa inundó su rostro y se giró hacia Carol.

—Perdón —se disculpa Shane viendo fijamente a la única Peletier —, por golpear a tu esposo en el campamento de Atlanta, por decir que tu hija era un estorbo y suspender su búsqueda. Por decirte que eras una tonta que se escondida detrás de Daryl. —le da una pequeña sonrisa —, Ahora eres fuerte, serás una de las únicas mujeres que sobrevivan. Jamás vuelvas a dudar de tus capacidades, ya no eres aquella mujer que se dedicaba a lavar ropa. Ahora eres una sobreviviente.

Shane sin decir más comenzó a caminar dejándome atrás de él. Un poco confundida camine a él ignorando el rostro de sorpresa de Carol, en el momento en que llegamos, observamos a través de la reja esperando el momento adecuado.

—¿Lista? —pregunta Shane.

Sin contestar este lanza la granada reventando un gran tanque de gas provocando que el lugar se moviera.

—Vamos —indicó alzando mi ballesta.

Entrando por la puerta principal la gente era devorada por los caminantes arrasando todo a su paso.

—Por aquí —indica Shane empujando una puerta.

De los techos colgaban pedazos de carne, cuchillos, moledoras, todas las paredes estaban teñidas de un rojo carmesí, desprendiendo un olor terrible.

—¿Acaso viste animales cerca? —cuestiona Shane inspeccionando el lugar.

—Si nos topamos con alguno de ellos, es mejor matarlos que hablar —opine, en respuesta de Shane este asiente costosamente.

Corrimos por aquella terminal nuestros pies iban a la par pero sonaban a hueco, buscaba señales de Rick pero nada, empujamos una puerta haciendo que esta rechinara, era un gran patio infestado de caminantes, a lo lejos vi algo muy familiar para mi, corrí a esa dirección seguida por Shane, era el sombrero de Carl.

—Alice hay que irnos, de seguro han salido— dice Shane.

Con fuerza tomé el sombrero de Carl para seguir corriendo. Pero en el momento que seguimos corriendo mi cuerpo fue empujado provocando que cayera al cielo, una mujer de aspecto desgastado se encontraba arriba mío.

—¡Ellos llegaron para convertirnos en esto! ¡Eres el carnicero o eres el ganado!—grito a todo pulmón.

Los caminantes se acercaban a nosotros, Shane la tiró empujándola a la horda.

—Te metiste con mi familia— mi voz sonó ronca con el revolver de Rick dispare en sus piernas haciendo que gritara terriblemente— ¿Cazar o se Cazado? Ese es mi lema, al parecer fuiste cazada— Di media vuelta para empezar a escuchar sus gritos al ser devorada.

Shane que se encontraba atrás mío me dio una sonrisa dolida, mis ojos se abrieron a tope notando una mordida en su cuello.

—Corre, Rick te espera— dice dejándose caer al suelo, los caminantes me pisaban los talones pero me agache hacia Shane.— Vete o te matarán.

—No, no— susurre tomando su rostro entre mis manos.

—Lucha, eres fuerte, tienes a tu familia yo ya no— su voz se fue debilitando— gracias por ser una amiga— tome su cara y la puse en mi regazo para verlo a los ojos— Perdóname por ser un hijo de puta. Nunca olvides esto: Nunca estás a salvo.

Cerró sus ojos para no abrirlos jamás.

—Buenas noches cariño— susurre y le dispare en su cabeza.

Sin ver hacia atrás me levante, y comencé a correr a todo lo que daban mis piernas de algún modo Shane dejo en vacío en mi, pero no hay tiempo de lamentarse o llorar... Sólo queda sobrevivir.

Cuando llegué al bosque todo estaba  tranquilo sin rastros de Carol, cambiando de rumbo me dirigí a la cabaña,  en la distancia se observaban varias personas, sonreí al borde del llanto, apreté el sombrero de Carl —que aún reposaba en mis manos— estaba emocionada.

Jamás confundiria esa espalda.

—Sorpresa Rick— habló Carol viéndome con una sonrisa, cuando el volteó no supe como reaccionar ante su cara, solo alze mi mano dándole un saludo.

Rick reaccionó y comenzó a correr hacia mi junto al castaño. Con los brazos extendidos llegaron a mi ambos para poder estrecharme entre sus brazos.

—Jamás te vayas— dice Carl abrazandome de la cintura.

—Te extrañe— dijo Rick besando mi frente, cerré los ojos ante esa sensación que el provocaba. Cuando los abrí note que se sacaba algo del cuello, mi anillo.

—Señora Grimes— dijo cuando lo colocó en mi dedo.— No se vaya jamás de mi lado.

—Jamás— susurre para capturar sus labios una vez más.