After School ⇜ Kim Taehyung

• Chicos •

Despues de que el profesor nos saco de su clase fuimos a la oficina de la consejera. Ella nos dio toda una platica acerca de poner atención a los profesores mientras que yo,  de vez en cuando le lanzaba miradas asesinas a Jungkook el por su parte sonreía como si no le importara nada. Al salir nisiquiera tenia ganas de mirar a Jungkook.

—No te enojes conmigo preciosa.

Yo rodee los ojos.

—¿Como que me observabas mientras me cambiaba?

—¿Eso?  —Bufo —es cierto que se veía todo desde mi habitación era inevitable,  ten mas cuidado, tienes suerte de que sea yo y no un enfermo de treinta pedófilo.

No pude evitar reprimir una risita por lo ultimo.

—Aun así...  No deberías. —Intenté decir seria.

—Como dije tienes suerte de que sea yo.  —Dijo en tono engreído.

Revolvió mi cabello.

Al siguiente día cuando esperábamos el autobús, de nuevo era tarde por lo tanto tuvimos que subir al primer autobús que se nos paro enfrente.
Como pudimos nos escabullimos dentro de este, las personas estaban todas juntas hombro con hombro una cosa realmente incomoda el aire me hacia falta y el calor nos sofocaba. Además el hecho de medir apenas 1.59 no ayudaba. Estaba entre Yoongi y Jungkook literalmente; Yoongi frente a mi y por detrás Jungkook.

Incómodo.

Yoongi lucia totalmente irritado y cada ves que lo veía refunfuñaba
Mire atrás y Jungkook,  por su parte,  no se le veía tan mal de vez en cuando cuándo alguien se acercaba mucho a el hacia mala cara pero después de todo mantenía una actitud neutra además trataba de lanzarme sonrisillas coquetas.

A veces dudaba de lo que la abuela de estos dos chicos dijo:

—Yoongi me dijo que eras una chica guapa —.

En realidad dudaba mucho que el haya dicho eso,  y en su lugar creía mas en la posibilidad de que Jungkook haya dicho eso.
Pero dudo que su abuela los confunda viviendo con ellos,  entonces si el creía eso ¿por que era tan distante y frio?  Apenas y me dirigía la palabra. Era un chico bastante extraño aun asi pienso que tiene un toqué dulce.

De repente el autobús se tambaleó bruscamente a causa de un bache, de un momento a otro Yoongi me rodeo con sus brazos para evitar caer yo lo mire y el desvío la mirada con ninguna expresión en su rostro. Entonces me soltó y no pude evitar sacar una leve sonrisa, como pense después de todo no era tan malo.

Pero de nuevo su personalidad me ponía en duda debido a que cuando bajamos del autobús el entro a la escuela como rayo sin esperar por nosotros ni decir nada, por lo que yo y Jungkook fuimos juntos a nuestro salón de clases no por que lo haya propuesto si no que involuntariamente íbamos juntos. Solo que el seguía poniendo una mano alrededor de mis hombros poniendo color a mis mejillas —no me culpen, es todo un imbécil pero es realmente apuesto y no puedo evitarlo— yo lo alejaba cautelosamente repetidas ocasiones. Fue cuando me encontré con el,  nuestras miradas se cruzaron y mis piernas flaqueaban en un rápido movimiento me separe de Jungkook.  Taehyung me miro a mi y luego a el chico castaño.

Aclaro su garganta.

—Lilly necesito que llegues antes a mi oficina. —hizo una pausa.  —No falta mucho para el evento y tenemos muchas cosas que organizar.

—Esta bien.  —Apenas fue audible.

—¿Evento?  —Pregunto Jungkook

—Si,  se los explico luego.  —conteste

El solo asintió.

—Te veo en un rato. —dijo de nuevo Taehyung.

Creí que el profesor pasaba por un mal momento debido a que estaba serio y con ninguna expresión.

Inconsciente solté una sonrisa como despedida,  el hizo lo mismo.
Jungkook no tardaría en preguntarme acerca de Taehyung el no me creía que era un profesor,  ¿y quien lo pensaría así?  El realmente luce demasiado joven (apesar de que tiene 22 parece de 18),  su actitud también y su peinado genial hacen de el un chico universitario. De hecho según lo que nos ha contado la consejera. El acaba de terminar la universidad y estaba de practicante en nuestra preparatoria.

Las chicas estaban locas por Taehyung (además de Yoongi y Jungkook). Se han convertido en la sensación de toda la escuela,  casi como Idols locales.
Cuando llego la hora del descanso no dude en ir corriendo a la cafetería la cual estaba siempre cálida.

—¿Que se siente?  —Me pregunto Suheid.

—¿Que cosa?

Di un sorbo a mi café el cual en estos tiempos era de gran ayuda. Hacia un frio mortal de esos que no tienen piedad ni compasión en dejarte congelado de pies a cabeza. La cafetería sin duda era un gran lugar donde evadir tal frio durante el descanso.

—¿Que se siente estar con Taehyung una hora en su oficina?  Todas,  matarían por eso.

—Ja,  tampoco es la gran cosa.  Todo el tiempo hablamos sobre el evento de invierno.  Ya sabes.  —Mentí.

Era obvió que no hablábamos de eso todo el tiempo, nos desviamos del motivo por el cual estoy ahí y, también a veces nisiquiera hablábamos mucho,  el ambiente era tan tenso y misterioso que no se podía entablar una buena conversación, solo hablábamos de las propuestas de los estudiantes acerca del evento. Además de ves en cuando tomaba mi mano y decía.

—Hace frio.  Tus manos están congeladas.

Pienso que es una escusa por que no deja de soltar mi mano después de eso, nuestras manos están juntas por encima del escritorio un buen rato y no puedo evitar tal contacto ya que se siente bien. Solo cuando alguien toca la puerta me suelta  (obviamente).

Cuando no habia conversaciones solo habia choques de miradas, contacto físico "accidental", y se concentraba aun mas en ponerme de nervios, como ayer por ejemplo:

—Luces bien hoy Mitchell.  —Sonrió.

Entonces se acerco mucho y paso un mechón de mi cabello detrás de mi oreja. Yo lo mire apenada y acariciaba la madera del escritorio mientras leía unas hojas.

Estos dias el era demasiado, mi corazón se aceleraba de mas cada que pasaba por su oficina.

—Así que chiste —Respondió Suheid.

—Que dices,  pues que mas quieres que pase... Pervertida.

Entonces comenzamos a reír.

—Voy por unas galletas y un jugo.—Dije.

—Ajam.

Dicho eso me dirigí con la vendedora y ordene un jugo de naranja al tiempo ya que hacia tanto frio que no me importaba.

Entonces me encontré con Yoongi,  nuestras miradas solo se cruzaron el desvió la suya como siempre.  No se veía bien del todo su nariz estaba enrojecida y sus ojos un poco irritados aun así increíblemente su atractivo no era opacado.  El tocia repetidas veces.

—Disculpe, ¿Tiene una jugo al tiempo?

—Oh lo siento pero ya no tenemos,  solo queda frio.

Entonces le ofrecí el mío.

—Toma,  yo...

—No es necesario...

—Deme un jugo de naranja frio entonces. —le dijo a la vendedora.

—Vas a atrapar un resfriado.  —Dije preocupada.

No me respondió , en cambio pago por el jugo que pidió y se fue.

—Chicos...  —Dijo la señora Yang. —No le des importancia,  así se portan con las chicas que les gustan. Los hombres son así…

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Lo siento por tardar.  xx
All The Love L.