After School ⇜ Kim Taehyung

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Había pasado aproximadamente una semana desde que Suheid no me dirigía la palabra, es más que obvia la actitud que tomaría después de ver semejante escena, a ella realmente le gustaba Jungkook. Me siento terrible y bastante culpable, espero que ella me perdone aunque realmente no era mi intención besar a Jungkook, había preguntado a Yoongi si ellos lograron reconciliarse, y la respuesta es "Si" estos días ellos son el chisme de la escuela, a decir verdad ellos forman una linda pareja.

Respecto a Yoongi, aún no he podido preguntarle acerca de lo que me conto Jimin, no se me ha dado la oportunidad y cuando estoy a punto de sacar el tema a flote retrocedo, temo que él pueda enojarse por querer hablar de ello. Aun así la versión de Jimin se escuchaba muy convincente. No podía sacar de mis pensamientos aquella conversación...

–Creo que podría contarte... –dijo Jimin, aspirando hondo como si estuviera pensando por cual parte empezar. –Hace calor aquí. Te invito a desayunar, mi casa no queda muy lejos de aquí.

Asentí no muy segura. Luego de caminar tan solo tres calles llegamos al departamento de Jimin, el cual se encontraba en el décimo piso del gran edificio, el guio una de sus manos hacia su bolsillo izquierdo de sus pantaloncillos para proseguir a insertarlas en el cerrojo. Luego de entrar al lugar me abrí paso hasta el living no sin antes quitarme las zapatillas deportivas dejándolas en un cajón de un pequeño mueble de la entrada justo a un lado de un jarrón alto, su departamento no era tan grande pero sin duda amplio y contaba con lo necesario, la decoración era bastante buena, las paredes eran azul claro y hacia contraste con los muebles color chocolate y el sofá gris con un gran tapete del mismo color que ocupaba casi toda la habitacion.

–Toma asiento. –Jimin señalo el sofá con la mirada. –Soy bueno cocinando, no tardare mucho... –me dio una sonrisilla y yo obedecí aun observando impactada la decoración, había varias pinturas en las paredes.

No tardó más de 30 minutos cuando regreso donde yo con dos platos de espagueti y un recipiente de lasaña, me sorprendí debido a lo bien que lucían sus platillos, mis fosas nasales se inundaron de un agradable olor que despertó mi hambre, el me entrego un par de palillos y comencé a comer después de él.

Luego de dar mi primer bocado me sorprendí nuevamente. –Jimin, esto esta delicioso. –exprese entusiasta.

–Gracias. –achino los ojos y sonrió. –solía cocinar con mi abuela.

–Lo haces bastante bien, que envidia. –el toco su nuca un poco avergonzado ante mis halagos por lo que yo sonreí. –bien, y ¿vas a contarme la historia?

–Por supuesto. Uhm –hizo una pausa inflando sus mejillas de forma tierna como si aquel gesto lo ayudara a recordar mejor. – Yoongi y yo éramos mejores amigos desde que tengo memoria, cuando niños solíamos jugar todos los días, incluso nuestras madres eran cercanas. Además de eso, todo el tiempo nos metíamos en problemas, así permanecimos hasta preparatoria. –soltó una risita al recordar aquello, luego se levantó para caminar hacia un mueble situado alado de un ventanal para tomar lo que parecía ser una fotografía, regreso frente a mí y me la extendió, me impresione al observarla con detenimiento, Yoongi tenía el cabello teñido de color menta y Jimin anaranjado justo como ahora, se veían realmente felices, sin duda eran mejores amigos.

–Vaya... –dije bastante impresionada.

– Como decía, durante la preparatoria formamos un dúo, yo era vocalista y tocaba la guitarra, el escribía las canciones, tocaba algunos instrumentos y de vez en cuando rapeaba, honestamente éramos bastante buenos, en todos los festivales escolares nos pedían participar, también asistíamos a bares nocturnos para presentarnos donde nos involucrábamos en peleas, éramos un dolor de cabeza para nuestras madres, no había día que no recibieran quejas de nosotros.