Cap. 1: Josefina María Méndez y una mole de pelos

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Alaska's POV

Me remuevo en la cama y abro los ojos acostumbrándome a la luz. Y así comienza mi día. Los pajaritos cantan, el sol brilla, una suave brisa entra por la ventana y despierto con mi mejor sonrisa, lista para comenzar un lindo día.

Naaa, a quien engaño. El sonido de los pájaros: mi despertador que terminó en la calle después de que lo lanzara por la ventana ¿Qué? Los pajaritos tienen derecho a volar. El sol brillando: la pinche lámpara que mi "hermoso" hermanito encendió jodiéndome la existencia. La suave brisa que entra por mi ventana: mi ventilador, que otra vez tiene complejo de avión y estoy segura que de un momento a otro va a salir volando, igual que el despertador. Y por supuesto, mi mejor sonrisa: una cara de mierda, lo más cercano a un mapache humano después de dormir con el maquillaje puesto, otra vez. Y por supuesto hoy es lunes, tenía que ser lunes, odio los lunes y ellos me odian a mí. Tengo que ser pariente de Garfield. No me juzguen adoro a ese gato y adoro la comida. Así que declaro a Garfield como mi alma gemela.

-Y esas damas y caballeros son las estupideces matutinas por nuestra presentadora favorita Alaska Dawson en Buenos Días New York. ¡Aplausos por favor!

-Gracias, querida conciencia, por cagar mis pensamientos fisolocos tan temprano.

-Si te das cuenta de que se dice filosóficos ¿Verdad?

-Cállate, yo lo digo como me dé la gana, se supone que tienes que estar de mi lado.

-Lo siento cariño soy tu conciencia no tu apoyo moral, así que jódete y apúrate que vas a llegar tarde.

-¡Josefina María Méndez! ¡Cómo te atreves a decir esas palabras! Cuida esa lengua señorita.

-Soy tu conciencia soy igual de malhablada que tú imbécil.

- ¿Malhablada yo? ¿Cómo te atreves?

-Mandas a la mierda a medio mundo nada más levantarte. Además ambas sabemos que cuando toma el control, alguna de las otras partes de tu extraña personalidad por esa boca, salen oprobios.

-No pienso seguir discutiendo contigo y no metas a Antonella María.

Antonella María es la versión malhablada y sarcástica de mí, con una lengua viperina y sin ningún tipo de filtro a la hora de hablar, y si, le pongo nombre a los diferentes aspectos de mi personalidad ¿Algún problema con eso?

-Y ya déjame tranquila que mis instintos asesinos acaban de hacer su estelar aparición.

Así que cerré el link para dejar de escuchar la insoportable voz de mi conciencia. ¡Qué cool, me siento en una novela de hombres lobos!

-¡Solicito un traslado ya! ¡Esta ya perdió todas las neuronas! ¡Capitán nos hundimos! ¡Abandonen el barco! ¡Repito! ¡Abandonen el barco!

-Dije que link cerrado Josefina, así que cállate.

Y después de mi discusión con mi querida yo racional, porque soy una persona muy racional. Soy tan racional que mi conciencia es más pesada que la vecina del frente, literal. Me arme de valor para abandonar a mi segundo amor, la cama. El primero es la comida, y por el quinto o el décimo mi muy "normal familia".

Después voy al baño con mi pijama puesto a ver si puedo hacer un milagro con mi apariencia y dejar de parecer un mapache con rabia.

Media hora y un millar de protestas después salí del baño ya con una mejor presencia. Así que fui por mi tercer amor, la ropa, los zapatos y los perfumes. Si, a un desastre de mujer como yo, según mis hermanos, está obsesionada con la moda. La mayoría de la ropa que tengo la he hecho yo misma, porque me encanta diseñar.

¡Quiero matar a mi jefe! Where stories live. Discover now