Capítulo 5: ¿Esto es bueno?

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La altura del Ichibi superaba por un poco más a la frontera que cubría Sunagakure.

Hajime apartó a Konan, le ocultó esa mirada compasiva que le dio al Ichibi.

Frente a frente, sin embargo, el Ichibi parecía perdido en sus propios pensamientos.

Miraba por todos lados, su pequeña nariz se movía e investigaba.

Amplificó su voz para que se hiciera notar, apuntó a su cabeza que se encontraba a varios metros de altura.

—Ichibi ¿algún problema? —dijo Hajime.

—Acabo de sentir un olor extraño... —dijo Ichibi.

—Estás con dos de nosotros, es natural sentirse así —Hajime señaló a Konan.

Ichibi dejó su desconcierto y comenzó a reír, movía sus brazos en el aire, como un niño conociendo un parque.

—¡Humano! Te crees muy superior a mi...

—Escucha, Ichibi —dijo Hajime—. Tengo 4 minutos para hacer esto. Ahora te explicaré como será: el primer minuto es una conversación, el segundo minuto pelearemos, me mostrarás confianza y yo la destrozaré, el tercer minuto te haré una pregunta y... para el gran final... lo dejaré como una sorpresa.

—Jajaja, ¡que buena fue esa! —dijo Ichibi—. Me encantan los creídos, aunque tenga una especie de contrato ¡definitivamente te destruiré!

—[Elemento Hielo: Almádena Rompe Hielo] —dijo Hajime.

Después de realizar varios sellos, Hajime hizo dos puños con sus manos, estas fueron rodeadas de una capa gruesa de hielo.

Ichibi se puso en guardia, agitó uno de sus brazos que giraba en dirección al cielo y los lanzó a Hajime, este esquivo al golpe solo para que otro se dirigiera a él.

Era una táctica parecida a la de Gaara, tenía que estar concentrado en defender, por lo menos para poder ganar sin complicaciones.

Inicialmente la distancia que los separaba era de 25 metros, luego de 15, luego de 10, luego de 5.

Hizo una sonrisa imperceptible al estar muy cerca de Hajime, uno de sus brazos se acercaba a todo su cuerpo.

Sin embargo, el resultado no era el esperado.

—¿Qué? —preguntó Ichibi, completamente sorprendido.

La respuesta lógica era que que al intentar un golpe directo, nada pasara, la arena debería de haber encerrado a Hajime, pero lo que había pasado en realidad, fue que la mitad de ese brazo había sido convertido en hielo.

Haciendo un grito de esfuerzo, Hajime golpeó la parte convertida en hielo, se rompió.

El Ichibi retrocedió unos cuantos metros de Hajime, pero no tuvo tiempo, pues su enemigo se abalanzó sobre el.

Se impulsó hacia su pecho, un sin numero de brazos salidos del cuerpo del Ichibi salieron a intervenir, pero todos eran congelados unas vez eran golpeados.

—¿Qué es ese jutsu? —dijo Ichibi.

Hajime detuvo su ataque, se paró a unos cuantos metros de Ichibi.

—[Elemento Hielo: Almádena de Hielo], permite al usuario crear una gruesa capa de hielo sobre sus manos, con el que incrementa su fuerza, era un poco conocido en el clan Yuki, ya extinto.

—¿Por qué congela mi mano? —Ichibi sonó un poco ansioso en su voz, retrocedió de Hajime.

—Eso lo hice yo, alguien con bastante cantidad de chakra podría lograrlo, solo imbuyo algo de eso y... ya está. Lo malo de esto, es que no puede salir a voluntad, a los cinco minutos desaparece sin percatarme.

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