Robemos un momento del universo para poder ser y estar, no importa el lugar sólo que estemos tú y yo, sin miedos, preocupaciones, problemas o inseguridades; sin pensar en lo que pasará después, solo en el aquí y en el ahora. Poséeme, devórame, tómame, lléname y llévame a otra galaxia, déjame ahí el tiempo que creas sea el necesario para sentirme tan tuya como me siento ahorita, con la diferencia que me tendrías entre tus brazos. Bailemos a paso lento, en un principio, que tus besos marquen el ritmo, para después agitarnos al ritmo de nuestros deseos más primitivos y carnales, al compás de tus dedos y mis locas ganas de sentirme mucho más adentro de mí, para clamar mi dolor por ti. Vamos a cumplir una de tus fantasías, o todas, tengo disponibilidad y las ganas infinitas de hacerte feliz y darte, de nuevo, todo de mí. Aliméntame de tu mano y deléitame con el hipnótico movimiento de tus labios adictivos, permíteme saborear las migajas que queden en tus dedos; déjame marcarte de nuevo, tocarte, sentirte, saborearte y degustarte como siempre lo he deseado... Prometo velar tu sueño, memorizar cada uno de tus rasgos, acariciando cada uno de ellos, te susurraré cuando te quiero, te extraño y te necesito... Guardaré y resguardaré el recuerdo de tu cernía mientras cierro mis ojos al verte en plenitud y gloria, como la obra que eres, envuelta en mi mejor amanecer.
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En la memoria de mis sentimientos
Short StoryEntonces sucedió lo que nunca me di el permiso de imaginar y se sintió como saltar a un abismo sin paracaídas y vistiendo mi mejor sonrisa