En la memoria de mis sentimientos

Todo lo que dejaste en mi puerta

Ven a recoger cada te quiero que no tuvo respuesta, cada canción que te dediqué, cada caricia que te disfrutaste y cada beso que te robé. Devuélveme cada risa, aliento, sonrisa, suspiro y grito de felicidad que me arrancaste sin permiso. Reconstruye todo lo que quedó deshecho por el desastre de mis sentimientos, por el simple hecho de que llevaban tu nombre. Dime todo lo que no te has atrevido a decirme y dímelo de frente. Confiésame todo lo que deseo conocer e incluso lo quería y necesito escuchar de tú boca. Elimina de mi memoria, todas y cada una de tus palabras envueltas en silencios atropellados, los cuales dejaron al descubierto todo lo que se quedó atorado en tu garganta. Quítame la capacidad de verte, oírte, sentirte y percibirte, incluso a la distancia. Otórgame el acceso a esa parte más primitiva tuya, de la cual me has dejado ver sólo una pequeña parte. Quítame las ganas inmensas de querer tenerte a mi lado, así como mis entrañables ganas de llorarte para depurarme de ti. Tan sólo llévate todo lo que dejaste en mi puerta, vuelve de madrugada para hacerlo todo de nuevo porque la verdad es que todo lo vivido no fue suficiente.