En la memoria de mis sentimientos

Te mereces

Te mereces a alguien que te ayude a ver aquello que tu espejo no refleja.

Te mereces a alguien que no se avergüence de ti, que no te esconda; que por el contrario te tome de la mano con orgullo, que te presente con una sonrisa enorme y ojos brillantes, que te de acceso libre a su vida y que te tengo como prioridad.

Te mereces a alguien que te acompañe por el camino, que respete tu tiempo, tu ritmo, tus decisiones (así no las comparta o las entienda), tus gustos o preferencias; que te va crecer y que al verte crezca junto contigo.

Te mereces a alguien que no pretenda cambiarte, que no desee otra versión de ti, que no te manipule para llenar su vacío por encima de tus sentimientos y necesidades.

Te mereces a alguien que esté orgulloso de cada uno de tus logros, por lo más sencillos que sean, que te recuerde diariamente lo que vales y lo importante que eres en el mundo y en su vida.

Te mereces a alguien que dese ver el mundo contigo, descubrir cosas nuevas a tu lado; alguien con quien puedas compartir sueños, y poder llegar a cumplirlos; alguien quien te pueda garantizar que si sale de tu vida no dejará herida que se conviertan en cicatrices sino por el contrario que dejará huellas imborrables, convertidas en momento inolvidables e infinitas experiencias en formas de lemas que te acompañaran el resto de tu vida.

Te mereces a alguien que te escuche, que te dedique tiempo, ese de calidad y no tan solo de cantidad; quien tenga el valor de decirte que no y que tú logres entenderlo, y viceversa.

Te mereces a alguien que sin esfuerzo se gane el cariño de las personas más importantes de tu vida, que sepa sin duda alguna la importancia que tienen en tu vida y que además te permita ser parte de ellos sin temor a perderte.

Te mereces a alguien como yo.