16

12.1K 1K 255
                                    

I HOPE EVERYONE GOES TO HELL

I HOPE EVERYONE GOES TO HELL

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—No necesito que me cuides. Puedo hacerlo sola—le contesté, pero al instante me interrumpió

—Vas a necesitar mucho apoyo emocional a partir de ahora. Una vez que sales de la arena, las pesadillas se vuelven más constantes. Y tus demonios pasan a ser reales.

No dije nada, solo solté un gran suspiró. Él tenía razón, casi siempre acertaba en todo.
Cansada, volví a recostar mi cuerpo. Ambos nos quedamos cayados, hasta que Odair decidió romper el hielo. Ahí fue cuando sus facciones se ablandaron un poco más.

—Lo lamentó, no quise reaccionar así. Lo único quiero es que no corramos peligro—admitió, sentándose en la silla al lado de mi

Había cerrado mis ojos por un minuto, pero en cuanto habló, los abrí nuevamente. Creo que lo estaba entendiendo, tenía miedo. Yo también lo tendría en su lugar, pero, a él no le harán nada. Solo a mi, yo cause todo.

—No te preocupes, nadie los va a lastimar. Si me tienen que someter a algo, yo soy la culpable—solté, cerrando mis ojos

—No funciona así, Lea. Ahora somos una familia, y la familia se apoya en cualquier momento—murmuró en voz baja

—Con más razón, si van a ser mi familia. Yo los protegeré.

Tenía un punto, los tres conviviríamos hasta que dejemos de respirar. Éramos los sobrevivientes, los que se ocuparían de "entrenar" a las siguientes víctimas. Estábamos obligados a hacerlo, era nuestro deber de ahora en adelante.
Estuvimos en silencio por unos cinco minutos más, ese silencio era incómodo. Pero más lo era el dolor que estaba en mi cabeza, las punzadas eran muy fuertes. Aunque, los dolores de mi cuerpo no lo eran tanto. Sé que me habían inyectado varías cosas para no sentir molestia a lo largo de las horas.

—Fuiste muy fuerte ahí adentro. Otros no lo podrían haber soportado—dijo de la nada, rompiendo el silencio

—Gracias...tú fuiste uno de los que más me apoyó, ademas de...de Gray.

En cuanto dije su nombre, miles de recuerdos comenzaron a invadir mi mente. La cabeza hacía cosas maravillosas, y a la vez horrorosas. Me hacía sentir muy culpable, que por mi cumpla, él murió. Qué tal vez podría haberlo evitado, y ahora Steven estaría en esta camilla. Me hubiera gustado que sea así, porque realmente se lo merecía. Merecía volver a su hogar, merecía ese dinero, y lo más importante: merecía volver a su familia.
Los integrantes de la familia Gray habían sufrido demasiado en tan pocos años. Algunos vecino creían que estaban embrujados, ya que cada año algo aturdía a toda la familia. Y, aunque parezca absurdo, pero ahora, yo también creo que es así. ¿Por qué? Porque por desgracia sus dos hijos estaban muertos, y ambos fueron cosechados mágicamente. Pero no solo eso, ellos estaban cerca de perder todo lo que habían sembrado a lo largo de estos costosos años de su vida.
En el cuatro habían muchas tiendas, de cualquier cosa que te imaginaras. En su momento, ellos eran los mayores comercializantes, proveían muchas cosas al Capitolio y distritos. Nosotros éramos la pesca, proveíamos la comida para casi todos. Sin nosotros, este "cuerpo" no se movería. Lo definía así porque nuestro presidente lo decía, en cierto punto era así. Los distritos eran los órganos, y el cuerpo era capitolio. Muchos sirven para que funcionen, pero todos tienen algo en común: todos hacen funcionar al cuerpo.  Sin los distritos la élite de aquí no funcionaría, serían ordinarios.

𝐃𝐄𝐑𝐈𝐕𝐄| 𝐅𝐢𝐧𝐧𝐢𝐜𝐤 𝐎𝐝𝐚𝐢𝐫Where stories live. Discover now