-017-

1.7K 126 4
                                    

Narra Shawn

- Shawn, ¿ocurre algo? - Me habló Mila. Ambos nos encontrábamos en Los Ángeles. Ella había terminado su gira por Europa, así que hoy la llevé a almorzar.

- No - Sonreí. - Estoy intentando descifrar lo que dice en la historia de Martina - Ella sonríe.

- Muéstrame - Se lo doy. Y lo leyó - Oh, lo puso en español. Por eso, básicamente dice que dentro de una semana es su cumpleaños. Y que ella no estaba enterada de eso, ya que su cabeza estaba en los estudios. - Me devuelve el móvil. - Pobre, debe sentirse muy abrumada - Asentí.

- Sí, tendríamos que averiguar su cumpleaños, sabes. Para aunque sea felicitarla - Dije.

- No podremos hablar con sus amistades. Ella dijo que no se lo contó a nadie - Hice una mueca. Es verdad, le habíamos hecho jurar que no contara a nadie.

- Tienes razón, algo se nos ocurrirá. - Metí un poco de pasta en mi boca. - Últimamente estoy más cerca de ella. Nos hemos vuelto buenos amigos. Espero que eso no te moleste - La miré con nerviosismo.

- Oye, Shawn, no me tienes que dar explicaciones. Tienes todo el derecho de tener amistades, ya sea hombres o mujeres. No te voy a estar reprochando nada. No soy una novia tóxica, ya lo debes saber - Me sonrió y me ofreció su mano. - Hacen una linda amistad. Y aunque suene raro, ella, siendo una fan, conoce bastante de ti y es buena apoyándote. Eres afortunado - Me dijo. Y no puedo negarlo, mi novia es de otro universo.

- Soy afortunado de tenerte a ti - Y entrelazamos nuestros dedos. - Te amo - y le di un beso en la frente.

Narra Martina.

Todo está saliendo mal. Primero, me fue terrible en los dos parciales que tuve esta semana, y la exposición fue aún peor.

Estoy abrumada, agobiada, ¡todo se me viene encima!

Segundo, Sofía y Macarena insisten constantemente en saber quién es la persona con la que siempre hablo. ¡No se dan cuenta de que no quiero hablar del tema!

Y tercero, me están presionando mucho para organizar algo para mi cumpleaños, pero no me siento bien. Estoy al borde del colapso. Odio mis ataques de ansiedad.

Solo quiero alejarme y desaparecer. En lugar de apoyarme, mis amigas están molestas porque no les cuento sobre el chico misterioso. ¡No lo voy a hacer! Entiendan eso. Además, insisten demasiado en organizar algo para mi cumpleaños. ¡Quiero pasar mi día sola!

Shawnmedes

Hola mar :)
Tengo una consulta, hace dos días pusiste una stories sobre algo de tu cumpleaños. ¿Que día es?.

Las lágrimas empezaron a salir, solas. No puedo con tanto, dios.

Hola Shawn
Es el quince. ¿Pero para que quieres saber?

No obtuve respuesta. Dejé mí móvil en mí cama. Y me puse a observar el techo.


¿Por qué a veces me siento tan vulnerable?

Estaba en mi habitación, rodeada de libros y carpetas, repasando para un examen que tendría en tres días. Periodismo, no es precisamente una carrera fácil, eso ya lo saben todos.

Mi móvil sonó y, con pereza, lo tomé. Era una videollamada de Shawn.

Bostecé ampliamente antes de contestar.

—Hola, niña —sonrió él al otro lado—. Hoy es nuestra clase de guitarra —añadió, señalando la suya.

Maldición, la clase.

—Hola, Shawn —sonreí, aunque débilmente—. Hoy no puedo, no estoy de ánimo —admití—. Lo siento.

Las lágrimas amenazaban con brotar, pero no quería que él me viera así.

—Oye, cuéntame ¿qué pasa? —preguntó con preocupación, dejando la guitarra a un lado y acercando el móvil.

—Nada, en serio —traté de disimular, limpiando rápidamente una lágrima de mi ojo derecho.

—No, cuéntame. Si no, no estarías llorando —dijo esta vez un poco más serio, aunque seguía siendo adorable.

—Es que no quiero llenarte con mis problemas —confesé, ya sumida en un mar de lágrimas—. Tú ya tienes muchas cosas que lidiar —añadí, tratando de controlarme

—. No es así. Todos tenemos problemas. Y está bien que a veces nos escuchen para desahogarnos. Tú siempre escuchas mis problemas, y ahora es mi turno —me alentó, pasando su mano por su pelo—. Te escucho.

—Es que... —suspiré—. Reprobé dos parciales, la facultad me está estresando demasiado. No estoy durmiendo bien. La vez que me llamaste por lo de Camila y su cumpleaños, mi amiga se había ido, pero aún así escuché un poco. —Shawn abrió sus ojos asombrado—. Pero tranquilo, me preguntó quién era, y le dije que era un amigo, que no importaba. Y me empezó a hacer mil preguntas, de dónde eras y por qué hablamos en inglés. Me empezó a abrumar con tantas preguntas —expresé. Me sequé la lágrima—. Luego vino Macarena, pero me di cuenta de que Sofía la mandó. Para sacarme información sobre "el chico misterioso" —hice comillas—. No entiendo por qué tanta preocupación por saber con quién hablo —bufé, enojada—. En dos días es mi cumpleaños. ¡Odio los cumpleaños! Y aún así insisten en hacer algo, aunque les rogué que no lo hicieran. Tengo que estudiar para los parciales y las exposiciones que se vienen. No estoy de ánimo para fiestitas —gruñí.

—Wooh —dijo Shawn, asimilando todo lo que le había contado.


- Lo siento, te abrumé con mis problemas —las lágrimas amenazaron con salir.

- No, no —se adelantó él—. Te entiendo. Estás enojada, abrumada y estresada. No sé quién soy yo para juzgar. Pero tus amigas, en vez de apoyarte y ayudarte para que no te sientas así, están totalmente enfocadas en quién hablas —Shawn respiró—. ¿Crees que empiezan a sospechar? —preguntó. Yo solo hice una mueca. No lo sé, puede ser que sí, o tal vez no.

- No lo sé. No deberían. Todavía no he hecho nada como para que sospechen —bufé.

- Si es así, ¿por qué estarán tan enfocadas en saber con quién hablas? —preguntó él confundido.

- No sé, ya me tienen harta.

Él rió. — No digas eso, tranquila. Quizás sean celos de amigas, pienso yo —sonrió.

- Bueno, cambiando de tema —me relamí los labios—. ¿Cómo estás? ¿Y cómo está Cami?

- Yo estoy bien, y Mila también. De hecho, justo está aquí —y sonreí detrás del celular.

Oh, rayos, Camila me oyó llorar. Genial.

- Mándale un beso y un abrazo de mi parte —arrugué la nariz.

- Lo haré —sonrió.

Conociéndote ~ SMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora