Conociéndote ~ SM

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Almorzamos todos juntos y luego nos divertimos con algunos juegos. A pesar de que le rogué a Sofía que se quedara a cenar, no aceptó, ya que tenía compromisos al día siguiente con su madrina. Alrededor de las dos de la mañana, nos retiramos a descansar.

Al despertar al día siguiente, me di cuenta de que ya eran las doce del mediodía. Me levanté con un intenso dolor de cabeza y cólicos menstruales. Con gesto de dolor, me levanté de la cama, lo cual resultó ser un error. Sentí como si el mundo estuviera conspirando en mi contra, y todo empeoró cuando me di cuenta de que mi período había llegado y había manchado mi ropa y las sábanas. Emití un grito agudo mientras sentía ganas de llorar y desahogarme. En ese momento, escuché unos pasos apresurados acercándose.

—¡Tina! ¿Qué pasa?— Exclamó Shawn con desesperación.

—Nada, ¡no pases!— Respondí apresuradamente.

—¿Qué? ¿Por qué?— Preguntó impaciente.

—¡Porque no!— Bufé, sintiendo la urgencia de correr hacia la puerta pero incapaz de hacerlo, como si cada movimiento fuera a causar una hemorragia. Mis lágrimas comenzaron a caer.

—Tina, déjame pasar—suplicó.

—Por favor, no entres— dije entre sollozos, mientras las lágrimas recorrían mi mejilla.

Qué exagerada soy, pensé.

Shawn hizo caso omiso a mis palabras y entró en mi habitación. Se quedó inmóvil y en silencio.

—¡Shawn!— Grité, y finalmente pareció entender.

—Perdóname, te juro que no quería entrar—se defendió nervioso. —Lo siento, Tina, pero joder...—

—Me quiero morir— dije histérica.

—¡No, no!— Exclamó acercándose.

—¡No te acerques!— le advertí, haciendo que retrocediera.

—Está bien. Si me necesitas, estaré afuera— dijo, alejándose y cerrando la puerta tras de mí.

Suspiré varias veces y caminé hacia el baño, donde tomé una larga ducha de agua caliente. Una vez lista, me envolví en una toalla, cambié las sábanas de mi cama y bajé las escaleras para lavar la ropa manchada. Cada movimiento era lento y doloroso, mis ovarios me hacían sufrir horrores. Arrastré mis pies hacia la cocina, donde encontré a Shawn comiendo una fruta.

—¿Qué estás haciendo, Tina?— Bufó. —Deberías estar en la cama—insistió. —¿Me haces el favor de volver a tu cama?

—¿Tu hermana?—Pregunté.

—Salió a caminar hace un rato—respondió. Asentí.

—Hazme el favor de volver a la cama— me ordenó. —Yo te llevaré algo para que comas—.

—No tienes que...— intenté decir, pero me interrumpió.

—Sí, debo— afirmó. —Ahora vuelve a la cama—

Suspiré y regresé a mi habitación, me tapé y me enrolle como un feto, sintiendo el dolor en mis ovarios y lamentando no tener pastillas. Minutos después, él regresó con una bandeja que contenía una taza de té y donas.

—Gracias— sonreí. —Y lamento haberte traumado hoy.

—Tranquila— dijo él. —Leí en internet que el chocolate y la bebida caliente calman el dolor.

—Aprecio mucho eso, Shawn— sonreí con ternura, admirando el hecho de que se tomara el tiempo para buscar información en Internet.

Se quedó conmigo hasta que terminé mi desayuno. Escuchamos a Aaliyah en la casa, así que él bajó a verla llevando los restos del desayuno.

Volví a mi posición fetal debido al intenso dolor, las lágrimas seguían cayendo. Sé que suena exagerado, pero no podía soportar el dolor. Shawn regresó y noté su expresión preocupada.

—Hay que llevarte al doctor—dijo, su rostro delataba su preocupación.

Negué.

—No te preocupes, son solo cólicos. Es normal, creo que en unas horas se me pasará—gemí de dolor. —El problema es que no tengo pastillas para el dolor—añadí con frustración.

Él se relamió los labios nervioso y tomó su celular. Después de revisar algo, fue al baño de mi habitación y comenzó a buscar algo. Lo observé confundida mientras buscaba frenéticamente. Después de unos minutos, regresó.

—¿Qué es eso?— Pregunté señalando lo que tenía en su mano.

—Leí en internet que agua tibia calma el dolor— respondió, mojando un paño en un recipiente.

—Aprecio eso—dije mientras tomaba el paño, pero él me detuvo, mirándolo confundida.

—Yo te ayudo— dijo.

No estaba segura de cómo sentirme al respecto, pero el dolor era abrumador. Me recosté y él se acurrucó detrás de mí, haciéndome cucharita, colocando el recipiente frente a mí. Cuando el paño húmedo tocó mi piel, sentí un estremecimiento. Mi respiración se volvió entrecortada y podía sentir su aliento en mi cuello.

Mi cuerpo empezó a relajarse y el dolor comenzó a desvanecerse. Esto era el paraíso. Hasta que caí profundamente dormida.

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¡ESTO ES UNA LOCURA! MUCHÍSIMAS GRACIAS, POR EL APOYO QUE LE DAN A LA NOVELA. EN SERIO, SE LO SÚPER AGRADEZCO DE CORAZÓN. NO SE CUMPLEN NI DOS MESES DE QUE EMPECÉ LA NOVELA, DIOS LAS AMO MUCHO!!! MUCHÍSIMAS GRACIAS!

amo el grupo de mis amigas, literalmente son la mejores del todo planeta, en verdad es como mí familia, las adoro mucho, Ari es el corazón del grupo, y alguien que admiro y aprecio mucho, ¡Anto reina! ella fue una de las primeras en leer mí novela, y la apoyó incondicional. te quiero bella. ¡y a todas! las que leen mí novela, y las que no, por qué aunque no la leean, siempre están felicitandome, y apoyándome! las tqm♥️

y ustedes, por darle una oportunidad y un poquito de su tiempo, a leerla, no saben lo que significa para mi, que ustedes la leean. en serio agradezco todo el tiempo que le dan, al leerla, votarla y comentar, me suben el autoestima a mil. !!!!!
que lindo fue Shawn aparecer en nuestras vidas, y formar este hermoso fandom.<33