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Benito🤭: tina, debemos hablar.
                                             ✓✓

joder.

ahora no puedo Shawn, estoy yendo con nathen a Canadá, para darle la noticia a sus padres.

Benito🤭: veme en unos días allá.

Suspiré y guardé el móvil.

—¿Lista, mi futura esposa? —dijo Nathen. Asentí. —Está bien. Abordemos el avión.

Agarró mis manos y subimos al avión con destino a la casa de Nathen, en Canadá.

Después de esas horas de vuelo, llegamos a nuestro destino, donde nos recibieron el padre y la hermana de Nathen, Madison.

—Hola, ¿cómo están? —dijo su padre.

—Hola —sonreí.

—Mar, déjame que te ayude con la maleta —dijo el hombre generoso y tomó mi maleta.

—¿Por qué traes esa cara? —me preguntó Madison.

—Es por el viaje —mentí.

Todos nos subimos al vehículo, y el señor Brown condujo hasta su residencia.

Al llegar, mi queridísima suegra me esperaba con donuts, aunque ella sabe mejor mi gusto que su hijo.

—La extrañé —dije mientras la abrazaba.

—Y yo a ti, linda —sonrió aceptando mi abrazo—. ¿Qué tal el viaje? —preguntó.

—Cansado —sonreí.

—Me imagino —dijo ella—. Chicos, vayan a dormir, yo les aviso cuando esté la cena —asentimos y fuimos hasta la habitación de Nathen.

Dejamos nuestras cosas a un lado, él me prestó una de sus remeras. Me cambié y nos acostamos.

—Te amo —susurró él.

—Yo también —respondí.

Aunque también amé a alguien más.


Unas horas más tarde, la mamá de Nathen llamó a la puerta para decirnos que la cena estaba lista. Me cambié y bajamos agarrados de la mano.

Nathen le contaba a su familia sobre su equipo de hockey, y hablaban de cosas que solo ellos entendían, mientras yo jugaba con los spaghetti.

—Hay algo que les queremos contar —dijo Nathen, llamando la atención de su familia mientras agarraba mi mano. Lo miré. No estaba lista para dar la noticia. Creo que debí haber esperado para aceptar la propuesta, es que el miedo me ganó.

—¿Qué ocurre, hijo? —dijo su padre. Ambos padres se miraron preocupados. Mordí mi labio inferior, temía por la reacción de ambos.

—Martina y yo nos casaremos —dijo, y todos permanecieron callados.

—¿Es un chiste? —dijo su hermana Kimberly —. No llevan ni un año juntos —se rió.

Conociéndote ~ SMWhere stories live. Discover now