➷ 𝚃𝚘𝚘 𝚢𝚘𝚞𝚗𝚐 𝚝𝚘 𝚗𝚘𝚝 𝚋𝚎 𝚊 𝚍𝚛𝚎𝚊𝚖𝚎𝚛 ➹ [Yoonmin]

◐●◑▽3▽◐●◑

- Horario flexible, turnos completos, limpio, friego, sé hacer ramen, ¿entregan a domicilio? Tengo licencia- dijo rápidamente- No pido contrato- esas tres últimas palabras eran mágicas para quien le empleara, podrían despedirlo en cualquier momento, el salario era irregular, y no debían pagar ningún seguro, ¿su moto se estrellaba en una entrega y acababa paralítico? No era problema del restaurante.

- Hmmm- la chica entrecerró los ojos indecisa- Bien, termina tu comida, te quiero en treinta minutos listo, muéstrame porque debería contratarte- le entregó un tazón que casi provoca que babeara la mesa, estaba hambriento- Si vales, te podrás llevar sobras, espero que eso te incentive lo suficiente.

 Yoongi quiso arrodillarse ahí mismo ante su salvadora, pero la voz de la razón le paró, "no cantes victoria tan rápido, claramente sales perdiendo en esta situación, incluso te está haciendo trabajar sin cobrar". A la mierda se colgaría de un clavo ardiendo si hace falta.

Terminó la comida en minutos, sorbiendo los deliciosos fideos que se deshacían en la boca y el caldo que calentaba su garganta, quizás en otro momento no le hubiera parecido tan exquisito, sin embargo, sintió gloria en su paladar.

- ¡Ya estoy!- la mujer, Sunmi, le señaló la puerta que llevaba al otro lado de la mampara. Al atravesarla, el calor de la freidora y el vapor concentrado del ramen le marearon en un instante.

- De momento quiero que friegues la vajilla, estamos en hora punta por lo que hasta dentro de unas horas no te dejarán de llegar platos, vasos... ya sabes. Limpia a conciencia pero no te demores demasiado, ¿lo has entendido?- asintió diligentemente- Buena suerte- y con una palmada en la espalda se marchó.

Se quitó la chaqueta y se enrolló las mangas, si pudiera, se hubiera sacado también los pantalones. El agua caliente quitaba la suciedad más rápido por lo que su cuerpo tendría que aguantar el infierno, el calor era realmente asfixiante, al menos se sentía afortunado de usar guantes. Se concentró completamente en la tarea, olvidándose de todo lo demás, solo importaba: quitar restos, mojar, enjabonar y aclarar. 

Sus manos se empezaron a mover mecánicamente tras un tiempo en el frenético ritmo y su cabeza se sintió aliviada de dejar los pensamientos ansiosos y deprimentes que masticaba como un chicle, Yoongi pensaba demasiado en las cosas, de una forma normalmente negativa, una vez comenzaba no podía parar hasta auto-destruirse. 

- ¡Chico nuevo!- uno de los cocineros se acercó y revisó minuciosamente su trabajo- ¿Cual es tu nombre?

- Min Yoongi- asintió con la cabeza conforme- Llevas tres horas, hijo, buen trabajo- hizo una reverencia agradecido sin dejar de fregar- Ven mañana sobre las doce, te enseñaremos algunas cosas y hablaremos sobre términos, ¿bien?

- Gracias, realmente se lo agradezco- el hombre le entregó un trapo para que se secara las manos.

- Sunmi, la beta, te dará la paga de hoy. Ella planeaba darte pollo frito, sin embargo, prefiero que uses el dinero en un desayuno normal- le dio una pequeña sonrisa- Mi nombre es Seojoon y soy el jefe del restaurante, por hoy la jornada ha terminado, ve a casa y descansa.

- De nuevo, gracias- sus ojos se cristalizaron.

❍-----❑❒❖❑❒-----❍

El camino al motel fue agotador, los músculos de sus brazos y piernas chillaban de dolor, había estado de pie sin tomar un descanso desde la mañana, y solo había tenido una comida en todo el día. Estaba muerto, y más le valía acostumbrarse pues esa era su nueva realidad. 

Subió las escaleras entre quejidos tortuosos y se dejó caer en el duro colchón, si ayer había estado mentalmente exhausto hoy su cuerpo había tomado el relevo de recibir la paliza. Mientras apagaba las luces, la pantalla de su teléfono se encendió iluminando la habitación. Él lo habría ignorado, de verdad, sin embargo, necesitaba escuchar su voz.

- Jimin- un grito ahogado le respondió.

- ¡¿Hyung?! Dios, estaba tan preocupado, ayer fui a tu apartamento porque cuando nos despedimos te vi decaído y quería darte una visita sorpresa pero no estabas y la casera me dijo que ya nadie vivía allí y te llamé pero no contestabas, hablé con Hobi y Joy pero ellos tampoco sabían y no he dejado de llamar todo el día porque nunca habías desaparecido de esta forma y siempre que vas a casa de tus padres me lo dices y... Dios- el omega tomó una bocanada de aire- ¡Quiero golpearte de lo mal que me lo has hecho pasar! ¡No te rías!- Yoongi aumentó sus carcajadas, lágrimas cayendo por sus mejillas- ¿Dónde estás?

- Amor- el omega calló- ¿Podemos hacer una videollamada? El wifi es gratis y la factura del teléfono me aterra- hubo un silencio incómodo.

- Siempre pensé que yo era el pobre de la relación- masculló en broma- Dame un segundo- su hermosa cara apareció en pantalla- Te ves cansado.

- Estoy en la oscuridad, apenas puedes verme- Jimin negó estirando los labios.

- Te conozco muy bien, estás cansado, ¿qué ha ocurrido?- Yoongi daría su alma por ir al otro lado y hundir su cara en el cuello del omega.

- Mi familia me ha renegado, les dije que era bisexual, bueno, ellos piensan que soy gay, y no les encantó mucho la idea- él no era de andarse por las ramas, siempre decía las cosas directamente y por mucho que el tema fuera humillante no sabía expresarse de otra forma- Me dejaron en la calle, sin dinero, y ya sabes que el dinero mueve el mundo, ¿no? Siento no haberte llamado antes- el rostro de su novio le partió el corazón- Hey, está bien, ellos igualmente lo hubieran hecho en un futuro, la cuerda ya estaba tensa, era cuestión de tiempo.

- ¿Dónde estás?- se lamió los labios nervioso.

- En un motel, a las afueras, creo que encontré trabajo, ¿no es genial?- Jimin frunció el ceño.

- Ven a mi casa, hablaré con papá, iré mañana a ayudarte a llevar tu equipaje. Si tenemos suerte te podrás quedar en mi habita-

- No voy a pedirle dinero a tu familia, ellos apenas me conocen y no tienen ninguna obligación en ayudarme, no les pondré en una situación tan incómoda.

❍-----❑❒❖❑❒-----❍