Granger

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LEER ANTES DE COMENZAR: 

Fic taekook.

√ EVITAR hacer comentarios relacionados a otros fanfics. Puede que haya coincidencia de años, nada más. Es incómodo para mí tanto como para otrxs autores que lo nombren en cada instancia, este fanfic es obra completamente mía, de mi cabeza, no me he inspirado en ningún otro, por lo cual les pido respeto en ese sentido. Aquellos comentarios serán eliminados. 

Contenido +18 en algunas ocasiones con lenguaje fuerte, leer bajo responsabilidad.

√ La obra es totalmente mía, no se permiten adaptaciones en NINGÚN tipo de plataforma.

√ Si hay errores ortográficos serán corregidos al terminar el fanfic, señalarlo con respeto.

√ Mi Instagram de autora en donde aviso actualizaciones o doy spoilers: @/bambijeoon

Aclaración: se tiene totalmente en cuenta que los personajes son totalmente ficticios, nada de esto es real ni está inspirado en algo que haya ocurrido entre los miembros.

¡Nueva fic! Me emociona mucho, espero que la reciban con mucho amor, pondré mi esfuerzo en ella sobre todo si veo comentarios lindos, me animan mucho :-) espero que les guste el desarrollo de esta y me tengan paciencia. Nos leemos. <3

[...]

Su nacimiento fue una noche buena para los hombres y mujeres que pudieron presenciarlo, 1 de Septiembre de 1960, el primer día bendito como muchos lo llamaron. Asistió la mayoría de los conocidos del sector, no es menos decir que casi todos. Muchos de sus familiares empotrando sus caballos solo para ser partícipe de aquello.

El parto fue doloroso y rápido, algo natural atendido por el único médico que asistía, el hombre Kim. La madre sintió un dolor extenderse casi hasta su alma, así lo relata ella con una conmemoración de orgullo, pues era uno de los recuerdos más frescos en su mente.

El doctor Kim estuvo desde el primer momento con la familia, sin dudar de su profesión al cortar el cordón umbilical, mostrando sus destrezas y profesionalismo en todo momento, dando así por inaugurado el nacimiento de otro niño.

Todos aplaudieron y lloraron. El hecho se celebró con gran demasía, había mucho vino fresco traído desde la misma huerta de la casa de los Jeon, mucho tabaco y la matanza de algunos animales del corralero para poder hacer una cena típica que alcanzara para casi cien personas, siendo el anfitrión de la noche el hombre Kim.

El nombre del muchacho fue todo un lío. El hombre Jeon deseaba que tuviera su mismo apelativo, a lo que la mujer se negó rotundamente diciendo que eso sería aburrido. Observó los pequeños luceros del pequeño ser entre sus manos, acarició con la yema de sus dedos su piel de porcelana y sus cachetitos hinchados, típico de un recién nacido indefenso.

Jeon Jungkook, centro o pilar de la nación, pureza infinita. Fue su abuela quien lo propuso, todos estuvieron de acuerdo sin más discusiones, tampoco cuestionaron el por qué de la elección, se guiaron por la más sabia del hogar.

Días después siendo parte de una rutina diaria de chequeo, el hombre Kim llevó a su pequeño hijo de cuatro años con él a la casa de los Jeon. Este, con su chupete en mano y sus ojitos rasgados de una forma felina, conoció por primera vez a Jeon Jungkook.

Sus manos son muy pequeñitas papá.

El hombre Kim asintió, tomándole la temperatura con un termómetro debajo de la axila al bebé sentado en la cama. Jeon Jungkook rio, debido a las cosquillas que esta acción le causaba. La baba cayó por su pequeña boca y balbuceó, queriendo cerrar sus ojos para dormir, casi cayendo en brazos del morfeo.

Está perfecto. Su temperatura es normal, el ritmo cardíaco está dentro de lo debido también —dejó a un lado su estetoscopio, colgándolo en su cuello—, este bebé está perfecto y sano.

Los padres sonrieron sin entender del todo qué significaba aquello que el hombre había dicho con tanta facilidad, pero por su tranquilidad pudieron ver que al parecer todo estaba bien con su hijo menor.

Gracias, doctor Kim. Le tenemos la canasta de huevos, para que se lleve y alimente bien a su familia.

Son muy considerados—expresó—, mi esposa estará agradecida. Taehyung también, ama los huevos directo de la granja, no puede comer los procesados.

Taehyung, siendo mencionado, abrió sus ojos de par en par y acotó de inmediato. —Tienen muchas vitaminas —mencionó.

El doctor asintió guardando todo de vuelta en su maletín, la visita había terminado. Los Jeon lo llevaron directo a entregarle la bandeja de huevos que habían dejado en la mesa a penas cantó el gallo de fuera a las 6 am.

Taehyung, curioso, se acercó al bebé en la cama. Vio como este se había vuelto a dormir con mucha facilidad.

Jungkook es un bebé muy dormilón, pensó.

Observó su respirar, era muy calmado. Sintió el típico olor a bebés nacidos, decidió acercarse un poco más a él para poder aspirarlo mejor, le gustaba. Lo olfateó con su pequeña nariz, sintiendo el aroma a leche que el bebé desprendía, sonrió, porque era muy bonito y él también quería oler así, a leche, como el bebé Jeon Jungkook.

Taehyung —llamó por la puerta de madera el mayor—, nos vamos. Ven.

Ya voy —susurró, para no despertarlo, se veía cómodo y calentito con esos zapatos de lana y unos guantes del mismo material tejidos por su abuela.

El hombre salió del cuarto dejándolo solo. El menor de cabello azabache tocó la diminuta mano de Jungkook. Era blandita.

Come todas tus comidas. Nunca dejes de oler a leche, papá dice que eso es bueno. Nos vemos en el futuro Jungkook, sé un buen bebé y no te caigas mucho, lastimarse deja muchas cicatrices.

Luego de esos pequeños susurros lo olfateó una vez más, dando por finalizada su visita. Se dejó caer al piso y corrió hacia su padre, el cual sentía hablar en el living de la casa campestre.

Esa sería la última vez que vería al bebé Jeon Jungkook en mucho, mucho tiempo.



Granger → taekook (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora