III.*

37.8K 3K 1.2K
                                    

CAPÍTULO CON (*) CAPÍTULO CORREGIDO.

Brooke Henderson.

La primera semana de clases, había pasado tan rápido que en este momento analizo que es sábado, mi día favorito de la semana, porque no tengo que levantarme temprano y puedo dormirme tarde.

Al mediodía decido salir de mi habitación, porque mi estómago comienza a rugir con mucha exigencia. Me estrujo los ojos mientras camino a la cocina.

—Buenos días.—Me sobresalto al escuchar una voz familiar.

Jace.

—¿Qué mierda haces aquí?

—Bonita pijama.—Me mira de arriba abajo.

Solo llevo el gran abrigo de mi hermano y unos calcetines de color morado.

—Ah, muchas gracias.—Respondo a su claro sarcasmo.

Camino hasta la cocina y escucho sus pasos detrás de mí.

—¿Qué tan difícil es verte sonreír?

—¿Por qué quieres verme sonreír?

—Quiero verle la sonrisa, ¿tienes algún inconveniente?

Sonrío genuinamente, y parece que él se contagia, porque también sonríe.

—Muchas gracias.

—¿Qué haces aquí?—Pregunto entrecerrando los ojos hacia él.

Él sonríe y me mira.—Lucas me invitó.

—¿Y no se le ocurrió decirme antes de que saliera así de mi habitación?—Me cruzo brazos.

—Estabas durmiendo.—Abre la nevera como si fuese de él y toma un jugo de manzana.

—¡Mamá!—Grito.— ¿Dónde está?

—Salió con tu hermana, que es menos antipática que tú.

—Susan es la persona más antipática del mundo.—Me defiendo.

—No conmigo.

—No es mi problema.

—Peínese.

Abro mi boca indignada.

—Te callas la boca.

—Cuando se peine.

—Bien, yo me iré de nuevo a mi habitación.—Musito hastiada.

—¿Por qué? ¿Te molesta mi presencia?—Pregunta con burla.

—¿Por qué te crees tan importante?

—Porque lo soy, rubia. —Me responde con una sonrisa come mierda, lame sus labios sin apartar su ojos de mi rostro.

—Pesado.

Me doy media vuelta y empiezo a caminar hacia mi habitación. Está hecha un desastre así que procedo a ordenarla, una vez lista, me ducho y me cambio de ropa, para volver a salir. Apenas estamos saliendo de verano, así que digamos que el clima es fresco. Un vestido de flores es mi mejor amigo en esta época.

Salgo de mi habitación el celular en la mano, lo que tengo son notificaciones de reseñas en Goodreads y pocos mensajes, también acabo de ser añadida al grupo de porristas por Whats.

—Veo... Que te cambiaste.—Jace me mira de arriba abajo.

—Veo que conseguiste un cerebro.—Ruedo los ojos y empiezo a caminar hacia la cocina.

¿Te quedas conmigo? ©️ (EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now