III.

26K 1.7K 1.8K
                                    

Han pasado tres meses

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Han pasado tres meses.

Tres meses donde apenas sé de él.

Solo sé que trabaja en una empresa de negocios muy reconocida de la parte limpia de su familia.

Y que al parecer se reencontró con su ex, Paige. Según Lucas actualmente están saliendo.

¿Escucharon eso? Fue mi corazón. La noticia me dolió, pero he intentado enfocar mi mente en todos los trabajos, ahogarme tanto en la universidad que no me dé tiempo para pensar en nada más.

Actualmente estoy viviendo en un hermoso departamento aquí en Inglaterra junto a mis hermanos, vamos a universidades diferentes, por suerte acudo a la misma universidad que Kathe.

Jace y yo tenemos muchos amigos en común, todos mis amigos son sus amigos, y aun así nos hemos evitado a toda costa, al menos yo he huido cada vez que él recoge a Kathe en la universidad.

Cuando él viene a mi departamento nunca salgo de mi habitación, o me las ingenio para salir de la casa. No puedo verlo sabiendo que ahora tiene novia, porque aún lo veo con esos estúpidos ojos de amor.

Pero era obvio que no podía evitarlo siempre, justo ahora estoy frente a él luego de abrir la puerta y ojalá estuviera en shock por él, pero no, estoy en shock porque ha traído a Paige a mi maldito departamento.

—¿Está Lucas?—Jace vuelve a preguntar sacándome de mi trance.

—E-eh.—Carraspeé.—Sí, sí pasen.

Paige es divina, su cabello cae sobre sus hombros de forma recta y es color castaño, sus ojos son color miel y sus labios son rosados y algo delgados, su color de piel es el de un perfecto bronceado de verano.

—Él se está dando un baño, lo pueden esperar en la sala.—Musité dispuesta a irme.

—Disculpa...—La voz de Paige era serena.—¿Me puedes dar un vaso de agua? Supongo que es tu casa.

Calma, sé educada.

—Por supuesto.—Empecé a caminar a la cocina para servirle el estúpido vaso de agua.

Una vez que se lo serví, me dispuse a llevárselo y actuar normal. Mis manos temblaban porque era el puto efecto que tenía Jace en mí aun cuando nunca fuimos nada.

—Toma.—Le entregué el vaso de agua y ella me susurró un gracias.

—¿Estás bien Bi.. Brooke?—Jace se corrigió.—Estás pálida.

—Estoy bien, nos vemos luego.

—Quédate, me encantaría conocerte.—Asegura Paige haciéndome cerrar los ojos con fuerza y darme vuelta.

La evalué y ella iba vestida con unas hermosas botas, un jean ajustado negro y un suéter blanco de cuello de tortuga.

Mirándome a mí yo solo llevaba una camiseta y un moño totalmente desaliñado. Mis piernas iban muy descubiertas y Jace no apartaba la mirada de ellas.

¿Te quedas conmigo? ©️ (EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now